La pérdida de biodiversidad nos empobrece y mina
la capacidad de los sistemas de vida, de los que dependemos para
resistir las crecientes amenazas como inundaciones, sequías,
contaminación, y seguridad alimentaria, advirtió
la coordinadora del Programa Universitario del Medio Ambiente
(PUMA) de la UNAM, Mireya Imaz Gispert.
Asimismo, indicó que el cuatro por ciento de
la deforestación total mundial ocurre en México.
Tan sólo de 1980 a 1990 desaparecieron 700 mil hectáreas
de selvas tropicales a nivel nacional. En el mismo período,
en Colombia se extinguieron 890 mil hectáreas, y en Brasil,
dos millones 530 mil.
Por ende, subrayó, la diversidad del planeta está
en grave riesgo, porque aquellos países en donde se alberga
la mayor variedad, es en los que están ocurriendo las tasas
de deforestación más elevadas.
Todos estos cambios han alterado la diversidad biológica
de la Tierra y muchas especies se han extinguido o han sido eliminadas
de múltiples hábitats; la extinción es un
fenómeno natural pero está ocurriendo a una tasa
desproporcionada, advirtió.
La especialista señaló que, a nivel global,
25 por ciento de los suelos se encuentran degradados; 50 por ciento
de las cubiertas forestales y de los humedales han desaparecido;
y 70 por ciento de los bancos de peces comerciales más
importantes están sobreexplotados o capturados a su nivel
máximo sostenible.
Se estima que, en México, existen 212 mil 900
especies, lo que significa más del 10% de la biodiversidad
del planeta ocupa el segundo lugar en reptiles, y el cuarto en
mamíferos, anfibios y plantas.
En la conferencia Año internacional de la biodiversidad,
también se dio a conocer que México posee 26 mil
especies de plantas vasculares, 284 de anfibios, 717 tipos de
reptiles, y 450 variedades de mamíferos.
Nuestro país, forma parte de las cinco naciones
en el mundo denominadas megadiversas, junto con Colombia, Brasil,
China y Australia, principalmente debido a la distribución
del relieve montañoso que le da al territorio nacional
una amplia diversidad de ambientes, suelos y climas, además
de los mares.