Boletín
UNAM-DGCS-059
Ciudad
Universitaria
Pies de foto al final del boletín
TOMA
POSECIÓN EL DIRECTOR DE LA ESCUELA NACIONAL DE ENFERMERÍA Y
OBSTETRICIA DE LA UNAM
·
Severino Rubio Domínguez fue designado por
la Junta de Gobierno para un segundo
periodo
·
Le dio posesión del cargo Enrique del Val,
secretario general de la Universidad Nacional
·
Al asumir la dirección, Severino Rubio
subrayó que México necesita más y mejores enfermeras para atender la demanda
creciente de sus servicios
El secretario general de la
UNAM, Enrique del Val, dio posesión a Severino Rubio Domínguez como director de
la Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia (ENEO) para el periodo
2007-2011, cargo para el cual fue designado por la Junta de Gobierno.
Durante su mensaje, Enrique
del Val destacó la participación de todos los sectores que integran la Escuela,
lo que permitió llevar a cabo un proceso claro y transparente, que demuestra la
fortaleza de esta entidad universitaria.
“Estamos seguros que el
proyecto que el director presentó ante la Junta de Gobierno podrá llevarse a
cabo, para lo cual contará con el apoyo de la administración central. Ello
permitirá que en los próximos años esta Escuela se siga engrandeciendo”,
afirmó.
Al asumir la dirección,
Severino Rubio subrayó que México necesita más y mejores enfermeras para
atender la demanda creciente de sus servicios, lo cual sólo es posible a través
de una vinculación más eficaz. Para ello, es importante compartir recursos
técnicos, tecnológicos y especializados para un fin común.
Dijo que esa será la
estrategia para mejorar la oferta educativa, la investigación y la ubicación de
los egresados de la ENEO. “Debemos estudiar y proponer un reordenamiento
académico-administrativo, orientar algunos cambios internos, y así establecer
una Escuela de mayor presencia y participación en la sociedad mexicana”.
Además, añadió, hay que
esforzarse por conseguir que esta profesión y la Escuela sean una opción
atractiva para los jóvenes de hoy, donde los alumnos se encuentren satisfechos
con las instalaciones y los recursos que apoyan su aprendizaje; pero, sobre
todo, con la calidad de sus profesores.
Rubio Domínguez sostuvo que la
ENEO tiene rumbo y se orienta a encontrar una mayor eficacia en la función
académica, alcanzar más competitividad institucional por la excelencia de sus
egresados y el alto nivel de especialización de los programas.
Asimismo, una mejor
funcionalidad mediante la ampliación de las relaciones con la sociedad y con el
sistema de salud, y lograr un nivel óptimo de eficacia en sus funciones
internas, que comprenden utilizar adecuadamente los recursos, la experiencia y
las potencialidades de su planta docente, agregó.
En el auditorio de la ENEO,
comentó que la enfermería requiere del compromiso y disposición de los cuerpos
académicos para cumplir con la misión institucional de formar profesionistas
con mayor fortaleza científica y humanística, que les permita incidir en la
solución de los problemas de salud más apremiantes que enfrenta la sociedad
mexicana.
La solidez de las
instituciones de educación superior y su capacidad para cumplir con los niveles
de excelencia dependen del grado de consolidación de sus claustros académicos,
para lo cual es indispensable vincularse con intereses y objetivos comunes, a
fin de cumplir mejor con sus tareas educativas, de investigación, asesorías y
servicios de apoyo al aprendizaje, resaltó.
“El trabajo aislado, los
proyectos individuales, la docencia y la investigación atomizada contribuyen
poco al avance institucional y se pierden del enriquecimiento intelectual que
aporta la labor colectiva”, indicó.
Consideró que los
departamentos o claustros constituyen la fuerza motriz de las facultades y
escuelas de la Universidad, y son quienes contribuyen a la construcción de
ambientes académicos, al diseño de proyectos de docencia y líneas de
investigación, a sustentar la calidad de los procesos educativos del pregrado y
posgrado, y representan la posibilidad de cumplir con los objetivos de
desarrollo.
El director admitió que para
fortalecer la licenciatura, la funcionalidad del plan único de especialidades,
la calidad del proyecto de educación abierta y a distancia, así como la
maestría, es indispensable establecer el funcionamiento de una nueva organización
académica.
Aseguró estar convencido de la
capacidad de trabajo en la ENEO, que tiene una dinámica propia, pero en función
de cumplir con la responsabilidad, sus integrantes deberán caracterizarse por
ser representantes de esa visión de
Escuela que se quiere y que la sociedad necesita.
Finalmente, agradeció la
responsabilidad de dirigir la ENEO, “es la más importante realización
profesional y académica que puede darnos la Universidad Nacional”.
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FOTO 01.
El secretario
general de la UNAM, Enrique del Val, dio posesión a Severino Rubio Domínguez
como director de la Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia para el
periodo 2007-2011.
FOTO 02
Enrique del Val,
secretario general de la UNAM –acompañado por Severino Rubio–, destacó la
participación de todos los sectores de la ENEO en el proceso de elección de
titular, lo que demuestra su fortaleza.
FOTO 03
Severino Rubio Domínguez, director de la ENEO de la UNAM, comentó que la enfermería requiere del compromiso de los cuerpos académicos para formar profesionistas con mayor capacidad científica y humanística.