Boletín UNAM-DGCS-308
![]() |
![]() |
![]() |
DETERMINADA POR EL RIGOR ANALÍTICO LA SOLUCIÓN A PROBLEMAS
BIOÉTICOS
·
Olga Hansberg, coordinadora de
Humanidades de la UNAM, consideró fundamental el desarrollo científico y
tecnológico
·
Inauguró el "Seminario
Bioética, Legislación y Políticas Públicas" que se realiza en la UNAM
La solución de los dilemas bioéticos que se
enfrentan en la actualidad está determinada por el rigor del trabajo analítico,
así como por la capacidad para lograr el equilibrio entre ése y el desarrollo
científico y tecnológico, afirmó Olga Hansberg, coordinadora de Humanidades de
la UNAM.
Al inaugurar el Seminario "Bioética,
Legislación y Políticas Públicas", realizado en la Unidad de Seminarios
"Ignacio Chávez", puntualizó que la UNAM continuará con su trabajo
permanente para alcanzar esos objetivos en beneficio de la sociedad, de la
transformación de México y de las instituciones.
En el acto, organizado por la Facultad de
Psicología, destacó: en el último siglo, y en forma más apremiante en las
décadas recientes, el desarrollo tecnológico y los descubrimientos científicos
plantean la necesidad de reflexionar sobre las diversas implicaciones de los
avances.
La aparición de enfermedades mortales,
nuestra postura frente a ellas, así como la devastación de la naturaleza y la
utilización del saber humano con propósitos no humanitarios confirman esa
urgencia, porque ponen en entredicho todo un sistema de valores en el que se
fincan deseos, aspiraciones, juicios, acciones y moralidad.
Por ello, aseguró, se debe hacer un examen
riguroso, desde diversas perspectivas disciplinarias, sobre los usos del
conocimiento y sus consecuencias éticas, morales, sociales y jurídicas, entre
otras.
Por su parte, Graciela Rodríguez,
profesora e investigadora de la Facultad de Psicología, señaló: frente a la
revolución biológica en torno a plantas y animales transgénicos, posibilidades
de clonación, nuevas técnicas humanas de reproducción, identificación de
huellas y materiales genéticos, uso del genoma humano y terapia genética, la
sociedad y núcleos académicos perciben umbrales de conocimiento
científico-tecnológico cuyas consecuencias aún son desconocidas.
Al mismo tiempo, indicó, abren rutas de
desarrollo con riesgos que obligan al debate sobre los límites entre los usos
de la ciencia y la tecnología, su regulación y el marco axiológico que los
determina.
Si recordamos los indicadores mínimos del
índice de desarrollo humano de la UNESCO, acotó, encontramos un horizonte de
desafíos amplio que desborda los avances vertiginosos de la ciencia y, a la
vez, manchas de miseria y subdesarrollo.
En su momento, Guillermo Soberón, presidente
ejecutivo de la Fundación Mexicana para la Salud, comentó que la rendición de
cuentas y la asignación de recursos son cuestiones éticas dentro de sector del
que forma parte.
Sostuvo que en México las políticas públicas
en materia de salud son de varios estilos, pero básicamente incluyen la
protección de grupos vulnerables -niños, ancianos, pobres, mujeres, enfermos de
SIDA, minusválidos e invidentes-, planificación familiar, salud reproductiva,
extensión de cobertura y padecimientos prevenibles por vacunación.
También, manifestó, existen estrategias de
otros sectores aplicadas para lograr mejores condiciones de salud, como las
relacionadas con el combate contra las adicciones, prevención de accidentes y
salud ambiental.
Para medir la atención a la salud, recalcó,
se toman en cuenta diversos parámetros: esperanza de vida, desigualdades en
salud, capacidad de respuesta, equidad financiera, gasto en salud en relación
con el Producto Interno Bruto y con el ingreso per capita, entre otros.
Finalmente, Wayne H. Holtzman, director
del Centro de Colaboración entre Texas y la Organización Mundial de la Salud
para la Investigación y el Entrenamiento en Salud Mental y los Factores
Psicosociales de la Salud, de la Universidad de Texas, en Austin, Estados
Unidos, apuntó que en 1999 en ese país se realizaron 280 mil pruebas genéticas
y con base en el ritmo de crecimiento en su utilización, en poco tiempo
llegarán al millón.
En los diferentes estados de la Unión
Americana, expresó, el límite para hacer la prueba de paternidad es de dos años
en promedio, pero se requiere determinar si es el tiempo ideal.
-oOo-