Frente a la situación en el plantel
Naucalpan del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH), la Universidad
Nacional informa que la Comisión Local de Seguridad tiene plena
disposición de analizar todas las propuestas que haga la comunidad,
que contribuyan a mejorar las condiciones de seguridad de alumnos,
maestros y trabajadores.
No obstante, externa su rechazo a cualquier
acto de violencia, y señala que debe privilegiarse el diálogo
y el consenso, como vías para resolver cualquier diferencia.
En este sentido, establece que la serie de
disposiciones que se han aplicado en el Colegio, aprobadas en la sesión
de la Comisión del pasado 14 de junio, obedecen a la responsabilidad
institucional de cuidar y vigilar la seguridad e integridad de la
comunidad en su conjunto.
Al respecto, se determinó requerir
identificación para integrantes de la comunidad y quienes no
forman parte de ella.
También, la tarea que despliegan las
brigadas de seguridad –integradas por académicos, trabajadores
administrativos, funcionarios y padres de familia- busca sensibilizar,
a través del diálogo tolerante y respetuoso, para que
haya un espacio libre de tabaco, drogas y alcohol. La presencia de
estas brigadas disminuirá en la medida en que mejore la atmósfera
de tranquilidad, como se ha observado en las últimas tres semanas.
Los equipos de seguridad y protección,
como extintores y cámaras, entre otros, tienen como función
exclusiva la protección ante contingencias físicas o
civiles.
Las determinaciones de la Comisión
incluyen campañas informativas y conferencias para insistir
en la necesidad de contar con un entorno sano y seguro.
Además, la dirección del plantel
está en pláticas con las autoridades respectivas mexiquenses
para regular la operación segura del transporte público
concesionado. En tanto, habrá servicios directos para la comunidad
del CCH.
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