13:00  hrs. 29 de Marzo de 2007

  

Boletín UNAM-DGCS-189

Ciudad Universitaria

 

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EL USO Y CONSERVACIÓN DEL RECURSO HÍDRICO, PRINCIPALES PROBLEMAS DEL AGUA

 

·        Indicó Julia Carabias Lillo, profesora de la Facultad de Ciencias de la UNAM

·        Se registra un deterioro de sus volúmenes en la medida en que hay un cambio de uso de suelo por deforestación y erosión, dijo

·        Participó en la sesión de clausura del Seminario Agua, economía y territorio, en la Facultad de Economía, acompañada por los titulares de la FE, Roberto Escalante, y del PUEC,  Manuel Perló

 

El principal problema del agua no es su disponibilidad, sino el uso y conservación del recurso hídrico, por lo que la humanidad se aproxima a una crisis,  aseguró Julia Carabias Lillo, profesora de la Facultad de Ciencias de la UNAM.

 

La ex secretaria de Medio Ambiente expuso que estos volúmenes registran un deterioro en la medida de que hay un cambio en el uso de suelo por deforestación y erosión, así como por el asolvamiento de los cuerpos líquidos. Ellos “se desvían, contaminan y sobreexplotan”.

 

Al participar en la sesión de clausura del Seminario Agua, economía y territorio –organizado por la Facultad de Economía (FE), el Programa Universitario de Estudios sobre la Ciudad (PUEC) y el Posgrado de Economía, así como por la Universidad Nacional Agraria La Molina, Perú– recordó que a pesar de que el planeta está cubierto en 70 por ciento por agua, la mayor parte (97 por ciento) es salobre y se ubica en mares y océanos; sólo el 2.5 es dulce.

De esta última, casi el 70 por ciento está congelada y 30 por ciento es subterránea, la mayoría a distancias inaccesibles y por lo tanto no aprovechables. De esa forma, “a final de cuentas sólo el 0.3 por ciento del líquido dulce está disponible, y del gran total del planeta sólo el 0.01 por ciento”, añadió la también participante en la Organización No Gubernamental Ceiba, acompañada por los directores de la FE, Roberto Escalante, y del PUEC, Manuel Perló.

 

Es un problema mundial y 40 por ciento de la población vive ya en ”estrés hídrico”, puntualizó. En las próximas cinco décadas se van a incorporar otros tres mil millones de personas que demandarán agua, servicios y alimentos. Si la tendencia actual de uso continúa, se tendrán problemas serios. Para 2025, más de la mitad de la humanidad padecerá condiciones de severa escasez.

 

Carabias Lillo explicó que poco menos del 30 por ciento del líquido que se precipita está disponible para el consumo; el resto entra al ciclo hidrológico. De esa manera, en México se tienen mil 500 kilómetros cúbicos anuales, de los cuales se evapotranspiran mil 84; 350 van a escurrimientos y 77 a la recarga de acuíferos.

 

La disponibilidad per cápita en nuestro país, como promedio nacional, ha diminuido desde 1955, cuando era de 11 mil metros cúbicos por habitante por año, a 4.2 mil en la actualidad; para el 2025 serán sólo 3.8 mil metros,  agregó.

 

Además, aclaró la experta, la nación está dividida por un fuerte contraste de disponibilidad en el norte y centro, donde se concentra la mayor parte de la población y se produce el 85 por ciento del Producto Interno Bruto, y el sur, donde hay, en promedio, 13 mil metros cúbicos por habitante por año. “Ello obliga a pensar regionalmente en la planificación”.

 

La bióloga expresó que los temas críticos en torno al agua deben abordarse de manera prioritaria. De hacerlo, y encontrar una solución en el mediano plazo, se resolverá una buena parte de los problemas nacionales.

 

 

 

Los puntos críticos son la conservación del ciclo hidrológico, donde se incluye la delimitación de las cuencas y su preservación. “Es necesario recuperar áreas protegidas, las cuales ocupan sólo el 8 por ciento del territorio, aunque debería ser, en función de la biodiversidad y las cuencas, del 20”, apuntó.

 

Un segundo factor es el uso: 77 por ciento se emplea para fines agropecuarios, 13 para doméstico y 10 para la industria. El líquido proviene en 62 por ciento de la superficie y 38 del subsuelo, dijo.

 

No obstante, la subterránea abastece al 70 por ciento de la población, a una tercer parte del riego y a 24 por ciento de la industria, a pesar de que su cantidad es menor. Por ello, la mayoría de los acuíferos en la zona centro y norte están sobreexplotados y no se sabe qué pasará con la demanda futura, alertó.

 

Al respecto, precisó que se usa el agua de este origen de manera ineficiente, ya que se pierde entre el 40 y 60 por ciento por problemas de conducción y deficiencia tecnológica en el regadío.

 

Otro punto es la falta de calidad. Se sabe que entre dos y cinco millones de personas mueren al año en el mundo por esa causa. En México, 70 por ciento de los cuerpos de agua están contaminados, y el tratamiento es de sólo 23 por ciento. Urgen mejores mecanismos de monitoreo que detecten los microorganismos nocivos para la salud, y optimizar los procesos de limpieza, advirtió.

 

Ante ese panorama Julia Carabias dijo que se requiere el diseño de una estrategia integral de los recursos hídricos. El Estado debe ser rector del agua; es su responsabilidad garantizar tal bienestar social y la conservación del recurso, y la gestión debe ser incluyente, que prevenga los conflictos, aclaró.

 

Por su parte, Manuel Perló, director del PUEC, sostuvo que se intenta formar una red de investigadores y “la realización de esta actividad académica es un precedente para lograrlo. Se espera que esta comunicación continúe y se mantenga el intercambio, de forma que haya nuevas oportunidades para reunirse en torno a este tema, central para nuestros países”.

 

A su vez, Clemente Ruiz, coordinador del posgrado en Economía, concluyó que la macroeconomía se refiere al desarrollo sustentable como un apéndice. Por ello, se necesita construir una nueva ciencia económica, donde sea tratado el asunto del agua.

 

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FOTO 1

 

Julia Carabias y Roberto Escalante en la clausura del Seminario Agua, economía y territorio en la UNAM. Ahí la experta dijo que los principales problemas del agua son su uso y conservación.

 

 

FOTO 2.

 

Manuel Perló, Julia Carabias, Roberto Escalante y Clemente Ruiz durante la clausura del Seminario Agua, economía y territorio en la UNAM.