Quien se dedica al cuidado de la salud se consagra a la única profesión en la que no puede haber errores, y la manera de no fallar es la práctica constante. Por ello, la Facultad de Medicina (FM) de la UNAM remodeló el Departamento de Anfiteatro (antes perteneciente al Departamento de Anatomía y hoy independiente), para que sus estudiantes de posgrado y pregrado tengan oportunidad de trabajar con procedimientos de mínima invasión.
Esto coloca a la Universidad Nacional a la vanguardia en la práctica de técnicas quirúrgicas antes no realizables por la falta de tecnología y recursos de conservación para estos fines.
Al respecto, Diego Pineda Martínez, jefe del Departamento de Anfiteatro, declaró que en universidades de Estados Unidos y América Latina no existe otro recinto como éste, pues posee las últimas innovaciones tecnológicas.
Características
Para actualizar el recinto, Pineda Martínez, junto con Erandi Jiménez Jacques, responsable de proyectos y obras en esa entidad académica, recorrieron varias universidades de Norteamérica y América Latina para tomar los mejores elementos de cada una.
Hoy, el anfiteatro cuenta con un incinerador de última generación; sistema de inyección y extracción que permite limpiar el aire; un drenaje con trampas; dos cámaras (una de congelacion y otra de refrigeración), y aparatos mecánicos que permiten mover y trasladar los cuerpos.
El crematorio referido fue traído de Estados Unidos y es único en América Latina, calienta a más de mil 500 grados centígrados y no es contaminante, pues registra cero emisiones (sólo sale vapor de su chimenea). Los cadáveres tardan entre 45 y 60 minutos en consumarse. Es más rápido que otros debido a las sustancias aplicadas para acelerar su combustión.
También cuenta con un sistema de monitoreo que funciona las 24 horas. Si surgiera alguna falla, inmediatamente se avisa desde la central ubicada en EU y de no obtener respuesta, ellos tienen acceso y pueden bloquear el equipo.
Su sistema de inyección y extracción de aire limpia el ambiente de forma constante y purifica los malos olores. Así, el oxígeno que se respira es nuevo y no se contamina.
Otro aspecto importante es el drenaje y su sistema de trampas que atrapa la grasa del material biológico. Para mantener su buen estado, esta estructura se limpia continuamente.
Asimismo, hay una cámara de congelación de menos 18 grados Celsius y otra de refrigeración de menos dos, algo que ninguna universidad de Latinoamérica posee.
Este punto es fundamental para los diferentes procesos de estudio de la anatomía humana, pues en ocasiones es necesario emplear temperaturas muy bajas y en otras sólo enfriar.
El académico destacó que los métodos de preparación eran antiguos y no se tenía la infraestructura requerida para técnicas más actuales. Hoy es factible practicar cirugías de mínima invasión (laparoscopias, artroscopias, endoscopias y rinoscopias) en las que se practica un pequeño orificio y se mete una cámara para operar. Asimismo, hay una dignificación importante de los cuerpos, desde su recepción y almacenamiento hasta la realización de los procedimientos.
La FM recomendará a los jóvenes que practiquen con cadáveres. De esta manera, si el estudiante se enfrenta a un caso real tendrá la experiencia necesaria. Para mover los restos humanos poseen una maquinaria tipo grúa que permite trasladarlos de un lado a otro con la dignidad necesaria.
De acuerdo con Pineda Martínez, disponen de 500 sitios individuales para guardar a cada uno de los occisos.
El Departamento de Anfiteatro de la UNAM atiende a más de nueve mil residentes de posgrado, mil 800 estudiantes de pregrado de primer año, así como a las facultades de Estudios Superiores Iztacala y Zaragoza, e incluso a la de Odontología.
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