Boletín UNAM-DGCS-755
Ciudad Universitaria
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FUNDAMENTAL,
LA PRESENCIA DEL TEMA LABORAL EN LA GLOBALIZACIÓN
· No puede ser exclusivamente económica. Siempre estarán presentes otros temas de igual relevancia
·
Se incluyó en el TLC a petición de Estados
Unidos como medida para controlar las posibilidades del flujo de mano de obra
que pudiese desplazar a la norteamericana
·
Las empresas transnacionales no tienen
patria, por lo que el Estado queda imposibilitado para frenar o regular las
actividades de tales compañías
La globalización no puede ser
exclusivamente económica; la presencia del tema laboral es indispensable.
Siempre involucra otros rubros de igual importancia, señaló Alfonso Bouzas, del
Instituto de Investigaciones Económicas (IIEc) de la UNAM.
Durante su conferencia
realizada en la sala “Isabel y Ricardo Pozas” de la Facultad de Ciencias
Políticas y Sociales (FCPyS), recordó que en las condiciones planteadas en el
Tratado de Libre Comercio (TLC) los asuntos laboral y ecológico se incluyeron a
petición de Estados Unidos. El primero para intentar controlar el flujo de mano
de obra que pudiese desplazar a la fuerza norteamericana.
Sin embargo, el trabajador
mexicano hace otro tipo de actividades. De hecho, la migración tiene que ver
con la demanda del vecino país.
A decir del especialista,
existe un gran número de connacionales, por lo menos en la parte sur de esa
nación, que de manera mediata han obtenido derechos laborales y, a largo plazo,
políticos, que se traducen en votos en las próximas contiendas electorales.
Ahí está la esencia del por
qué el TLC no se pudo suscribir sin un llamado acuerdo paralelo: ACLAN, Acuerdo
de Cooperación Laboral de América del Norte. Esto nos habla de que la
globalización no puede ser únicamente empresarial, aseveró.
Del mismo modo, dijo, la nueva
fase del sistema capitalista ya no responde a las expresiones marxistas
leninistas; la raíz territorial de los consorcios se pierde y acude a los
mercados atendiendo a las posibilidades de comercialización.
“Las transnacionales no tienen
patria, por ello el Estado queda imposibilitado para frenar o regular sus
actividades. A consecuencia, los acuerdos globales tendrán que ser más
integrales”, explicó.
Destacó que es innecesaria la
inclusión de una cláusula de respeto a la legislación nacional en los convenios
internacionales. No se hacen efectivos los reclamos por violación a los
derechos laborales.
Desde 2002 a la fecha se han
presentado 25 quejas contra empresas extranjeras por discriminación, trabajo
infantil en materia de seguridad social, entre otras. Sin embargo, a pesar de
haberse pactado ese respeto en las leyes locales, esas firmas no fueron
sancionadas, reveló.
Por lo que respecta a los
sindicatos, añadió, actualmente los independientes pugnan por una
internacionalización de los contratos laborales en este contexto.
Al referirse a China, señaló
que México tiene pocas posibilidades de competencia, pues “no tenemos capacidad
para contender dadas las características de su producción y forma de
relacionarse internamente en el aspecto laboral, lo que permite que su
desarrollo industrial se base en un sistema de gran explotación, en una
relación capital-trabajo ajeno a la modernidad”, finalizó.
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PIES DE FOTO
FOTO 01
Alfonso Bouzas Ortiz, del IIEc de la
UNAM, señaló que la globalización no puede ser exclusivamente económica; la
presencia del tema laboral es indispensable. Siempre involucra otros rubros de
igual importancia.
FOTO 02
El tema laboral fue incluido en el TLC por presiones de Estados Unidos para frenar los flujos de inmigrantes que desplazasen a los trabajadores norteamericanos, aseguró el catedrático Alfonso Bouzas.