Boletín UNAM-DGCS-087
Ciudad Universitaria
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ANTE LA GLOBALIZACIÓN, MÉXICO DEBE BUSCAR ESTRATEGIAS PARA LOGRAR POLÍTICAS AUTÓNOMAS
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Necesita además reorientar su estrategia
hacia un mercado interno fuerte e incluyente, coinciden Clemente Ruiz, Gerardo
Fujii y Julio López
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Participaron en la conferencia “Davos y la
economía mexicana”
La economía globalizada es un
proceso que “llegó para quedarse y no habrá marcha atrás”; frente a ello,
México debe buscar una estrategia donde el Estado conserve mecanismos de
control básico para lograr políticas autónomas y expansivas, coincidieron
expertos de la UNAM.
En el marco de la conferencia
“Davos y la economía mexicana”, los profesores universitarios Clemente Ruiz
Durán, Gerardo Fujii Cambero y Julio López Gallardo plantearon la necesidad de
reordenar la estrategia del reto global
a partir de un mercado interno fuerte e incluyente.
En la Facultad de Economía de
la UNAM, López Gallardo insistió en que el Estado debe tener mecanismos básicos
de control, pues sin ellos “no se puede hacer gestión económica en un mundo
globalizado”.
Desde su óptica, los puntos
clave a defenderse son el control cambiario y de la moneda, con el propósito de
evitar fugas que comprometan la viabilidad económica del país.
Sobre esta base, propuso, debe
descansar una política expansiva, pues en los últimos 20 años prácticamente no
ha crecido el ingreso por habitante, principal
fuente de pobreza y desocupación.
Explicó que estamos viviendo
en una época de en la que el modelo de capitalismo de Estados Unidos se está
tratando de imponer sobre otras alternativas.
Por su parte, el catedrático
Clemente Ruiz consideró que podemos alcanzar mayores niveles de crecimiento
siempre y cuando en lugar de tener una visión hacia fuera, se fortalezca el
mercado interno y se rearticule el
modelo económico mexicano.
La meta que debemos
plantearnos, dijo, es la de transformar
a la sociedad, mejorar la economía de la población y asegurar el acceso a la
salud y a la educación.
Al referirse al Foro Económico
de Davos 2003, expresó que sirve para atraer inversión extranjera, pero se
toman en cuenta factores de competitividad en los que México obtiene resultados
sumamente bajos, como el desempeño económico, la infraestructura, la eficiencia
gubernamental y de las empresas. Es por ello –aseguró- que se requiere plantear
una estrategia a partir de un mercado interno fuerte e incluyente.
En su exposición, detalló un
análisis de panel del ingreso por habitante de 1960 a 2001. Se establece que en
la relación de ingreso por habitante de países industrializados a países de
bajo ingreso, la desigualdad pasó de 40 a 61 veces. En la de países
industrializados a países de ingreso medio, varió de 13 a 15 veces.
Dicha relación de ingreso por
habitante de países industrializados a naciones de América Latina se modificó
de cinco a ocho veces, mientras que la de Suiza a España pasó de seis a tres
veces.
Por su parte, el profesor
Gerardo Fujii convino en que México debe ir definiendo una estrategia de
crecimiento que radique más en el mercado interno. Esto “no es imposible: en un
plazo mediano -de dos o tres años- se puede ir moviendo hacia ese punto”,
concluyó.
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Los economistas de la UNAM, Gerardo Fujii, Julio López Gallardo y Clemente Ruiz Durán, coincidieron en que es necesario reordenar la estrategia del reto global a partir de un mercado fuerte e incluyente.