Boletín UNAM-DGCS-257
Ciudad Universitaria
![]() |
![]() |
![]() |
Pies de fotos al final
del boletín
IMPULSAN
UNIVERSIDADES DE LATINOAMÉRICA Y EL CARIBE PLATAFORMA REGIONAL DE INVESTIGACIÓN
·
Se busca la conjunción de los diferentes
grupos de trabajo sobre áreas de frontera
·
Afirmó Axel Didriksson, director del CESU de
la UNAM y coordinador de la Red de
Macrouniversidades de América Latina y el Caribe
·
Comentó que se están rompiendo paradigmas de
cómo se hace la ciencia y la investigación en la región
·
Algunos temas prioritarios son:
gobernabilidad, neurociencias, ciencias genómicas, nanotecnología, integración
económica y desigualdad social
Representantes
de 20 universidades nacionales de América Latina y el Caribe acordaron unificar
esfuerzos y desarrollar, por primera vez, una plataforma regional de
investigación científica que haga factible la conjunción de los diferentes
grupos de trabajo sobre áreas de frontera.
Lo
anterior lo dio a conocer Axel Didriksson Takayanagui, coordinador general de
la Red de Macrouniversidades de América Latina y el Caribe, y director del
Centro de Estudios sobre la Universidad (CESU) de la UNAM, luego de la primera
reunión que sobre la materia se realizó en el puerto de Mazatlán, Sinaloa.
Comentó
que por primera vez existe en la zona, desde las universidades nacionales, una
plataforma multilateral. “Estamos rompiendo paradigmas de cómo se hace la
ciencia y la investigación, ya que por lo general en las instituciones éstas la
realizan individuos en su taller, cubículo o laboratorio trabajando su propio
proyecto, a veces de forma asociada o en redes”.
Ahora,
el punto de partida es colectivo, regional, en red y desde la perspectiva del
bien público; es decir, para producir conocimientos no privados, ni de
beneficio para empresas determinadas, sino aquello que se produzca, científico
y tecnológico, sea útil para la sociedad, refirió.
Para ello, abundó, se formó el Consejo
Latinoamericano de Investigación Científica (CLIC), integrado por
representantes de las cinco subregiones en que está organizada la red: Cono
Sur, Sector Andino, Centroamérica, Caribe y México.
Destacó
que el CLIC tiene como funciones: evaluar, promover, conseguir recursos,
desarrollar criterios de certificación de calidad de la ciencia, y promover los
programas y proyectos de investigación científica de la Red.
En el
encuentro se definieron 10 prioridades en el ámbito de la investigación, entre
otras: gobernabilidad, nueva ciudadanía y sociedad civil, neurociencias,
ciencias genómicas, nanotecnología, ciencias de la Tierra, desarrollo
sustentable, medio ambiente, integración económica, y desigualdad social.
Son
áreas amplias sobre las que se decidió trabajar. De hecho, añadió, ya se tiene
una universidad responsable para cada uno de los temas, y a más tardar en
noviembre será necesario organizar una reunión para que los investigadores que
se envíen de toda la región preparen los proyectos respectivos.
Axel
Didriksson precisó que con estos planes se elaborará un Programa de
Investigación Científica regional. Ello permitirá tener una estructura, con un
conjunto de prioridades y acciones establecidas, con tiempos y metas claras.
Posteriormente
se buscará el financiamiento correspondiente y el fondeo. De hecho este ámbito
ya se está explorando, “tenemos algunos mecanismos y agencias con interés en
apoyar y cooperar para el desarrollo de estas investigaciones”, expresó.
Subrayó
que la Universidad Nacional participará en líneas de manera directa, como
genoma y nanotecnología. Otras instituciones estarán encargadas del resto de
los proyectos.
El
funcionario de la Red Latinoamericana explicó que los criterios para elegir las
áreas de conocimiento fueron: que tuvieran gran impacto en la resolución de
problemas regionales y que en las universidades hubiera grupos de
investigadores y masas críticas consolidadas.
Durante
el proceso, cada universidad expuso los temas en los que tienen mayor fortaleza
y aquellas en que trabajaban sus especialistas más connotados. Se hizo una
selección y se discutió su trascendencia económica, social, política, cultural
y geográfica.
Asimismo,
se determinó que los proyectos fueran interdisciplinarios, de relevancia
académica pero también de relevancia en la colectividad y financiera. “Hay una
orientación por hacer de la investigación un desarrollo sustentado en el
contexto de su aplicación, y no sólo de avance teórico en la ciencia”, acotó.
Es
necesario que se avance teóricamente, pero que también esté adecuada al
contexto de su aplicación, de tal manera que en el corto y mediano plazos sea
factible contar con propuestas concretas de la Red para trabajar alternativas
de superación de problemas en la región, en educación, cultura, medio ambiente,
tecnologías, ciencia y conocimiento en general.
Detalló
que éste es el cuarto programa que desarrolla la Red de Macrouniversidades en
los últimos dos años. Uno es el de movilidad universitaria en el posgrado para
Latinoamérica y el Caribe, que cuenta con un fondo de 600 mil dólares.
El
segundo es la creación de usos multimedia para presentar y difundir el legado
del patrimonio histórico de las macrouniversidades, ya que son éstas, las
instituciones poseedoras de una gran riqueza e identidad nacional, agregó.
Otro
más es la creación de una base de datos u observatorio con los principales
indicadores de la Red, de todas las macrouniversidades, también en marcha,
indicó.
Externó
que en el corto plazo todos estos programas, incluyendo el de la investigación
científica, se deben presentar al Comité Ejecutivo de la Red, durante el
Encuentro Internacional de Educación Superior, organizado por la UNAM, y dentro
del cual se llevará a cabo la Segunda Reunión de dicho Comité, para su
discusión.
En el
mediano plazo, se entregarán los resultados de las reuniones que se realizarán
en cada universidad. “Elaboraremos el programa general y después convocaremos a
una segunda reunión de los responsables de investigación, para expones las
actividades, la estrategia y lo resuelto por los especialistas”.
Axel
Didriksson afirmó que el contar con apenas poco más de dos años, los hace la
red de universidades más joven y dinámica en América Latina y el Caribe.
La UNAM
ejerce en este organismo un liderazgo compartido, porque “tenemos iniciativas,
apoyos y cooperación con todas las instituciones que la conforman. La
Universidad quiere ser consecuente con su vocación latinoamericanista. Tenemos
una identidad regional, problemas comunes, casi hablamos un mismo idioma, y
hemos encontrado una gran afinidad”, concluyó.
– o0o –
FOTO 01.
Axel Didriksson
Takayanagui, director del CESU de la UNAM, dio a conocer los esfuerzos de 20
universidades nacionales de América Latina y el Caribe para desarrollar una
plataforma regional de investigación científica.
FOTO 02
El coordinador
general de la Red de Macrouniversidades de América Latina y el Caribe, Axel
Didriksson, afirmó que con la colaboración de instituciones de la región se
rompen “paradigmas de cómo se hace la ciencia y la investigación”.