13:30 hrs. Junio 24 de 2002


Boletín UNAM-DGCS-0561

Ciudad Universitaria

 

Pies de fotos al final del boletín

 

LA MUJER TIENE MÁS HABILIDAD PARA LA LECTURA Y EL HOMBRE PARA EL LENGUAJE

 

·       Hay pequeñas y sutiles diferencias cerebrales entre ambos sexos, destacó Beatriz Georgina Montemayor Flores, profesora de la Facultad de Medicina de la UNAM

·       Los varones, a su vez, están mejor dotados en las habilidades relacionadas con la percepción visuoespacial

 

Las mujeres muestran cierta superioridad con relación a los varones en cuanto a la velocidad y compresión de la lectura, mientras que ellos la tienen para el lenguaje, debido a algunas diferencias cerebrales, pequeñas y sutiles, pero que conllevan conductas diferentes, indicó Beatriz Georgina Montemayor Flores, profesora de la Facultad de Medicina (FM).

 

Es probable, dijo, que en ellas exista una zona especializada en el hemisferio izquierdo más desarrollada y por ello ocurra dicha situación, mientras que para el hombre esa misma zona le permite más dominio del lenguaje, señaló la académica.

 

Al dictar el seminario “Hombres y mujeres, viva la diferencia”, realizado en el auditorio “Fernando Ocaranza” de la FM, Montemayor Flores destacó que en el cerebro de los varones el hemisferio derecho está más especializado en las tareas visuoespaciales y el izquierdo en las verbales.

 

El cerebro de ellos está más "lateralizado", es decir, cada lado tiene tareas específicas y cumple las funciones asignadas de manera preferente: el izquierdo se caracteriza por centrarse en las funciones simbólicas relativas al lenguaje y el derecho a las de integración de los datos en el espacio, abundó.

 

En cambio, puede decirse que en el cerebro de las mujeres dicha asimetría no está presente; ambos hemisferios se dedican de forma menos específica a las tareas verbal y no-verbal -aunque está más preparado que el de los hombres para las primeras- por lo que se encuentra en mejores condiciones para soportar lesiones hemisféricas y compensar las consecuencias de un daño, como el cerebrovascular.

 

Por ello, en general las niñas sobresalen en las pruebas relacionadas con el comportamiento lingüístico y los aspectos cognoscitivos vinculados y dependientes del contexto, es decir, para la concepción de cómo son las personas y las cosas en función de sus características externas.

 

A su vez, los varones están mejor dotados que las mujeres en las habilidades relacionadas con la percepción visuoespacial, de modo que tienen mejor percepción del espacio y de las relaciones de las partes con el todo; asimismo, al estar sus hemisferios cerebrales más especializados en funciones diferentes tienen mayores posibilidades de no aguantar las lesiones unilaterales

 

Así, los niños suelen aventajar a las niñas en habilidades espaciales y en aspectos cognoscitivos de carácter analítico y no relacionados con el contexto, por tanto, son más hábiles para resolver problemas ignorando el entorno de los mismos.

 

Montemayor Flores recordó que desde el siglo XIX se sabe que los hemisferios cerebrales presentan "especialización" para algunas funciones. En el caso del izquierdo, para realizar las relativas al lenguaje. Incluso, es considerado el dominante en el sentido de que presenta "lateralización preferente", pues se sabe que en la mayoría de los seres humanos procesa y almacena de manera preponderante la información relacionada con el lenguaje, los números y la identificación derecha-izquierda, al menos en los sujetos diestros y en dos tercios de los zurdos.

 

Al hemisferio derecho se le conoce como "de lateralización preferente para el almacenamiento y procesamiento de la información visuoespacial, las dimensiones de los objetos y su emplazamiento en el espacio, las relaciones espaciales de los objetos entre sí, entre ellos y nosotros mismos, nuestra situación en el espacio, la identificación de las partes de nuestro cuerpo e inclusive, la conciencia de ciertas situaciones".

 

El izquierdo representa un cerebro calculador, analítico y espacial, mientras que el derecho parece comportarse como un cerebro constructor, matemático. "Lógico uno, fantástico el otro", precisó la catedrática; aunque ambos son capaces de realizar las mismas funciones, sólo que no tienen el mismo grado de dominio.

 

Puede decirse que las diferencias cerebrales entre hombres y mujeres existen en cuanto al tamaño del surco lateral, el plano temporal y al espesor de una pequeña parte del cuerpo calloso, el istmo, puntualizó.

 

El surco lateral es una hendidura profunda situada en las caras inferior y externa del hemisferio cerebral, separa al lóbulo temporal y al parietal del lóbulo frontal. El plano temporal es una superficie triangular que se encuentra en el área de preferencia del lenguaje.

 

El cuerpo calloso representa una serie de cables que interconectan ambos hemisferios. El istmo está formado de fibras que conectan zonas cerebrales implicadas en el área del lenguaje, aunque en los cerebros de diestros esta zona tiende a ser más delgada.

 

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Foto 1

 

Georgina Montemayor Flores, profesora de la Facultad de Medicina, aseguró que son pequeñas las diferencias cerebrales entre hombres y mujeres

 

 

Foto 2

 

Tras analizar las diferencias cerebrales entre hombres y mujeres, Georgina Montemayor Flores, de la Facultad de Medicina, señaló que el sexo femenino tiene cierta superioridad en cuanto a la velocidad y comprensión de la lectura; en tanto que el varón tiene mayor habilidad en el lenguaje