Boletín UNAM-DGCS-604
Ciudad Universitaria
11:30 hrs. 9 de octubre de 2013.


Claudia Mendoza

           


PREVENCIÓN, ATENCIÓN OPORTUNA E INFORMACIÓN, FUNDAMENTALES EN EL CUIDADO DE LA SALUD MENTAL

• Se requiere capacitar a médicos generales y al personal de salud del primer nivel de atención en la detección de padecimientos como depresión, ansiedad o estrés postraumático
• Es preciso informar a la población sobre las características de estos trastornos y desterrar los mitos que persisten al respecto, planteó Claudia Mendoza, de la Escuela Nacional de Trabajo Social de la UNAM, en el marco del Día Mundial de la Salud Mental, que se conmemora este 10 octubre

México requiere capacitar a los médicos generales y a todo el personal de salud adscrito al primer nivel de atención en la detección oportuna de padecimientos mentales como depresión, ansiedad o estrés postraumático, los más comunes, e impulsar campañas para informar a la población acerca de ellos, para erradicar los mitos que persisten al respecto, planteó Claudia Mendoza, de la Escuela Nacional de Trabajo Social (ENTS) de la UNAM.

Actualmente, cerca del 80 por ciento de los recursos destinados al rubro son canalizados a hospitales especializados. Requerimos proporcionar a especialistas los elementos necesarios para dirigir a los pacientes a una intervención terapéutica, a dinámicas de grupo o recetarles un fármaco específico, sostuvo.

La prevención en la atención de la salud mental es fundamental, tanto a nivel individual, como grupal y comunitario, enfatizó en ocasión del Día Mundial de la Salud Mental, que se conmemora este 10 de octubre.

Trastornos psiquiátricos, una realidad

La profesora de la ENTS mencionó que en la sociedad aún existen prejuicios, falacias e ideas equivocadas acerca del tratamiento psiquiátrico, al que se relaciona directamente con la locura, cuando en realidad abarca una gama amplia de trastornos.

Es indispensable comprender que la mayoría de las personas tiene posibilidades de presentarlos al experimentar la muerte de un ser querido, la pérdida del empleo, una separación de pareja o el diagnóstico de una enfermedad crónica, entre otros eventos inesperados. Estos provocan desequilibrios emocionales que requieren atención inmediata y una intervención integral, agregó.

Son momentos críticos que propician trastornos mentales. En clínicas y centros de salud, los médicos generales y el personal especializado deberían descubrir cualquier situación que requiera atención especializada, además de informar sobre las características de estos padecimientos en escuelas, hospitales y otros centros de reunión, recalcó.

A esto se suman las condiciones de inseguridad y violencia en que vivimos. En cualquier momento podemos ser víctimas de la delincuencia y presentar estrés postraumático. Sin atención especializada, el evento repercute negativamente en la vida personal y familiar, con distintas implicaciones sociales. Además, se aúna la falta de una cultura del manejo de las emociones.

Prevención

La especialista expuso que, ante cualquier situación crítica, es necesario detectar cambios de ánimo o de actitud, e identificar antecedentes familiares de esquizofrenia, depresión o intentos de suicidio.

Asimismo, es indispensable impulsar programas educativos que brinden las herramientas necesarias para identificar datos de alerta que requieran valoración especializada, por ejemplo, en el caso de una persona que permanece triste por más de dos semanas.

En las escuelas, a partir del nivel básico, podrían incluirse contenidos acerca de las características de los trastornos psiquiátricos. Para erradicar los mitos y estigmas, la educación es fundamental, concluyó.

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Fotos


Claudia Mendoza, de la Escuela Nacional de Trabajo Social.