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Las estimaciones de producción son muy altas porque nadie
ratifica si las oficiales son reales, afirmó Carlos Resa
Nestares, de la Universidad Autónoma de Madrid
• El valor de las exportaciones de marihuana mexicana es de
dos mil millones de dólares anuales. En Estados Unidos se
consumen cada año seis mil 500 toneladas de esa droga, mientras
que en nuestro país, la cifra es de 400 toneladas, dijo Miguel
Molina Foncerrada, director de CFI Consultores
En México no hay cifras confiables
ni metodologías claras para analizar el mercado de drogas,
coincidieron especialistas en el Foro Internacional sobre Políticas
de Regulación del Consumo de Drogas que se realiza en la UNAM.
Las estimaciones de la producción
en el país son muy altas, porque nadie ratifica si las oficiales
son reales, destacó el economista español Carlos Resa
Nestares, de la Universidad Autónoma de Madrid.
En la mesa El mercado de las drogas en
México, moderada por Ernesto López Portillo Vargas,
director ejecutivo del Instituto para la Seguridad y Democracia, Resa
planteó que las cifras están sobrevaloradas, porque
así las agencias antidrogas obtienen más recursos para
mantener su infraestructura burocrática.
En Estados Unidos y México la participación
de ese mercado en la economía es equivalente a menos del uno
por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
En esta empresa hay negocio en las áreas
de producción y distribución, la demanda genera la oferta,
y es elástica al precio. Así, los consumidores cambian
de estupefaciente si cambia el valor, indicó Resa, para quien
el dilema mundial es por qué las drogas son tan caras si los
costos son bajos, la publicidad inexistente, y el mayor riesgo es
la incautación.
Miguel Molina Foncerrada, director de CFI
Consultores S.C., calculó que el valor de las exportaciones
de marihuana mexicana es de dos mil millones de dólares anuales.
En Estados Unidos se consumen cada año seis mil 500 toneladas,
mientras que en México, 400 toneladas, añadió.
Un gramo cuesta 10 veces más en el
mercado mayorista del vecino del norte que en México, que produce
seis mil 500 toneladas y abastece totalmente el mercado norteamericano;
“no se producen 27 mil toneladas como dicen las agencias, y
17 mil personas están directamente involucradas en la siembra”,
precisó.
En su oportunidad, Beau Kilmer, codirector
del Centro RAND de Investigación sobre Políticas de
Drogas, de Estados Unidos, desconfió de los números
en su nación, y puso de relieve que deben realizarse estudios
académicos para tener datos confiables.
La demanda en la Unión Americana cambia,
y esto afectará a México. “Si se legaliza, el
precio bajará, se regularizará la cadena de producción
sin riesgos de ir a la cárcel. Habría innovación
tecnológica y laboratorios formales, no establecidos en las
cocheras clandestinas”, dijo.
Al respecto, estimó que el precio
de la marihuana antes de impuestos podría bajar más
del 80 por ciento, y también reduciría la distribución
del menudeo. “Si se legaliza la producción y las personas
tienen invernaderos y granjas, disminuirá aún más,
de acuerdo a la experiencia en California”, advirtió.
Mercado de las drogas
El narcotráfico es el mercado ilícito
más grande en la historia de la humanidad, aún si no
hay rigor en la forma y en las fuentes para estimar su monto financiero,
señaló Luis de la Barreda Solórzano, director
del Programa Universitario de Derechos Humanos (PUDH) de la UNAM.
En su intervención como moderador
de la mesa Aspectos financieros del mercado de las drogas en México,
detalló que Estados Unidos tiene un mercado de estupefacientes
60 veces mayor al de nuestro país; supera 2.5 veces la cantidad
de su población, pero quintuplica el consumo de drogas.
Por su parte, Thomas Pietschman, oficial
de investigación en la sección Estudios y Análisis
de Amenazas de la Oficina de las Naciones Unidas contra las Drogas
y el Delito, dejó en claro que los efectos financieros del
narcotráfico mexicano no se hallan in situ, sino en
la Unión Americana.
En su oportunidad, Alejandro Jesús
Rebolledo, abogado experto en antilavado de dinero y director del
Instituto de Altos Estudios de Derecho (IDAED), Venezuela, comentó
que en países como Hungría, Panamá y Brasil se
ubican actualmente cuentas bancarias con fines de “blanqueo”
de recursos.
Se requiere un cambio en la mentalidad de
políticos y una modificación en la cultura de los pueblos
para enfrentar al crimen organizado, enfatizó.
Ricardo Gluyas Millán, investigador
del Instituto Nacional de Ciencias Penales, se pronunció a
favor de la creación de lo que denominó “unidades
de inteligencia financiera patrimonial”, que serían organismos
instalados en cada entidad federativa de México, enfocadas
a identificar dónde y cómo están los bienes del
crimen organizado, para generar afectación de sus recursos.
“Una orden de aprehensión, en el mejor de los casos,
tarda algunas horas, y una transacción de dinero, sólo
unos segundos”, indicó.
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