Boletín UNAM-DGCS-687
Ciudad Universitaria
11:00 hrs. 17 de noviembre de 2013.


Berenice Ramírez López

EN EL SECTOR INFORMAL, CASI DOS TERCIOS DE LA POBLACIÓN ECONÓMICAMENTE ACTIVA OCUPADA

• Trabajadores que viven en pobreza no tienen acceso a protección social, seguros de salud, jubilación, cuidado infantil ni a otros mecanismos de protección
• Se presentaron los resultados del proyecto Fortaleciendo la Voz de los Trabajadores Informales en las Decisiones de Política Social en América Latina, Programa México, en el que participa un grupo de investigadores de la UNAM

Los hombres y mujeres que laboran en la economía informal constituyen la mayoría de la población trabajadora de América Latina. Viven en pobreza y carecen de acceso a la protección social.

A nivel regional, existen carencias para contar con seguros de salud que cubran enfermedad y lesiones producidas por el desempeño laboral, jubilación que otorgue seguridad económica en la vejez, cuidado infantil y acceso a otros mecanismos de protección.

En México, al segundo trimestre de 2013, 14 millones 177 mil personas laboraban en este sector y dos millones 148 mil mujeres figuraban como empleadas domésticas. A nivel nacional, el 60 por ciento de la Población Económicamente Activa ocupada se ubica en la informalidad, sin acceso a seguridad social, según resultados del proyecto Fortaleciendo la Voz de los Trabajadores Informales en las Decisiones de Política Social en América Latina, Programa México.

La investigación, a cargo de la red global Women in Informal Employment: Globalizing and Organizing (WIEGO), es financiada por el Ministerio para el Desarrollo Internacional del Reino Unido (DFID). Se instrumentó en Perú, México y Colombia en los últimos tres años.

Aquí, los trabajos fueron dirigidos por Berenice Ramírez López, del Instituto de Investigaciones Económicas (IIEc) de la UNAM y se revisaron las políticas y programas de protección social en los tres niveles de gobierno (nacional, regional y local), además de las estrategias de las organizaciones de trabajadores informales pobres para proveerse de algún tipo de seguridad, a fin de extraer lecciones para políticas públicas de cobertura amplia.

Los objetivos del proyecto son contribuir en la instrumentación de esquemas que respondan de manera efectiva a las necesidades reales de los trabajadores pobres de la economía informal, dar mejor representación de este grupo en foros de decisión pública y mejorar sus capacidades de cabildeo.

El equipo de investigación estuvo integrado, entre otros, por Cruz Álvarez, del IIEc; Norma Samaniego y Ciro Murayama, de la Facultad de Economía de esta casa de estudios; Beatriz Torres, de la Universidad de Yucatán, y Saúl Moreno, del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS) Golfo.

Informalidad, una realidad regional

Al presentar los resultados, Berenice Ramírez informó que se revisaron las condiciones del sector informal en cuatro urbes del país: Ciudad de México, Mérida, Oaxaca y Monterrey.

Se trata de promover el diálogo entre académicos, especialistas en el tema, funcionarios, legisladores y trabajadores a partir del conocimiento y discusión de la información obtenida, subrayó en el auditorio Ricardo Torres Gaitán, del IIEc.

Carmen Roca, coordinadora regional de WIEGO, señaló que el objetivo de la red de investigadores y académicos es incidir en el diseño de políticas públicas orientadas a superar las condiciones de vulnerabilidad y pobreza en que viven los trabajadores, con la participación activa de los involucrados.

Por su parte, Verónica Villarespe, directora del IIEc, destacó la colaboración con otras instancias, pues permite constituir grupos de trabajo con una agenda común y desarrollar proyectos afines a la temática.

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Fotos

Berenice Ramírez López, del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM, dirigió los trabajos en México.