• Especialista en derecho internacional
privado, el profesor e investigador del Centro de Relaciones Internacionales
de la FCPyS de la UNAM diseñó y puso en marcha un
posgrado de esa especialidad en la institución sonorense
• Para consolidar el mercado interno y pasar a una nueva etapa,
de maquilador a generador de una industria propia, se debe impulsar
la educación, ciencia, tecnología e innovación,
recomendó
Por haber diseñado y puesto en marcha
a lo largo de nueve años (1990-1999) el posgrado en Derecho
Internacional en la Universidad de Sonora (Unison), que desde esa
década forma nuevas generaciones de internacionalistas, Leonel
Pereznieto Castro, del Centro de Relaciones Internacionales la Facultad
de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la UNAM, fue distinguido
como doctor honoris causa por la institución sonorense.
La relación del académico con
la Unison inició en 1988. Entonces, esa casa de estudios solicitó
a la UNAM el apoyo de un experto para formar un programa de maestría
y doctorado en una entidad fronteriza que mantiene una estrecha relación
jurídica con Estados Unidos, derivada del intercambio comercial
en áreas de ganadería, agricultura, industria y minería,
entre otras.
“Entonces era investigador del Instituto
de Investigaciones Jurídicas (IIJ) y allí me contactaron.
En 1990 inicié con el diseño, en el que trabajé
hasta 1999, y se puso en marcha. En esos nueve años viajé
a Sonora con frecuencia, a veces cada dos semanas”, recordó
el profesor de tiempo completo, actualmente adscrito al Centro de
Relaciones Internacionales (CRI) de la FCPyS.
A 11 años de distancia, el abogado
egresado de la Facultad de Derecho de la UNAM, y doctor en derecho
por la Universidad de París, recibirá la distinción
“con agrado y sorpresa”.
“Me di por bien pagado en el momento
que la especialidad comenzó a funcionar en los cuatro planteles
de la Unison, pero ahora recibo esta sorpresa con mucho gusto”,
acotó el académico, reconocido con el nivel tres del
Sistema Nacional de Investigadores (SNI).
Derecho comparado, puente entre países
Para fomentar el estudio y actualización
de su especialidad en diversas regiones de México entre abogados
e internacionalistas, Pereznieto fundó y encabeza, desde hace
34 años, el Seminario Nacional de Derecho Internacional Privado
y Comparado.
“Es un evento anual que se realiza
en distintas casas de estudio del país, con la idea de compartir
y extender, desde la Universidad Nacional, el conocimiento en esta
especialidad”, afirmó.
Consultor y árbitro en asuntos jurídicos
en la materia, relacionados con la familia, el comercio y los tribunales
entre México y otras naciones, busca coincidencias entre las
legislaciones de diferentes territorios para llegar acuerdos entre
empresas, o miembros de una familia con distintas nacionalidades.
Para interpretar las diversas leyes y lograr
que sean compatibles, recurre al derecho comparado, un “puente”
que permite el análisis de fondo y la búsqueda de acuerdos
entre las partes (personas o empresas) de diversos orígenes.
Positiva, la apertura comercial
Pereznieto consideró positiva la apertura
comercial y jurídica que ha tenido México desde hace
varias décadas, primero mediante la integración al Acuerdo
General sobre Aranceles y Comercio (GATT, por sus siglas en inglés),
luego con el Tratado de Libre Comercio (TLC) con América del
Norte, y más recientemente, con una globalización que
va de la economía a la información y la cultura.
“Creo que México resolvió
un problema estructural al abrir sus fronteras al comercio. Lo recomendé
en un libro que publiqué en 1976, pero entonces fui muy criticado.
Creo que la apertura ha sido positiva”, destacó.
Sin embargo, consideró que, para aprovechar
los tiempos globalizadores y fortalecer la economía mexicana,
hace falta producir en mayor medida, generar más empresas y
empleos, así como concentrar las finanzas en áreas donde
el país tiene ventajas comparativas, como en las hortalizas,
progamas de cómputo, y en el desarrollo de partes para la industria
aeronáutica y automotriz, entre otras.
“México está ubicado
en el lugar 11 como exportador en el mundo. Necesitamos una expansión
interna de ese esfuerzo, que la industria provoque un mayor crecimiento
del mercado nacional y que se refleje en mayor número calificado
de empleos”, opinó.
Para consolidar el mercado interno y pasar
a una nueva etapa, de maquilador a generador de una industria propia,
recomendó impulsar la educación, ciencia, tecnología
e innovación. “El Estado debe decidirse a invertir en
esos rubros, donde está el verdadero desarrollo y la competencia
internacional”, concluyó.
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