Boletín UNAM-DGCS-1216
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SÓLO 10 % DE LOS MEXICANOS TIENEN ORIENTACIÓN
SEXUAL DEFINIDA
·
El Programa Universitario de Estudios de Género, único organismo que
investiga el fenómeno lésbico-gay en América Latina: Careaga Pérez
· Las autoridades son menos tolerantes con este sector, que la sociedad
Sólo diez por
ciento de la población en México tiene una orientación exclusiva en cuanto a
prácticas sexuales, como pueden ser homosexuales, heterosexuales o bisexuales,
y el resto vagabundean en la diversidad sexual.
Esto, afirma Gloria
Careaga Pérez, investigadora del Programa Universitario de Estudios de Género
(PUEG), tiene mayor relevancia porque la comunidad lésbico-gay es poco conocida
o explorada por la sociedad y por las instituciones académicas. En el país,
dijo, no ha tenido la importancia que en Estados Unidos o Europa,
Destacó que en
América Latina el PUEG es el único espacio formal, dentro de una institución de
educación superior, que cuenta con
investigaciones acerca de esa comunidad.
Explicó que las
categorías para definir la orientación sexual en específico no son suficientes,
porque las prácticas son varias. Por ejemplo, una persona puede decir que es
homosexual, pero llega a tener relaciones con una persona del otro género; esto
también ocurre con los heterosexuales declarados como tales que han tenido
alguna experiencia con personas de su mismo sexo.
Respecto a la
tolerancia social hacia este movimiento, subrayó que se ha impulsado mucho sin
llegar todavía a un marco de respeto. Una cosa es tolerar y otra cosa es el
respeto, aclaró.
La investigadora
del PUEG recordó que por el hecho de tener prácticas homosexuales una persona
es desacreditada en cualquier ámbito de su vida, lo cual brinda una clara idea
de la centralidad de la sexualidad dentro de la sociedad; su importancia es
tal, que elimina los demás aspectos.
Reconoció que en la
sociedad mexicana es más frecuente la tolerancia que entre las propias
autoridades, ya que éstas, al sentirse responsables de cuidar la moral, tienden
a ser mucho más represoras.
Sin embargo, esa
misma tolerancia hacia este sector de la población provoca, también, que la
gente tenga una especie de distancia social, agregó.
Careaga mencionó
que el trabajo desarrollado por este sector de la población como movimiento
político o social, ha sido muy importante en el impulso de una cultura de
derechos humanos en el país, mismo que ha redundado en la existencia de
comisiones especiales al interior de Poder Legislativo.
Aunque reveló que la
cultura de derechos humanos en México todavía es bastante pobre, a pesar de los
avances, la mayor parte de la gente rehúye a los trámites para llevar a cabo
una denuncia. Eso, dijo, también es una muestra de que el gobierno no ha
facilitado los procedimientos ni promueve el conocimiento de la sociedad acerca
de sus garantías.
El movimiento
homosexual en México tuvo su punto de partida durante los años 70: en 1979 con
la Marcha del Orgullo Gay y la Semana Cultural Gay, que se ha mantenido.
En los primeros
años, su objetivo fue parar la fuerte represión al ser exhibidos sus
integrantes, posteriormente lo que buscó fue mayor visibilidad social mediante
manifestaciones públicas y hoy su lucha se ha centrado en la búsqueda del
respeto a sus derechos, lo que ha costado mucho trabajo, explicó la
investigadora.
Llamó la atención
sobre la inexistencia de algún documento legal que señale a la homosexualidad
como una agravante de delito, por lo que en México no existe ninguna
prohibición para este tipo de prácticas.
Lamentablemente,
recordó, aún la tradición y las creencias prevalecen por encima de la ley, por
lo que las prácticas homosexuales tienen su carga de penalización por parte de
la sociedad, a partir de la idea de que el fin único de la sexualidad es la reproducción.
Aclaró que la
comunidad lésbico-gay no ha crecido, sino que se ha mostrado más. Puntualizó
que no puede considerarse como un grupo vulnerable, puesto que cruza a la
propia sociedad y se conforma por individuos no limitados en algún aspecto de
su desarrollo.
Reconoció que
cuando se descubre la condición homosexual de una persona sí existe una
sanción y se le deja vulnerable. “Eso
es lo más terrible de este tipo de personas, que tienen que ocultar todo lo que
les pasa”, finalizó.
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PIES DE FOTO
El Programa Universitario de Estudios de Género de la
UNAM es la única entidad académica en América Latina que estudia la comunidad
lésbico-gay, comentó la investigadora Gloria Careaga Pérez.
En México la
tradición y las creencias aún prevalecen por encima de la ley en lo que
respecta a las preferencias sexuales: Gloria Careaga, investigadora
universitaria.