• Por sus investigaciones, Jaime
Iván Velasco Velázquez, del IFC de la UNAM, obtuvo
el Premio Ciudad Capital Heberto Castillo Martínez 2011,
que otorga el GDF a través de su Instituto de Ciencia y Tecnología,
en la categoría de Científicos de 45 años o
menos, en el área de Salud
La enfermedad de Parkinson y la esclerosis
lateral amiotrófica son padecimientos del sistema nervioso
con una característica interesante: son susceptibles de ser
corregidos por un trasplante de neuronas diferenciadas de células
troncales. Ello se debe a que el daño en esos pacientes es
relativamente restringido, en regiones y tipos de células cerebrales
particulares que causan la sintomatología.
Por sus investigaciones en el tema, Jaime
Iván Velasco Velázquez, de la División de Neurociencias
del Instituto de Fisiología Celular (IFC) de la UNAM, obtuvo
el Premio Ciudad Capital Heberto Castillo Martínez
2011, que otorga el gobierno del Distrito Federal (GDF),
a través de su Instituto de Ciencia y Tecnología, en
la categoría de Científicos de 45 años o menos,
en el área de Salud.
En el Parkinson, las células que mayoritariamente
mueren son las dopaminérgicas del cerebro medio, que en condiciones
normales liberan dopamina hacia el cuerpo estriado. Si faltan, se
registran alteraciones motoras que se manifiestan como temblor, rigidez
y dificultad en los movimientos.
Se trata de la segunda más frecuente
del sistema nervioso, sólo después de Alzheimer. Aunque
no existen datos claros en México, se estima que entre uno
y dos por ciento de la población mayor de 60 años padece
Parkinson, informó el egresado de la carrera de Químico
Farmacéutico Biólogo, y del doctorado en Ciencias Químicas,
con especialidad en Bioquímica de la UNAM.
Desde 1971, recordó, se describió
un modelo de roedores parkinsonianos, que se utiliza para ensayar
distintas estrategias terapéuticas relacionadas, y que consiste
en inyectar una toxina para causar la muerte de esas neuronas. En
el caso del científico universitario, estas ratas se usan para
ensayar el trasplante de neuronas dopaminérgicas diferenciadas
de células troncales embrionarias.
Las embrionarias, aclaró, tienen la
propiedad de ser muy versátiles en su capacidad de diferenciarse.
Tienen un origen temprano, que es el blastocisto, y por esa razón
son capaces de producir cualquier célula diferenciada en un
organismo adulto.
“El trasplante lo hemos hecho tanto
en el cuerpo estriado como en la sustancia nigra, y en ambos
casos hemos observado una recuperación en la conducta; hemos
visto que implantar neuronas que secretan dopamina en la región
que requiere este neurotransmisor, disminuye significativamente la
conducta de giro (dar vueltas de forma involuntaria) que presentan
los animales enfermos”.
Para el caso de la sustancia nigra,
abundó, se ha seguido otra estrategia en colaboración
con Instituto de Neurobiología: emplear moléculas que
atraen a los axones (prolongaciones) de las neuronas desde esa región,
donde se implantan, hasta el estriado. “También en ese
caso hemos observado una recuperación significativa”.
En tanto, la esclerosis lateral amiotrófica
se caracteriza por la muerte de neuronas motoras, que permiten el
movimiento voluntario. Los pacientes que sufren el mal se paralizan
inicialmente de piernas y brazos y, eventualmente, fallecen porque
se pierde la innervación o el contacto de los nervios con los
músculos que controlan la respiración.
Las personas se asfixian después de
algunos meses o años de padecer la enfermedad. Afecta entre
cinco y seis personas por cada 100 mil.
En este caso, Velasco y su equipo diferencian
células troncales embrionarias a neuronas motoras; “verificamos
por varios marcadores moleculares que ocurre esa diferenciación
neuronal. La identificación se hace mediante la expresión
de una proteína fluorescente verde, muy fácil de ver
en el microscopio”.
Aquí, el trasplante en animales transgénicos
(que tenían la expresión de un gen humano mutado, causante
de la enfermedad de tipo familiar) se hizo en la médula espinal
de ratas adultas. Después del procedimiento, refirió
el experto, se registró una recuperación transitoria
en la conducta y los animales recobraron su movilidad.
No obstante, después de tres semanas,
aún los trasplantados empezaron a paralizarse, de manera similar
a los animales que no las recibieron. Después de un mes, se
analizó su tejido y se encontró que no había
ya neuronas “verdes”.
Entonces, se realizó la intervención,
pero ahora en animales que no eran transgénicos. Después
de más de un mes, esas neuronas seguían presentes en
la médula espinal de las ratas. Eso significa que las trasplantadas
pueden funcionar por un tiempo, pero el ambiente hace que mueran.
“De la misma manera como observamos que las endógenas
desaparecen, las implantadas también se degeneran”.
Esto apunta a que es muy importante considerar
cuál será el ambiente al que se enfrenten las células
una vez colocadas en el Sistema Nervioso Central. Ahora justamente
estudiamos la manera en que se puede promover la supervivencia, independientemente
del medio que afronten, sostuvo Velasco.
Una tercera línea en el laboratorio
del universitario es la diferenciación in vitro a
neuronas dopaminérgicas y motoras. Para ello, estudia el efecto
del estradiol y la progesterona (hormonas con funciones importantes
en la reproducción y en el cerebro adulto) en cultivos de células
troncales embrionarias. Halló que ambas promueven la diferenciación
tanto a neuronas dopaminérgicas como motoras.
El co-editor del libro de texto de reciente
publicación Células troncales y medicina regenerativa,
editado por el Programa Universitario de Investigación en Salud,
aclaró que hasta ahora no existe tratamiento seguro y eficaz
para ninguna afección del sistema nervioso, y en el caso de
sus estudios “no hay que alentar falsas esperanzas; esto podría
funcionar eventualmente”.
Por lo pronto, dijo sentirse contento por
el premio. En el área de salud se realizan estudios epidemiológicos
y clínicos, “mi investigación es básica
y tiene relación con enfermedades del sistema nervioso, pero
no hacemos procedimientos en humanos. De hecho, recientemente comenzamos
a trabajar con células troncales humanas”, finalizó.
-o0o-