Boletín UNAM-DGCS-099
Ciudad Universitaria.
06:00 hrs. 17 de febrero de 2011

Carlos Gay García


LAS NEVADAS INTENSAS, RELACIONADAS AL CAMBIO CLIMÁTICO

 

• Continuarán en los próximos años, pues a mayor cantidad de calor en la atmósfera, más agua condensada, explicó Carlos Gay, coordinador del Programa de Investigación en Cambio Climático de la UNAM

Las intensas nevadas observadas en el este de Estados Unidos, en el norte de México, e incluso en Europa, son producto del calentamiento global y continuarán en los próximos años, detalló Carlos Gay García, coordinador del Programa de Investigación en Cambio Climático (PICC) de la UNAM.

Ciertos eventos hidrometeorológicos que ocurren pueden causar confusión con relación al cambio climático. Si se habla de este fenómeno, la gente se pregunta cómo es posible que haya fríos intensos y nevadas copiosas. Sin embargo, aclaró, esto tiene una explicación lógica, todo está conectado.

“De los escenarios construidos de principios básicos, se entiende que lo que ocurre con las nevadas intensas es consistente con nuestra idea del calentamiento global. Si hablamos de termodinámica, podemos decir que un gas más caliente, o una atmósfera en estas condiciones, contiene mayor vapor, agua que puede convertirse en lluvia o nieve”, refirió.

El también jefe del grupo Cambio Climático y Radiación Solar del Centro de Ciencias de la Atmósfera (CCA), explicó que en las zonas donde hace frío y las temperaturas son muy bajas, el líquido se transforma en nieve, en vez de lluvia. No obstante, con la siguiente estación esto desaparece.

La situación se repetirá en años venideros, pues aunque la normalidad dicta que el agua se almacena en las regiones polares, glaciares y ríos, ha disminuido. “Los hielos permanentes en el Polo Norte se reducen, incluso esta región se convierte en una isla gélida”, dijo.

El récord de mayor temperatura registrado ocurrió en 1998, cuando se enfrentó el fenómeno de El Niño; de ahí, bajó un poco y se mantuvo. No obstante, es probable que este año y el próximo, se rebase de manera consistente por el calentamiento global.

“Aunque hay fríos intensos y se cuestione dónde está el cambio climático, a la hora de promediar nos percatamos que el planeta se calienta”, señaló.

También, explicó que la inclusión de esquemas y predicciones ha sido útil. Los sucesos actuales están dentro del modelo de lo que se esperaba, construido a partir de patrones que permiten adelantarnos en el tiempo, y los datos obtenidos permiten corroborarlos. “Si nuestra única base fuese la información observacional, tendríamos que esperar una gran temporada para ver modificaciones”.

-o0o-

 

Fotos

Carlos Gay García, coordinador del Programa de Investigación en Cambio Climático de la UNAM.