Boletín UNAM-DGCS-703
Ciudad Universitaria
Pies de fotos al final del boletín
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En México, 75 por ciento del territorio presenta
condiciones áridas o semiáridas: Carlos Trejo, del Colegio de Posgraduados
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Una alternativa es el sistema hidroponia de
raíz dividida, que en cultivos de jitomate ha permitido el ahorro del 25 por
ciento del líquido y mejora el fruto
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Cuando a un vegetal le hace falta
hidratación se reduce su crecimiento y se inhiben sus procesos bioquímicos y
fisiológicos, como la fotosíntesis, hasta provocar la muerte
Científicos universitarios
buscan hacer más eficiente el uso de agua en la agricultura mediante la
fisiología de las plantas, informó el doctor Carlos Trejo, del Colegio de
Posgraduados. Para ello, añadió, se ha comenzado a probar el sistema hidroponia
de raíz dividida.
Explicó que ese método ha mostrado un
ahorro del 25 por ciento en líquido necesario para la obtención de jitomate,
además permitió mejoras en las características del fruto, como dureza y
dulzura, las cuales aumentaron en alrededor de 50 por ciento.
Al dictar una conferencia en
“La Capilla” del Museo de las Ciencias Universum, el experto resaltó esta
innovación al considerar que el 75 por ciento del territorio presenta
condiciones áridas o semiáridas, además de permanentes sequías.
Aunque la desertificación es
un problema de carácter global, sus soluciones, prevención y control deben ser
resultado de acciones locales, reconoció.
Ante ello, el sistema de
hidroponia de producción intensiva, conocido y usado en todo el mundo, consiste
en hacer crecer plantas sin suelo, en substratos inertes, como la piedra de
tezontle. Posteriormente se aplican los nutrientes en solución.
La novedad en este método,
explicó, es dividir las raíces y “secar” o dar menos agua a una parte de ellas.
Esa modalidad es poco conocida. Se ha utilizado en Europa y Australia, pero en
México es la primera vez que se usa en gran escala. Por supuesto, dijo, se
implementa en especies nativas, como el jitomate.
Refirió que cuando a un
vegetal le falta hidratación no sólo se reduce su crecimiento; también se
inhiben sus procesos bioquímicos y fisiológicos, como la fotosíntesis, en donde
las plantas toman el bióxido de carbono a través de poros en la superficie de
sus hojas. Si la falta del vital líquido es intensa, muere.
En agricultura, su escasez implica
reducción en el rendimiento de los cultivos y hay menor disponibilidad de
frijoles, maíz o calabazas, entre otras. Mencionó que las especies afectadas,
al no poderse mover, tienen un sistema de alerta químico para soportar los agresivos cambios ambientales. Consiste en
la producción de sustancias dentro de los tejidos, resultado de modificar la
producción de hormonas.
Carlos Trejo dijo que existe una relación
lineal entre el agua agregada a un cultivo y su rendimiento. “Se tienen dos
alternativas para producir alimentos: más riego o hacer que la planta sea más
eficiente. Una buena estrategia es la segunda, porque el recurso hídrico es
limitado”, expresó.
Además, en el Colegio de
Posgraduados se probó la técnica de “secado parcial de raíz” para determinar si
era posible incrementar el rendimiento y la calidad de los frutos del jitomate.
Se busca utilizar sus sistemas de defensa y alerta “para generar la misma
productividad con menor cantidad de agua”, aseveró.
El método consiste en hacer
crecer las plántulas para luego dividir su raíz en dos. Cada parte se
transplanta en recipientes diferentes. En el primero se proporciona el 100 por
ciento del líquido que puede retener la raíz y en la otra sólo la mitad.
“Cuando menos se ahorra el 25 por ciento del fluido utilizado en los sistemas
hidropónicos convencionales”.
Se midió el grado de
hidratación, el intercambio de gases en las hojas, peso fresco y seco, la raíz,
tallo y frutos. Los resultados son alentadores. No sólo se ahorró este recurso,
sino que los grados de qué tan dulce es el jitomate mejoraron. También se
presentó mayor firmeza y el tamaño no cambió, a pesar de que las dimensiones de
la especie son menores.
Es este experimento se
propició que, al detectar menor cantidad de agua, la planta activara su alerta,
su sistema hormonal de señales para utilizar menos líquido sin afectar la
producción. Los investigadores se percataron de que la calidad de los frutos se
incrementó. La dureza y dulzura aumentaron en alrededor de 50 por ciento.
“Sorprendió que tales características se vieran favorecidas”, adelantó.
Hasta ahora, el experimento se ha llevado
a cabo sólo con jitomates, aunque podría extenderse a otros cultivos. Además,
es viable aplicarlo en sistemas intensivos, finalizó Carlos Trejo.
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PIES DE FOTO
FOTO 01
El doctor Carlos
Trejo, del Colegio de Posgraduados, dijo en la UNAM que científicos
universitarios buscan hacer más eficiente el uso de agua en la agricultura
mediante la fisiología de las plantas.
FOTO 02
Los nuevos métodos de hidroponia
significan un ahorro del 25 por ciento en líquido necesario para la obtención
de jitomate, y mejorar las características del fruto, señaló el investigador
Carlos Trejo.