Boletín UNAM-DGCS-745
ESTUDIAN RESPUESTA INMUNE DE LA CÉRVIX EN
FASE TEMPRANA DE INFECCIÓN POR PAPILOMA
·
El cáncer cérvico uterino, uno de los principales problemas de salud en
nuestro país: Rafael Jiménez Flores, de la FES Iztacala,
·
Una de cada tres pacientes que ingresan al Instituto Nacional de
Cancerología lo hace por esa enfermedad
Para tratar de disminuir
la gran incidencia de muertes por cáncer cérvico uterino en México (un deceso
cada dos horas, en promedio), Rafael Jiménez Flores, catedrático de la Facultad
de Estudios Superiores (FES) Iztacala, investiga la respuesta inmune local del
cérvix en la fase temprana de infección por el virus de papiloma humano.
Recordó que el cáncer
cérvico uterino es uno de los principales problemas de salud en nuestro país,
como lo demuestra el que una de cada tres pacientes que ingresan al Instituto
Nacional de Cancerología lo hace por este tipo de enfermedad.
Jiménez Flores agregó
que México es el país con el mayor número de muertes por este tipo de cáncer en
América Latina. Por ello, expresó: ojalá que toda la gente que trabaja en el
país en estos campos pudiera lograr, con un esfuerzo conjunto, disminuir este
tipo de alteración.
Señaló que a través de
su estudio Respuesta inmune cervical ante
infección por virus de papiloma humano pretende conocer el proceso
biológico mediante el cual las células logran un mecanismo de defensa en la
fase temprana de la infección.
En particular estudia
el virus número 16, asociado a poco más del 80% de los cánceres del cuello de
la matriz. "No planteamos métodos diagnósticos o terapéuticos, sino que
estudiamos los aspectos biológicos de la respuesta inmune ante esa
infección".
"Cuando se
conozca bien este proceso se tendrán bases más sólidas para hacer un
planteamiento terapéutico, lo que permitirá generar alternativas en el uso de
vacunas profilácticas o terapéuticas".
No obstante, reconoció
que en nuestro país ya se realizan aplicaciones terapéuticas y existen
propuestas para llevara cabo tratamientos con vacunas, utilizando vectores y
diferentes péptidos. Sin embargo, aún se desconoce su respuesta
biológica".
El catedrático dijo
que en ese proceso no hay coincidencia, porque "se apuesta a que la
respuesta inmune se dé exactamente igual a como sucede en otros lugares, sin
conocer, de manera específica, lo que pasa en el cuello de la matriz".
El tiempo entre la
infección por virus de papiloma de alto riesgo y la aparición de la neoplasia,
requieren de una a dos décadas, de tal manera que si el diagnóstico se hace en
etapas tempranas es más viable que sea tratado de manera adecuada y se evite
llegar al cáncer.
El problema de esta
enfermedad es multifactorial; y a la población mexicana le falta cultura
médica. "Por desgracia aún hay resistencia a la exploración ginecológica y
manejo médico apropiado, aunque el estado de nutrición de cada mujer también es
importante", sostuvo.
En cuanto a la
atención médica, dijo que otro problema serio es la mala técnica en la toma de
muestras del papanicolau, lo cual contribuye a que el citotecnólogo cometa
errores en su interpretación, sin contar que la saturación de trabajo de este
especialista favorece el cansancio visual, lo que aumenta el margen de error en
el diagnóstico.
En países como Estados
Unidos se ha intentado automatizar con equipos costosos el análisis de las
muestras de papanicolau. Empero, se ha demostrado que estos instrumentos
también cometen errores.
Lo que se debe hacer
es capacitar y actualizar de forma adecuada al personal que toma las muestras,
supervisarlo, someterlo a un constante escrutinio de control de calidad, al
igual que al citólogo o citotecnólogo que las analiza.
Reconoció que en
México no tenemos las condiciones económicas para invertir en métodos
moleculares, que si bien son más precisos, también son más caros. Mientras
un papanicolau cuesta entre cuatro y cinco dólares, la captura de híbridos
cuesta cincuenta dólares.
Mencionó que el cáncer cérvico uterino puede ser tratado si se
identifica de forma oportuna, ya que afecta a mujeres en etapa productiva, y la
edad más frecuente de fallecimiento es entre 45 y 55 años de edad.
Tales estadísticas, apuntó, confirman el grave problema que enfrenta
México en cuanto a este cáncer. Por ello, es necesario trabajar de manera inter
y multidisciplinaria en aspectos clínicos y básicos con diferentes enfoques y
realizar mayor difusión de este problema.
Propuso poner en los envases de refresco la leyenda "realícese de
manera oportuna su papanicolau" o agregar en las cajetillas de cigarros,
además de "este producto puede provocar cáncer, se le sugiere que se
realice su estudio de papanicolau". Se debe establecer una fase de
prevención más enérgica.
Por último, dijo que siendo una enfermedad de transmisión sexual hay
poca información sobre el hombre, que si bien es transmisor, prácticamente no
padece enfermedad por infección de papilomavirus. No obstante si puede
presentar lesiones en la uretra y remotamente cáncer en vías urinarias.
– o0o –