Boletín UNAM-DGCS-1121
FOTO 1
|
FOTO 2
|
FOTO 3
|
FOTO 4
|
|
![]() |
CONSISTENCIA Y DESARROLLO, NECESARIOS PARA QUE MÉXICO SE MUESTRE COMO UN PAÍS CON ESTABILIDAD
·
La senadora Silvia Hernández dijo que para ello la nación requiere de
instituciones fuertes
·
La política exterior y la seguridad nacional siempre han transitado en
forma separada: Leonardo Curzio
México debe hacer un esfuerzo enorme de
consistencia y desarrollo para presentarse en el exterior como un país con
estabilidad y vigor. Para ello, es necesario mantener instituciones fuertes,
aseguró la presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores en América del
Norte del Senado de la República, Silvia Hernández Enríquez.
La fuerza y la seguridad nacional, precisó, hoy
la obtienen los países mediante la cooperación mutua, pero lo que no debe haber
es inconsistencia.
A nivel mundial, advirtió, se conoce la muerte
de Digna Ochoa, el asesinato de dos jueces en Sinaloa, que dos ecologistas
estuvieron en la cárcel y que los índices de inseguridad son elevados; por tal
motivo, urge proteger los derechos humanos y hacer un esfuerzo por lograr la
consistencia y el avance de la nación.
La legisladora priísta participó en el IX Foro
Nacional de Política Exterior "Tradición y cambio en la política exterior
de México", organizada por la Coordinación del ramo de la Facultad de
Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la UNAM y la Sociedad de Alumnos de
Relaciones Internacionales.
En la mesa "Política exterior y seguridad
nacional", la senadora advirtió que una nación es segura si su pueblo
tiene educación, salud y está bien alimentado. Pero sólo la creación de
instituciones fuertes que no se tambalean con la llegada de elementos no
previstos fortalece esta acción.
Ejemplificó con el caso de Estados Unidos, país
que por tener instituciones fuertes controló la situación generada a
consecuencia de los atentados del 11 de septiembre, pero además su gobierno es
escuchado y obedecido por el pueblo porque está dentro de la legalidad.
En el auditorio Ricardo Flores Magón, de la
FCPyS, la legisladora del Revolucionario Institucional explicó que después de
la Segunda Guerra Mundial los países
incrementaron su fuerza al aliarse con una de las dos potencias creadas.
Sin embargo, al desaparecer la Unión Soviética
la tensión se rompió y la fortaleza la obtuvieron las naciones donde imperaba
la democracia. De inmediato los países se unieron entre sí y México lo hizo con
sus vecinos del norte, Estados Unidos y Canadá, resaltó.
Para mantener la seguridad en México, reiteró,
se requiere alimentación, salud, cultura de la legalidad, un Congreso e
instituciones de justicia fuertes.
Recalcó que las amenazas y los retos para el
país son el narcotráfico, el crimen organizado, el deterioro del ecosistema y
el terrorismo, entre otros.
En el evento, el académico de la FCPyS,
Leonardo Curzio, indicó que en México la política exterior y la seguridad
nacional siempre han transitado en forma separada, hecho que se mantiene con el
nuevo gobierno.
En esta administración, especificó, la seguridad
nacional volvió a ser encuadrada y arrinconada en el Gabinete de Orden y
Respeto, pues a pesar de los esfuerzos del canciller Jorge Castañeda no hay
cambios reales ni interrelación entre ésta y la política exterior. Por ello,
consideró necesario revisar los fundamentos de esta estrategia.
A su vez, la catedrática de la FCPyS, María
Cristina Rosas, puntualizó que hacer declaraciones a la ligera coloca a México
en una serie de compromisos relevantes para la seguridad nacional.
Dijo que en países vulnerables como el nuestro,
la adhesión a los principios básicos es la mejor forma de hacer frente a los
desafíos de las relaciones internacionales. En la medida en que no se tengan
intereses claros, agregó, seguirán generándose vacíos en la política exterior mexicana.
Antes, en la mesa "Política exterior y
poder judicial", el decano de la Facultad, Antonio Murguía Rosete, expuso
que ante las graves carencias del sistema judicial debe revisarse y rehacerse
por completo.
Planteó que si a nivel interno no se respeta la
legalidad y la justicia, en el ámbito internacional difícilmente se podrán
cumplir los compromisos.
Entre los delitos internacionales se encuentran
el narcotráfico, el tráfico de vehículos y de obras de arte, el lavado de
dinero, el secuestro diplomático, el terrorismo, la xenofobia, la corrupción y
la discriminación.
La política mexicana, concluyó, debe tomar
determinaciones de manera expedita a fin de cumplir sus obligaciones
internacionales, pero para ello primero tiene la obligación de realizar las
internas.
-o0o-
Pies de foto
La
senadora Silvia Hernández y la académica de la UNAM María Cristina Rosas, en el
IX Foro Nacional de Política Exterior.
Ricardo Méndez Silva y Juan Carlos Velázquez, al
participar en el foro sobre política exterior que se realiza en la Universidad
Nacional.
Antonio Murguía Rosete, decano de la FCPyS, acompañado
por Ricardo Méndez Silva y Juan Carlos Velázquez, en el foro sobre política
exterior en la UNAM.