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LOS EMPRESARIOS DEBEN DEDICAR MÁS TIEMPO A LOS NEGOCIOS Y MENOS A LA POLÍTICA, OPINA INVESTIGADOR

· Ricardo Tirado Segura, del Instituto de Investigaciones Sociales, dijo que es preferible un empresario competente en su campo de acción que uno malo o deficiente en la política

· La globalización le da a las empresas transnacionales la posibilidad de influencia muy fuerte

Es necesario que exista “sana distancia” entre políticos y empresarios para que éstos se dediquen a manejar bien sus negocios y no intervengan tanto en la política y en la toma de decisiones en ese ámbito, aseguró Ricardo Tirado Segura, del Instituto de Investigaciones Sociales (IIS) de la UNAM.

El investigador universitario recalcó que en México necesitamos buenos hombres de negocios, "yo prefiero un empresario que sea competente en su campo de acción, que uno malo o deficiente en la política, como a veces sucede".

Aunque a los empresarios no se les puede prohibir su participación en la vida política, deberían estar más dedicados a su ámbito de desarrollo, reiteró.

Además, agregó, ante el descrédito que viven los partidos y su actividad, en el escenario se presenta gente que explota en el discurso el dicho de que no es político, pero pretende ocupar puestos de elección popular y les ha funcionado esa estrategia.

No obstante, es evidente que quien sostiene no ser político pero compite por un cargo de elección popular, hace política y es político, aunque utilice un discurso diferente, lo que lo hace atractivo, como es el caso de Alberto Fujimori.

Por ello, señaló que los partidos políticos deben mejorar sus métodos de elección, ya que la mayoría de ellos son muy frágiles, como se vio en los recientes procesos internos, lo cual no es privativo de México.

Consideró como un error que un determinado sector de la sociedad, como el empresarial, tenga tanta influencia en las decisiones importantes que se toman en nuestro país. "Lo que debemos impulsar es que los demás actores participen de manera más activa".

Necesitamos que la población participe más en los asuntos del país, y no que el grupo propietario de las empresas sea el que tome las decisiones. La opinión ciudadana debe darse para contar con representantes conscientes de la situación que viven otros sectores de la sociedad y hagan valer el contrapeso que pueden tener.

Los empresarios deberían estar conscientes de que en México 25 millones de personas viven en la miseria y 50 o 60 millones son pobres, de ahí la urgencia de elevar su nivel de vida, y la importancia del papel que desempeña el sector empresarial como generador de empleos y recursos.

Consideró peligroso que las clases pudientes en México no miren en esa dirección. "Cuando se dio la reforma fiscal y se habló de afectar a quienes tienen la mayor riqueza en el país protestaron de manera enérgica".

El investigador del IIS resaltó la importancia de los industriales, ya que si ellos dejan de invertir en nuestro país provocan graves consecuencias para la sociedad, al igual que si deciden retirar sus capitales de México.

Pero también se han visto muchas empresas en quiebra por malos manejos, ante los cuales el gobierno tiene que acudir en su rescate arguyendo que se trata de salvar los empleos de la población, lo cual si bien en algunos casos era cierto, en otros simplemente eran componendas.

Por otro lado, dijo que es importante analizar la situación mundial, ya que el actual proceso de globalización no acepta que los países quieran o no integrase, "estamos insertos en él y lo que debemos hacer es tratar de incidir para que la globalización adopte determinadas tendencias y no otras".

Añadió que dicho proceso es difícil porque le da a las empresas transnacionales una posibilidad de influencia muy fuerte. Lo que se debe hacer es fijar reglas internacionales, como el establecimiento de un salario mínimo mundial, por ejemplo.

Por ejemplo, concluyó, si la contaminación es un problema mundial y para atacarlo se han establecido reglas globales, "no podemos dejar que los países compitan para ver quién otorga los salarios más bajos, como China, donde se pagan sueldos bajísimos".

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Ricardo Tirado Segura, del Instituto de Investigaciones Sociales, consideró que en nuestro país necesitamos buenos hombres de negocios, que se dediquen sólo a esa labor y no a la política.

Para el investigador universitario Ricardo Tirado los partidos políticos deben mejorar sus métodos de elección, ya que la mayoría de ellos son muy frágiles, como se vio en los recientes procesos internos.