Boletín UNAM-DGCS-624
Ciudad Universitaria
06:00 hrs. 18 de octubre de 2013.


Luis Alonso Herrera Montalvo


DESARROLLAN UNAM E INCAN MÉTODOS PARA LA PREDICCIÓN Y DETECCIÓN TEMPRANA DEL CÁNCER DE MAMA

• Identifican anticuerpos asociados a tumores y mutaciones genéticas en la población mexicana, dijo Luis Alonso Herrera Montalvo, de la Unidad de Investigación Biomédica en Cáncer
• En México, ese padecimiento es la primera causa de muerte en mujeres y la enfermedad neoplásica femenina más frecuente en el país, afirmó Cynthia Villarreal, del INCAN
• Autoexploración y estudios de mastografía se recomiendan en el Día Mundial contra el Cáncer de Mama, que se celebra este 19 de octubre

La detección temprana y la predicción de riesgo son dos grandes retos para enfrentar el cáncer de mama, primera causa de muerte de mujeres en México y la enfermedad neoplásica femenina más frecuente en el país (desde 2007 superó al cérvico-uterino).

Para anticipar o detectar esa afección desde su inicio, un grupo de expertos del Instituto de Investigaciones Biomédicas (IIBm) de la UNAM y del Instituto Nacional de Cancerología (INCAN), desarrollan varias líneas de estudio dentro del Programa de Investigación Biomédica en Cáncer de Mama.

“La detección oportuna se refiere a mujeres que ya son portadoras de un tumor, en las que se busca que éste sea diagnosticado en las etapas más tempranas, incluso si ellas no lo sienten al realizarse una autoexploración y mide menos de una micra de diámetro, tamaño que ya detecta una mastrografía”, explicó Luis Alonso Herrera Montalvo, adscrito a la Unidad de Investigación Biomédica en Cáncer que comparten el IIBm y el INCAN en la sede de este último.

En tanto, la predicción se refiere a conocer a detalle la predisposición genética para desarrollar esa afección, estudio que requiere profundizar en las particularidades de la población mexicana, dijo en el marco del Día Mundial contra el Cáncer de Mama, que se celebra este 19 de octubre.

Anticuerpos asociados a tumores

Para detectar al tumor cuando es casi invisible, el equipo encabezado por Carlos Larralde Rangel, investigador emérito del IIBm y su colaborador Edmundo Lamoyi Velázquez, trabaja en la identificación de anticuerpos asociados a los tumores de mama, para utilizarlos como un método diagnóstico más eficiente que los actuales.

“Su estudio busca detectar marcadores en suero, pues quienes desarrollan cáncer de mama generan una respuesta inmunológica contra esas células tumorales, que puede ser descubiertas a través de métodos sencillos como Elisa y así confirmar a las pacientes que son portadoras de un tumor maligno”, indicó Herrera Montalvo.

Los marcadores son detectables en suero; con una muestra sanguínea podrían localizarse alrededor de siete antígenos en cantidades pequeñas, cuyo patrón determina el grado de certidumbre del diagnóstico de un tumor. A futuro, esos anticuerpos asociados a la enfermedad se utilizarán en programas de tamizaje (o screening) con mejores resultados que las mastografías.

“Esa metodología aún requiere el estudio clínico y su validación, pero los resultados preliminares son prometedores, pues existen componentes de esa respuesta inmune específicos para tumores de mama. Este método será una herramienta importante para que los médicos hagan una detección oportuna”, remarcó.

Mutaciones en mujeres hispanas

El grupo de expertos en genómica del cáncer de dicha unidad, aspira a encontrar en esa disciplina una forma de anticiparse al de mama mediante la identificación de mutaciones asociadas.

“Queremos tener una prueba que detecte la predisposición. Hay ciertos genes que controlan el crecimiento de tumores y si sufren mutaciones, éstos se desarrollan con más facilidad. Dos de esos genes, BRCA1 y BRCA2, pueden ser marcadores predictivos de riesgo en diferentes poblaciones”, añadió.

Ambos son genes grandes y pueden presentar un número elevado de mutaciones. Tan sólo en mujeres hispanas se han detectado cerca de 140 muy frecuentes. El estudio de éstas ha generado un panel, llamado Hispanel, con el que se busca identificar cuáles son significativas para predecir el riesgo en la población mexicana. La predisposición no la podemos modificar, pero sí advertir a las pacientes que su vigilancia debe ser más estrecha y así adelantarnos al desarrollo de la neoplasia, apuntó.

Para su estudio, se requieren muestras de sangre de las pacientes, en las que analiza mutaciones germinales en los genes BRCA 1 y 2.

En colaboración con Jeffrey Weitzel, de la División de Genética Clínica de Cáncer del City of Hope Comprehensive Center de Los Ángeles, California, valida un panel de 114 mutaciones frecuentes en hispanas mexicanas.

Esto podría tener un gran impacto en el costo de evaluación de riesgo de mujeres en nuestro país, pues actualmente el análisis de mutaciones en los genes BRCA 1 y 2 con secuenciación masiva cuesta mil 700 dólares y con este proyecto se reducirá a 50.

Hoy, detección tardía y alta mortalidad

Actualmente, en México existe una detección tardía que ocasiona una alta mortalidad, incluso en jóvenes, acotó Cynthia Villarreal, investigadora del INCAN.

En promedio, se diagnostican 15 casos por 100 mil habitantes al año. “Pero la cifra es un sub-registro, pues no se cuenta con uno fidedigno que condense todos los casos nuevos”, reveló.

Tan sólo en el INCAN se atienden 900 nuevos al año y se ofrecen 150 consultas al día. “El 60 por ciento de ellas tienen tumores localmente avanzados, el 25 llegan con tumores tempranos y el 15 ya tienen metastásicos que, según el subtipo, han producido otros, generalmente en huesos, pulmones, hígado y cerebro”, comentó.

Día Mundial

Este 19 de octubre se celebra el Día Mundial contra el Cáncer de Mama. “Es una buena estrategia para hacer conciencia entre la población sobre la importancia de la detección temprana, que se puede lograr con autoexploración y la mastografía”, expuso Herrera Montalvo.

Al respecto, Cynthia Villarreal resaltó que es indispensable tener conciencia de que debemos hacer más difusión en el año, de lo que es esta enfermedad, que afecta a un gran porcentaje de mujeres jóvenes.


—o0o—


Fotos

Luis Alonso Herrera Montalvo, investigador adscrito a la Unidad de Investigación Biomédica en Cáncer que comparten el IIBm y el INCAN en la sede de este último.