Consumada la reelección de Barack Obama en la presidencia
de la Unión Americana, especialistas de esta casa de estudios
e invitados de otras entidades hablaron sobre los escenarios que habrá
de enfrentar el mandatario en campos como el económico y desempleo.
El nuevo gobierno de Estados Unidos. Impactos domésticos
e internacionales, fue el tema del encuentro celebrado en el Centro
de Investigaciones sobre América del Norte (CISAN) de la Torre
II de Humanidades, enlazado con la sede de la UNAM en Los Ángeles,
California.
Este segundo periodo despierta expectativas, porque la primera
vez que asumió el cargo, la economía estaba por los
suelos y el desempleo crecía. Ahora será observado minuciosamente
por sus críticos, coincidieron los expertos.
En la confrontación Barack Obama-Mitt Romney, el 71
por ciento de los latinos se inclinó por la reelección.
Manuel Chávez, de la Universidad Estatal de Michigan, mencionó
que en Florida, Texas, California e Illinois, demócratas y
republicanos deberán rediseñar su estrategia para ganar
votantes en este sector, pues los cambios demográficos apuntan
que esos votos serán determinantes en 2016, y agregó
que actualmente siete de cada 10 hispanos son de origen mexicano.
Otro de sus pronósticos es que Texas, entidad republicana,
será un estado indeciso en 2016, como lo son ahora las dos
Carolinas y Ohio, que determinó la reelección de Obama,
y donde el rescate de la industria automotriz jugó un papel
preponderante.
Seguridad nacional, el conflicto con Siria, la situación
en Irán y las relaciones con México, China y Rusia serán
las prioridades de Obama en su segundo periodo presidencial, consideró.
Alternativas
Raúl Benítez Manaut, del CISAN, calificó
a Obama de aislacionista en materia internacional, pues no más
del cinco por ciento de sus discursos se refieren a esos tópicos.
Para la reelección planteó dos opciones: seguir las
huellas de Lyndon B. Johnson o de James Carter.
Johnson, considerado impulsor de los derechos sociales, es
más identificado por el conflicto bélico de Vietnam;
Carter fue el último presidente en subir la inflación
dos dígitos. Obama, aseguró, difícilmente abrirá
la llave a programas públicos y abatirá el desempleo.
El investigador del CISAN no sabe si aplicarán transformaciones
sustantivas en la relación México-EU, de lo que sí
está seguro es que los cambios tendrán énfasis
en lo comercial.
Para Leonardo Curzio Gutiérrez, también del
CISAN, en el pasado ejercicio electoral de EU, las redes sociales
jugaron un papel importante y hubo un avance considerable del Internet;
sin embargo, las televisoras continúan con el control en resultados
preliminares, encuestas de salida y otros aspectos.
A su parecer, Obama deberá trabajar en tres ámbitos:
creación de empleos, valores y reposición del liderazgo
de EU en el mundo; la crisis de alimentos, del euro y la ambiental
serán de vital importancia.
Radicalización
Por último, Sergio Silva Castañeda, del Instituto
Tecnológico Autónomo de México (ITAM), resaltó
que la radicalización del Partido Republicano a la extrema
derecha dañó a Romney, pues al querer moverse al centro
al final de la campaña, no obtuvo los resultados planeados.
Su posición en migración, asistencia médica y
matrimonio entre personas del mismo sexo también fueron determinantes.