9:00 hrs. Diciembre 10 de 2000
Boletín
UNAM-DGCS-836
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El propósito, definir un mecanismo nacional
para evaluar y premiar la productividad en las empresas
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Es preciso encontrar un equilibrio entre los
requerimientos de la productividad y las conquistas sociales de los
trabajadores
México
carece de cultura de productividad y la discusión sobre este tema permitiría
modificar estructuras mentales que en la actualidad propician la explotación
del trabajador afirmó Raúl Mejía Estañol, catedrático de la Facultad de
Contaduría y Administración (FCA) de la UNAM.
Los criterios de productividad, agregó el catedrático, como son los
estímulos laborales, en nuestro país sólo se aplican en algunos sectores de
trabajadores de las grandes corporaciones industriales.
El
académico señaló lo anterior durante el Foro sobre el tema que se realizó en el
marco de la segunda Feria Universitaria de los Negocios y que tuvo como
propósito establecer criterios para desarrollar parámetros propios de
productividad en el país.
La idea, explicó, fue conjuntar los temas para abordarlos desde las
perspectivas del sector público, la iniciativa privada y la academia. Uno de
los objetivos más importantes fue encontrar las vías adecuadas para acercar al
trabajador a las nociones de productividad y hacerle saber los beneficios que
puede obtener.
Es responsabilidad de la alta dirección de las empresas diseñar los
planes y crear los escenarios para que sus empleados no sientan que sus
ingresos peligran y conozcan los beneficios adicionales que se logran con la
calidad y competitividad, aseguró el profesor universitario.
Para ello, subrayó, deben dejarse atrás esquemas en los que se exige
mucho trabajo a cambio de una paga reducida. Al obrero se le aprovecha mejor al
capacitarlo y retribuirle sus servicios de manera equilibrada.
Porfirio
Marquet Guerrero, catedrático de la Facultad de Derecho, señaló en su
participación que es necesario encontrar una posición de equilibrio en la que
se concilien los criterios de eficiencia labora y las conquistas sociales de
los trabajadores.
El académico agregó que no se debe privilegiar el productivismo en
detrimento de los valores o intereses de los trabajadores, sin atender los
requerimientos de productividad.
Apuntó, además, que el capital humano representa el valor más
importante que tienen las organizaciones empresariales y que se manifiesta de
manera directa en los salarios y prestaciones, y en forma indirecta en la
participación en las utilidades de la empresa y la estabilidad en el empleo.
En el Foro participaron los académicos de la Facultad Víctor Manuel
Rubio Ragazzoni, Fernando Arias Galicia, Manuel Cabrera López y Adrián Méndez
Salvatorio, así como Javier Vega Rugiero, de la Facultad de Psicología, y
Roberto Rosales González, consultor independiente.
Fernando Arias Galicia sostuvo, en su intervención, que la
productividad debe entenderse más bien como el mejor aprovechamiento de los
recursos disponibles, por lo cual las labores de los contadores están más allá
del registro de transacciones financieras, para ocuparse también de aspectos ambientales
y de capital humano que inciden sobre los procesos productivos.
Javier Vega Rugiero, por su parte, habló de la ingeniería de recursos
humanos que consiste en ubicar al personal de las empresas en aquellas áreas
donde pueden aprovecharse mejor sus aptitudes.
La competencia puede ser medida para evaluar el proceso de trabajo y
sus resultados, y uno de los aspectos más relevantes para su certificación es
hacer compatibles los objetivos de la empresa con los del trabajador, precisó.
De este modo se puede hacer que los valores de la empresa coincidan con
los del individuo, para que ambos se identifiquen y compartan objetivos.
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