Boletín UNAM-DGCS-559
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Clemente Ruiz Durán, Benjamín García Páez y
Arturo Huerta González señalaron que el PND no define metas precisas para
alcanzar el crecimiento económico
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Faltó consenso y participación de los
sectores sociales en su elaboración, aseguraron
Las expectativas generadas en la población por el Plan Nacional de
Desarrollo (PND) que presentó la semana pasada el presidente Vicente Fox no se
vieron satisfechas, coincidieron en afirmar los catedráticos de la Facultad de
Economía (FE) de la UNAM Clemente Ruiz Durán, Benjamín García Páez y Arturo
Huerta González, quienes señalaron que el documento elaborado por el Ejecutivo
Federal no contiene estrategias precisas para alcanzar el crecimiento económico
de México.
Clemente Ruiz Durán señaló que los principios
generales sobre los cuales se elaboró el PND son positivos, pero no se
mencionan las acciones específicas para alcanzar las metas trazadas por el
gobierno federal para disminuir los desequilibrios y lograr el bienestar
social.
Al hablar en conferencia realizada en la FE
para analizar el PND, el académico universitario sostuvo que el documento
elaborado por el gobierno no sienta bases sociales para el logro de los
objetivos económicos del país. El sector público, precisó, no asume ningún
compromiso sino que fundamenta su acción exclusivamente en el mercado.
Ruiz Durán aseguró que el gobierno de la
República carece de capacidad de convocatoria y de diálogo para que la sociedad
se involucre y participe en el diseño de las políticas públicas. Esto es
evidente, añadió, en la falta de referencia al sector laboral y a los salarios
en el esquema del PND.
Agregó que la mayoría de los mexicanos
esperaba que se reconocieran los errores cometidos en el pasado en el manejo de
la economía nacional y se propusieran los mecanismos para revertirlos. Eso no
sucedió, dijo, y la sociedad aún espera el cambio por el cual votó el 2 de
julio pasado.
Por su parte, Arturo Huerta González señaló
que el diagnóstico que contiene el PND acerca de la situación económica que
vive el país es contradictorio, ya que por un lado se mencionan problemas como
el alto costo fiscal de los rescates bancario y carretero, la fragilidad de los
mercados bursátiles, falta de mercado interno, inestabilidad exterior e
incapacidad para financiar el desarrollo, pero por otra parte se sostiene que
la economía mexicana está fortalecida pues no hubo crisis transexenal.
Esa afirmación es falsa, argumentó el
catedrático de la FE, pues el crecimiento experimentado durante el sexenio
anterior se debió al buen desempeño de la economía de Estados Unidos, país que
además otorgó un blindaje financiero para evitar la crisis en el cambio de
administración.
Huerta González explicó que la economía
mexicana está sumida en un círculo vicioso, pues mientras se dice que las
finanzas públicas están sanas, es preciso reducir el gasto público para hacer
frente a las deudas contraídas por los rescates bancario y carretero.
Esta reducción del gasto, continuó, implica
incrementar las tasas de interés para mantener el tipo de cambio estable y
atraer la inversión extranjera.
No obstante, puntualizó, al apreciarse el
tipo de cambio y elevarse las tasas de interés se generan problemas de
insolvencia que afectan al sistema bancario, por lo cual el gobierno se ve
obligado a salir en apoyo de las instituciones de crédito. Todo ello conduce a
la incapacidad gubernamental para financiar el crecimiento y evitar la ruptura
de las cadenas productivas nacionales.
El problema económico de México es que las
tasas de interés crecen más rápido que los ingresos de las personas y las
empresas, lo cual debe revertirse mediante el énfasis en el sector productivo y
la puesta de las políticas monetaria y fiscal al servicio del crecimiento.
Las políticas económicas desarrolladas por
los últimos gobiernos no fortalecieron al país sino que, por el contrario, lo
llevaron a la desindustrialización y lo hicieron cada vez más vulnerable. El
PND del actual gobierno, continuó, no contiene metas viables para resolver
estos problemas.
En su intervención, Benjamín García Páez
manifestó que un plan estratégico de desarrollo requiere la concurrencia de los
distintos sectores sociales los cuales, sin embargo, están insatisfechos con la
propuesta del gobierno Federal contenida en el PND.
El documento, explicó, no es producto de la
participación de la sociedad mexicana, carece de consenso y no cumple con lo
dispuesto en el artículo 26 de la Constitución donde se exige que la planeación
sea democrática. El PND, recalcó, no rompe con los dictados autoritarios del
mercado.
La falta de metas específicas, finalizó, se
observa en la falta de política industrial y de redistribución del ingreso, así
como la ausencia de metas cuantitativas y mecanismos para dar seguimiento y
evaluar el desempeño del PND.
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Pie de foto
El diagnóstico de
la economía nacional sobre el cual se basa el Plan Nacional de Desarrollo del
gobierno es contradictorio, aseguró Arturo Huerta González, catedrático de la
Facultad de Economía de la UNAM.