• El curso Tópicos Modernos sobre la Química de
los Productos Naturales, impartido en el Instituto de Química
de la UNAM, reunió a investigadores y a especialistas en diseño
de medicamentos y agroquímicos
• El objetivo es actualizar a profesores de bachillerato y a
estudiantes de licenciatura y posgrado en estos temas, explicaron
los organizadores
El proceso para obtener principios activos está encaminado a
encontrar compuestos útiles en la industria farmacéutica;
no obstante, su investigación podría abrir nuevas rutas
y obtener compuestos terapéuticos para los padecimientos. Quizá
en un futuro no lejano se podría encontrar algún metabolito
secundario con actividad para hacer frente a enfermedades.
Con el objetivo de actualizar a profesores
de bachillerato y coadyuvar en la formación de estudiantes de
licenciatura y posgrado, se llevó a cabo el curso Tópicos
Modernos sobre la Química de los Productos Naturales, en el Instituto
de Química (IQ) de la UNAM.
En la sesión dedicada al Aislamiento
y Caracterización de Principios Activos Naturales, enfocada a
las metodologías y herramientas para aplicarlas en pequeños
proyectos con alguna utilidad escolar o de investigación, Martha
Lydia Macías Ruvalcaba, investigadora del IQ, expuso los principios
para obtener sus principios activos de plantas de uso en la medicina
tradicional.
Durante la sesión, la especialista explicó cómo
se valida preliminarmente, con una metodología química,
el uso de tales tipos de plantas.
“Por ejemplo, si hablamos de una para dolores intestinales, en
principio podemos preparar una infusión o una decocción
de esta especie. Pero también, científicamente, es factible
preparar un pequeño extracto orgánico y realizar una evaluación
sencilla. Asimismo, se puede confrontarlo con un microorganismo o alguna
bacteria para saber si posee actividad antimicrobiana”, expresó
la química.
Otro de los objetivos del curso fue, mediante los profesores de bachillerato,
transmitir a estudiantes esta información y crear el interés
por el estudio de los productos naturales de origen vegetal y microorganismos,
que tienen aplicaciones amplias, y así contribuir al conocimiento
de nuevas moléculas que reporten actividades biológicas
similares o mejores, tanto en fármacos como en agroquímicos.
Ante un público integrado por profesores de educación
media superior y estudiantes de licenciatura y posgrado, la investigadora
presentó metodológicamente las facetas de la recolección
y proceso de los materiales vegetales proclives a estudios químicos.
No sólo se refirió a la desecación en el laboratorio,
sino a fenómenos como la liofilización o la hidrólisis.
Además, abundó en la curación y fragmentación
de las plantas medicinales, en este caso, para detallar los métodos
de extracción (percolación y maceración, por ejemplo).
También hizo un recuento de los instrumentos y equipos utilizados
en el proceso de obtener metabolitos secundarios, es decir, los principios
activos de las plantas medicinales.
Cabe destacar el uso de la cromatografía en la purificación
de los principios activos. De esta metodología, resaltó
la Noesy (anagrama de Nuclear Overhauser Effect SpectroscopY) y la HMBC
(siglas de Heteronuclar Multiple Bond Correlation), destinadas a determinar
la estructura molecular de los objetos de estudio.
“Para la purificación de los metabolitos o principios activos
se usará la recristalización. También puede emplearse
nuevamente un método cromatográfico. En este caso, puede
ser preparativa o de líquidos; destilación o sublimación.
Aquí es importante tener en cuenta cuáles serán
los criterios de pureza. En el caso de una recristalización,
se hace hasta punto de fusión constante para el caso de los sólidos.
Para los aceites, es punto de ebullición. En el caso del método
de purificación con cromatografía, la homogeneidad cromatográfica”,
puntualizó Macías.
Los metabolitos se obtienen no únicamente de las plantas, sino
también de microorganismos, bacterias, hongos, algas e insectos,
indicó la académica. En efecto, hay un gran trecho recorrido
en este camino de la investigación acerca de planas medicinales.
Es el caso de las líneas de trabajo del grupo de Macías
Ruvalcaba, enfocadas al estudio de hongos endófitos. “Esos
microorganismos pueden constituir fuentes potenciales directas para
el aislamiento de nuevos principios activos de utilidad en agroquímicos
o proponerse como agente de biocontrol”, indicó.
Los trabajos de la investigadora acerca de los hongos endófitos
se han publicado en Fitochemistry y en Journal Chemical
Ecology, revistas internacionales arbitradas.
Otros de los temas abordados por los ponentes (coordinados por Maribel
Espinosa Hernández, de la Escuela Nacional Preparatoria, y Baldomero
Esquivel Rodríguez, del propio Instituto de Química),
fueron Líderes para el Diseño de Nuevos Fármacos,
a cargo de Hortensia Parra Delgado; Aislamiento y Elucidación
Estructural de Sesquiterpenos, Diterpenos y Flavonoides, por Alfredo
Ortega Hernández; Plantas Antidiabéticas, con Manuel Jiménez
Estrada, y Búsqueda de Compuestos Antivirales (VIH-1) en la Flora
Mexicana, a cargo Ricardo Reyes Chilpa.
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