Boletín UNAM-DGCS-201
Ciudad Universitaria
Pies de fotos al
final del boletín
NECESARIAS, INVERSIÓN PÚBLICA Y REFORMA ACADÉMICA PARA LA EDUCACIÓN SUPERIOR EN MÉXICO
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Debe efectuarse en términos cualitativos y
curriculares, afirmó Rosaura Ruiz, secretaria de Desarrollo Institucional de la
UNAM
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Inauguró el Primer Congreso sobre la
Investigación en Facultades y Escuelas, que contó con la presencia de titulares
de diversas entidades universitarias
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Ambrosio
Velasco afirmó que esta actividad académica es un punto de inflexión importante
en la historia de la Universidad
El desarrollo del país
requiere de una mayor inversión pública en educación superior y de profunda
reforma académica en términos cualitativos y curriculares, afirmó Rosaura Ruiz,
secretaria de Desarrollo Institucional de la UNAM.
Al inaugurar el Primer
Congreso sobre la Investigación en Facultades y Escuelas, acompañada por
Ambrosio Velasco y Juliana González, director de la Facultad de Filosofía y
Letras (FFyL) y profesora emérita, respectivamente, la funcionaria consideró
que esta transformación implica innovación pedagógica con el fin de lograr en
los alumnos la creatividad en las concepciones, las técnicas de la disciplina y
su aplicación. Además, que agilice y dote de mayor eficiencia a los procesos
académicos y administrativos.
En el plano curricular supone
la articulación entre todos los niveles de estudio para construir un programa
integral. Para ello, es necesario que los planes de trabajo se conciban y
elaboren como un continuo de bachillerato a doctorado, sin demérito de las
salidas intermedias, precisó en el Aula Magna “Fray Alonso de la Veracruz” de
la FFyL, donde se dieron cita titulares de diversas facultades y escuelas.
Visto de este modo, la
educación en la UNAM no está sólo destinada a formar recursos humanos, prepara
integralmente a hombres y mujeres para la investigación, docencia y práctica
profesional de alto nivel, con capacidades de pensamiento complejo y crítico
para la creación y recreación del conocimiento, subrayó.
De esta manera, indicó, se
propone egresar a profesionales comprometidos con la realidad que contribuyan
al avance de la ciencia, la tecnología, las humanidades y las artes, y
coadyuven al reconocimiento y a la solución de los problemas nacionales, para
lograr la construcción de un país más justo, democrático y equitativo.
Por lo tanto, la Universidad
Nacional refuerza en lo jurídico, administrativo y académico, sus valores, como
la pluralidad, interculturalidad, equidad y responsabilidad social, aseveró.
Así, una característica
distintiva de la instrucción en nuestra Universidad es que se realiza en un
ambiente de producción de conocimiento original, valioso en sí mismo, y de
búsqueda permanente de su aplicación para coadyuvar a la solución de los
grandes rezagos, enfatizó.
De ahí la importancia del
trabajo conjunto entre escuelas, facultades, centros e institutos para la
formación de nuestros bachilleres, licenciados, maestros y doctores, aseguró.
En la UNAM, indicó, la
investigación se relaciona con la docencia, no sólo porque la nutre sino porque
garantiza, además, la continua actualización curricular, asegura un alto nivel
académico, fortalece el desarrollo del profesorado, trasmite al aula el rigor
metodológico y perfecciona los procesos de enseñanza-aprendizaje.
De este modo, subrayó, se convierte en un
importante medio educativo. Es su ejercicio el que señala pertinencias
metodológicas en la formación y el desempeño profesional, y ofrece puntos de
referencia para resolver retos.
Por ello, esta actividad
universitaria debe fortalecer el equilibrio entre sus estructuras y condiciones
básicas y las del conocimiento social, económico, cultural y político de
México, así como promover en la sociedad una cultura científica y tecnológica,
aseveró.
En ese sentido, acotó, la perspectiva
de trabajo de grupos permitirá afianzar el tejido social de nuestra
Universidad, al poner énfasis en la cooperación y el diálogo.
Por ello, su consolidación
requiere conocer sus características y particularidades; las condiciones
académicas y administrativas en las cuales se desarrolla; los horizontes que la
alientan y las problemáticas que la aquejan; así como imaginar soluciones,
idear estrategias y promover propuestas que redunden en su beneficio,
puntualizó.
Los resultados de este
proceso, resaltó, serán la base para elaborar en forma conjunta las propuestas
conducentes a fortalecer la educación y darle un carácter innovador,
multidisciplinario y flexible.
En su oportunidad, Ambrosio
Velasco afirmó que este primer Congreso es un punto de inflexión importante en
la historia de la Universidad, entre otras razones porque es un justo y
merecido reconocimiento al trabajo de investigación realizado en facultades y
escuelas.
Es una distinción a una
actividad que estas instancias efectuamos a la par de la docencia y formación.
Desde luego, este merecimiento no va en detrimento de la labor realizada por
los centros e institutos de esta casa de estudios, concluyó.
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PIES DE FOTO
FOTO 01
Ambrosio Velasco,
Rosaura Ruiz y Juliana González durante la inauguración del Primer Congreso
sobre la Investigación en Facultades y Escuelas, efectuado en la UNAM.
FOTO 02
El desarrollo del
país requiere de una mayor inversión pública en educación superior y de
profunda reforma académica, afirmó Rosaura Ruiz, secretaria de Desarrollo
Institucional de la UNAM.