Ante los distintos señalamientos que se han formulado en torno a las condiciones de seguridad en sus instalaciones, la Universidad Nacional Autónoma de México establece:
1.- El tema ha sido un asunto de constante preocupación y atención dentro de la esfera de atribuciones que tiene la Rectoría de esta casa de estudios.
2.- En forma sistemática, al detectar una actividad vinculada con el consumo, venta y distribución de drogas, se ha dado parte a las autoridades ministeriales correspondientes para el desahogo de las indagatorias respectivas.
En este sentido, en 2014 la Universidad detectó a 46 personas vinculadas con la posesión, consumo y venta de estupefacientes. Derivado de estas acciones, las instancias ministeriales abrieron seis averiguaciones previas que están en curso.
3.- En el campus, la UNAM ha desplegado campañas permanentes de concientización entre la comunidad para advertir de los riesgos que entraña para la salud el consumo de esas sustancias, y también en torno a las consecuencias legales que implica el tráfico de las mismas.
4.- Además de las labores de denuncia se han desarrollado tareas preventivas para el fortalecimiento de la vigilancia, que han incluido la instalación de postes de auxilio, la aplicación de programas como Sendero y Transporte Seguro, la instauración de protocolos y dispositivos para inhibir condiciones que favorezcan esas conductas ilícitas.
5.- También se ha realizado una labor sistemática de acercamiento con las autoridades de los gobiernos federal y locales, enfocada a la prevención del delito y, además, a la aplicación de la ley cuando se incurre en estas conductas.
6.- La Universidad está atenta al avance de las acciones que realizan las autoridades respectivas para que la ley se aplique, con prontitud, a los responsables de ilícitos que, en la mayoría de los casos, involucran a personas ajenas a la institución.
—oOo—
