Boletín UNAM-DGCS-0231
Ciudad Universitaria
Pies de fotos al final del boletín
DERECHO A LA INFORMACIÓN, REQUISITO DE TODA SOCIEDAD DEMOCRÁTICA
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Fernando Ojesto Martínez Porcayo, presidente del Tribunal Federal
Electoral, dijo que es necesaria para la participación ciudadana responsable
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En la Facultad de Derecho se lleva a cabo la 2a. Conferencia
Internacional Nuestro derecho a saber las cosas públicas y el acceso a la
información gubernamental
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Roberto Rock, director editorial del periódico El Universal, señaló que
una democratización exitosa exige una visión de largo plazo
En una sociedad democrática, los ciudadanos tenemos derecho a estar bien
informados para participar con responsabilidad en la “cosa pública”, afirmó Fernando
Ojesto Martínez Porcayo, presidente del Tribunal Federal Electoral (TFE).
Al participar en la 2a. Conferencia
Internacional Nuestro derecho a saber las cosas públicas y el acceso a la
información gubernamental, organizado por la Facultad de Derecho (FD), el
magistrado refirió que los derechos a informar y ser informado deben ser
respetados como fundamentales y garantizados a través de la acción
jurisdiccional.
Es importante el derecho a estar informados en
relación con los elementos que conforman las organizaciones políticas, porque
en nuestro país, el acceso al poder público sólo se puede lograr a través de
los partidos.
El ciudadano no tiene más camino para
intervenir en política y obtener un puesto de representación popular si no es
afiliado y postulado por una organización de ese tipo.
“En esas circunstancias, no habiendo otra
posibilidad, los partidos políticos deben tener una apertura total de su
información, para que el ciudadano, libremente, decida a cuál de ellos
afiliarse”.
Explicó que por disposición legal y
constitucional, al Instituto Federal Electoral corresponde controlar y vigilar
que los partidos políticos se sometan a la ley. Pero también ha dispuesto que
haya acceso público a la información relativa a quienes son los representantes
internos de esos organismos, así como
los métodos que siguen para elegirlos democráticamente. “El derecho de
asociación trae aparejado el de información”.
Martínez Porcayo aclaró que aún existe la
necesidad de contar con una legislación que trate de aglutinar todos los
aspectos, en constante expansión, de las garantías consagradas en la
Constitución relativas al derecho a la información y derecho a informar, los
cuales no pueden ser absolutos e ilimitados, pero sí tener límites razonables.
Por su parte, Andrew Puddephat, director
general del organismo Artículo XIX, con sede en Inglaterra, mencionó que un
estado moderno, del siglo XXI, para tener éxito, debe contar con apertura, la
cual dé a los ciudadanos la confianza que necesitan.
En ese contexto, tenemos derecho a la
información con que cuenta el gobierno, porque éste opera democráticamente a
través de nosotros, con base en nuestra participación en los procesos
electorales.
El funcionamiento de la democracia depende del
acceso libre a la información. Se trata de un derecho fundamental cuyo
ejercicio es necesario para evitar la falta de confianza en el gobierno. En una
sociedad cerrada, añadió, no hay por qué creer, no hay por qué confiar en los
políticos. En una abierta, existen los elementos para que la ciudadanía
participe en la resolución de los problemas.
El director del Seminario de Sociología
Jurídica de la FD, Jorge Islas López, mencionó que el derecho a la información es una precondición fundamental para
el tránsito a la democracia, porque se relaciona con las decisiones que toman
los ciudadanos.
La democracia, si bien tiene incidencia directa
en las formas institucionales de los gobiernos, también la tiene en la acción y
organización de las sociedades. Pero si éstas no tienen la posibilidad de hacer
contribuciones basadas en información fluida, su participación no tendrá
importancia en ningún sentido.
Los ciudadanos educados, con acceso a la
información, hacen mucho más soberano y poderoso a un pueblo, a una sociedad
que participa en la toma de decisiones, y construye la democracia reflejada en
gobiernos de opinión y discusión.
Roberto Rock, director editorial del periódico
El Universal, señaló que una democratización exitosa exige de los actores
comprometidos con ella, una visión de largo plazo que los lleve anteponer
algunos de sus legítimos intereses para la construcción de una plataforma
común, en la que puedan dirimirse civilizada y pacíficamente sus diferencias y
antagonismos.
De no superar esos particularismos, “los ganadores
no serán los impulsores de la democracia, sino sus enemigos, o peor aún,
podríamos caer en un vacío de anarquía donde no haya ganadores”.
Aseguró que nuestro país enfrenta el desafío
del desencanto democrático, surgido de la comparación entre “las ideas y
expectativas que se arraigaron durante años de ausencia democrática y la dura
realidad”.
Ante tal panorama, los medios de comunicación
deben difundir con precisión y equilibro las posibilidades y limitaciones de la democracia tal y como opera en otros
países, para tener una referencia, abundó Rock.
Con su condición de libertad e independencia,
los medios fortalecen el debate y la retroalimentación entre la sociedad y los
actores políticos (gobierno incluido). Son el apoyo para el fortalecimiento y,
en algunos casos, la resurrección de la sociedad civil. Pero si son
complacientes, debilitan la democracia, finalizó.
El director de la Facultad de Derecho, Fernando
Serrano Migallón, mencionó que actos
como la Conferencia Internacional Nuestro derecho a saber las cosas públicas y
el acceso a la información gubernamental, demuestran la vitalidad y vigencia de
la universidad pública, cuando se discuten con profundidad problemas y temas de
actualidad.
El derecho a la información se plantea no sólo
como la necesidad de los ciudadanos de saber lo que pasa en el ámbito en el que
viven, en su sociedad y país, sino de la obligación que tienen las autoridades
de responder a ese requerimiento con límites indispensables.
La Conferencia tuvo el patrocinio de Televisión
Azteca y el Tribunal del Poder Judicial de la Federación.
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El derecho a
informar y ser informado debe ser respetado como fundamental y garantizado a
través de la acción jurisdiccional, dijo Fernando Ojesto Martínez, presidente
del Tribunal Federal Electoral, en la Facultad de Derecho
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Andrew Puddephat,
director del organismo inglés Artículo XIX; Fernando Serrano Migallón, director
de la Facultad de Derecho y Fernando Ojesto Martínez, presidente del Tribunal
Federal Electoral, durante la Conferencia Internacional “Nuestro derecho a
saber de las cosas públicas y el acceso a la información gubernamental”