• Los esquemas para solventar el crecimiento, requirieron el
endeudamiento con nuevos intermediarios financieros, afirmó
Alicia Girón González, del Instituto de Investigaciones
Económicas
La crisis financiera en Europa obedeció
a esquemas de financiamiento que solventaron el crecimiento de la región
con la contratación de deuda, a través de fondos de inversión
libre, (“hedge funds”, en inglés), afirmó
Alicia Girón González, del Instituto de Investigaciones
Económicas (IIEc) de la UNAM.
Los países se convirtieron en deudores de nuevos intermediarios
financieros, como despachos, firmas de corredurías de bolsa,
gestoras de fondos y bancos de inversión.
En el XI Seminario de Economía Fiscal y Financiera,
explicó que esa situación pone en duda la continuidad
del euro. Las naciones no pueden enfrentar la deuda, ni el Banco Central
Europeo, negociarla.
Por ejemplo, no se logra un acuerdo para acordar los términos
del adeudo de los montos otorgados por administradoras de fondos de
pensiones, de Alemania y Francia, destacó en el auditorio Ricardo
Torres Gaitán, de la entidad universitaria.
“La moneda única es una camisa de fuerza, donde las políticas
fiscal y financiera están bajo el interés de los acreedores”,
afirmó la galardonada con el Premio Universidad Nacional 2010.
En contraposición, el dólar tiene el privilegio de ser
equivalente monetario y una moneda de reserva internacional. “Es
el instrumento que ha dictado, desde los acuerdos de Bretton Woods,
signados en 1944, la política financiera global”, refirió
en la ponencia Acertijos y enseñanzas: una visión
teórica de la crisis.
El proceso de financiarización global
Entre el 15 de agosto de 1971, en el momento en que se desligó
la moneda del oro, hasta 2008, se fortalecieron nuevos intermediarios
financieros, a través de los procesos de titularización
y financiarización, este último, causa de
la crisis. Corresponde a la compra y venta de activos o títulos
financieros, que puede darse en forma ordenada en el mercado de capitales.
Se convirtió en el eje dominante, desplazó a organismos
creados en Bretton Woods para regular la liquidez, dar estabilidad a
flujos financieros y financiar el desarrollo, fundamentalmente el Fondo
Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM), detalló.
En el nuevo marco, añadió, adquirió prioridad el
financiamiento mediante la titulización a través de fondos
mutuales, de inversión libre, de pensiones, las aseguradoras
y otros inversionistas no institucionales que se convirtieron en los
actores a nivel mundial, por encima de los ban¬cos de desarrollo
y de la banca comercial nacional.
El objetivo de las empresas ya no es la ganancia en el sector productivo,
sino la obtenida por la especulación en los mercados financieros.
“A pesar de que los países crecen, la pobreza se agudiza”,
concluyó.
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