06:00 hrs. Diciembre 2 de 2001


Boletín UNAM-DGCS-1166

  

 

 

Pies de Foto al Final del Boleín

 

LA ENSEÑANZA PÚBLICA, OBLIGACIÓN Y COMPROMISO INELUDIBLE DEL ESTADO: DE LA FUENTE

 

·        El rector de la UNAM afirmó que en la actual etapa de transiciones las instituciones de mayor solidez y aceptación social tendrán un papel definitivo en los próximos años

·        En los próximos cinco años dos millones 200 mil jóvenes de nivel bachillerato y de licenciatura “tocarán las puertas del sistema educativo”

·        Entregó  reconocimientos a docentes del Sistema Incorporado con 15 y hasta 40 años de labor

 

El rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente, afirmó que en la actual etapa de transiciones las instituciones sacarán adelante al país, sobre todo las de mayor solidez, arraigo, aceptación social y  que están fundadas y dirigidas con visión clara en el ámbito de las libertades, pero éstas también saldrán fortalecidas y jugarán un papel definitivo en los próximos años.

 

Por ello, añadió, deberán desplegar toda su potencialidad y demostrar la importancia del Sistema Educativo Nacional.

 

Al encabezar la ceremonia de reconocimiento a docentes del Sistema Incorporado por 15, 20, 25, 30, 35 y 40 años de labor, el rector destacó que “si claudicamos en eso y lo dejamos como prioridad secundaria, entendiendo que hay una gran estrechez y limitaciones, vamos a equivocar el rumbo”.

 

De la Fuente habló ante la titular de la Dirección General de Incorporación y Revalidación de Estudios (DGIRE) de la UNAM, Mercedes Hernández de Graue; así como el secretario de la Comisión de Incorporación y Revalidación de Estudios del Consejo Universitario, Juan Antonio Montaraz Crespo; los profesores Martha Flores González y Dionisio Lazcano Mancilla -este último con 40 años de labor docente-, y los maestros que fueron reconocidos.

 

Advirtió que la enseñanza pública no es una dádiva ni una opción de la cual podamos prescindir, es una obligación y compromiso ineludible del Estado, por lo que, a pesar de las limitaciones económicas, debe dar respuesta clara tanto a la educación pública como a la privada y crear los mecanismos necesarios de estímulo y protección para salir adelante.

En el acto realizado en el teatro Juan Ruiz de Alarcón, del Centro Cultural Universitario, aseveró que la única alternativa para los próximos 20 años es fortalecer el Sistema Educativo Nacional, ampliar su oferta y generar empleos.

 

Ningún universitario, abundó, puede estar tranquilo mientras todavía haya en México jóvenes que, pudiendo acceder a la educación media superior y superior por su capacidad académica y preparación previa, no lo hagan por razones económicas o por falta de oferta educativa.

 

Del sistema educativo, puntualizó, tendrán que salir las grandes respuestas que buscan los jóvenes, de manera que la responsabilidad de las instituciones del ramo es mayor, así como la de sus profesores.

 

En los próximos cinco años, informó, dos millones 200 mil jóvenes de nivel bachillerato y de licenciatura “tocarán las puertas del sistema educativo nacional”, por lo que sin el decidido apoyo económico para fortalecerlo no se podrá atender esta demanda. “Cómo resolver el problema de la inseguridad si no tenemos jóvenes estudiando y profesores trabajando”.

 

Manifestó la necesidad de aprovechar el bono demográfico en las próximas dos o tres décadas, porque la pirámide poblacional que hoy reduce la dependencia del sector infantil y eleva la del productivo, volverá a recaer en los mayores de 60 años. En lo que esto ocurre, es conveniente proveer de educación y empleo.

 

Antes, destacó la importancia del Sistema Incorporado en el cual se incluyen 11 mil profesores y más de 100 mil alumnos, quienes junto con los más de 30 mil docentes del bachillerato y nivel profesional y posgrado, y cerca de 270 mil estudiantes de la UNAM, constituyen el sistema de educación media superior y superior más importante del país y de América Latina y, probablemente, el más grande del mundo.

 

A pesar del espíritu crítico y autocrático, reconoció De la Fuente “que no lo hemos hecho mal. Podremos resistir cualquier evaluación externa objetiva y rigurosa”.

De la DGIRE comentó que ha realizado tareas importantes porque ha permitido que la Universidad contribuya al fortalecimiento de este sistema. Entendemos que la incorporación no es un mecanismo administrativo que permita dar legalidad a los estudios, sino es un compromiso recíproco en el que se comparten valores e ideas en un marco de libertad absoluta ofrecido por la

 

Universidad en México y donde se pueden encontrar mayores puntos de interacción para mejorar la calidad de los servicios que se ofrecen.

Por su parte, la titular de la DGIRE, Mercedes Hernández de Graue, señaló que la UNAM sabe que buena parte de su vitalidad y fortaleza se la debe al cuerpo docente, y los profesores del sistema incorporado son parte fundamental de ese sector.

 

Recalcó que la UNAM mantiene la confianza en las instituciones privadas para que impartan sus mismos planes de estudio, porque no se reducen sólo a un listado de asignaturas y materias, sino que encierran valores y principios irreductibles acumulados y fomentados por la Universidad Nacional durante sus 450 años.

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FOTO 1

 

El rector Juan Ramón de la Fuente entregó reconocimientos a docentes del Sistema Incorporado por 15, 20, 25, 30, 35 y 40 años de labor

 

 

FOTO 2

 

Del sistema educativo tendrán que salir las grandes respuestas que buscan los jóvenes, dijo el rector de la UNAM.