• Estudiantes de quinto y séptimo
semestre de la Facultad de Derecho ganaron el primer sitio al lograr
cuatro de los cinco reconocimientos otorgados
• Consiguieron los premios al Mejor orador de la ronda final,
Primer lugar de la competencia, Mejor memorial (escrito) del Estado,
y Mejor orador de la competencia
Estudiantes de quinto y séptimo semestre
de la Facultad de Derecho (FD) de la UNAM, obtuvieron el primer lugar
en el concurso Eduardo Jiménez Aréchega 2010,
que organiza la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Hace 10 años que alumnos de esta entidad
no obtenían el triunfo en el certamen; hoy, con el esfuerzo
y tesón del equipo universitario, compuesto por cinco integrantes
y un coach, fue posible alcanzar de nuevo el primer sitio,
al conquistar cuatro de los cinco reconocimientos otorgados.
Los cuatro galardones que los jóvenes
trajeron a México fueron: Mejor orador de la ronda final; Primer
lugar de la competencia; Mejor memorial (escrito) del Estado y, el
último, Mejor orador de la competencia.
Daniel García obtuvo el premio al
Mejor orador de la competencia, y Jimena Vilchis al Mejor orador de
la ronda final. Los otros dos galardones fueron para el equipo en
conjunto.
En entrevista, Daniel García, del
quinto semestre de la FD, expuso que participar en este tipo de concursos
desarrolla una conciencia crítica y habilidades para la investigación;
es una experiencia que, en materia social, deja un gran aprendizaje,
pues brinda la oportunidad de conocer a personas de otras partes del
continente.
“Nos enfrentamos a 10 equipos de siete
países: dos mexicanos, dos costarricenses, dos más de
República Dominicana, uno de Guatemala, otro del Salvador,
uno de Colombia y el último de Panamá”, enumeró.
Por su parte, Sergio Méndez, coach
del equipo, mencionó que el torneo es uno de los más
importantes de Latinoamérica, porque la ronda final se lleva
a cabo en la sede de la Corte Interamericana, y en esta ocasión,
fue presidida por el juez de la Corte, Manuel Ventura Robles.
Asimismo, subrayó que como parte del
premio, los estudiantes obtuvieron dos pasantías que les permitirán
ir a la Corte e involucrarse más en los temas del Sistema Interamericano.
A su vez, Jimena Vilchis, del séptimo
semestre, indicó que representar a la UNAM fue una experiencia
única.
“Este tipo de competencias valen la
pena no sólo por los premios, sino por lo que los alumnos aprenden
y lo que se puede poner en práctica. Es una experiencia inigualable
que debería seguirse apoyando para que los demás jóvenes
tengan la misma oportunidad, porque es importante, independientemente
de los resultados”, puntualizó.
Para Roberto Bravo, del quinto semestre de
Derecho e integrante del equipo triunfador, este tipo de competencias
permiten no sólo aprender en materia de derechos humanos, sino
conocer los problemas que en esta rama padecen otras naciones latinoamericanas,
y la perspectiva de otros estudiantes de la región al especto.
“Saber que se puede contribuir con
un granito para que la UNAM siga siendo la mejor de Iberoamérica,
es una gran experiencia como alumno y como universitario; mi compromiso
con esta casa de estudios crece en este tipo de eventos y me obligan
a ser mejor cada día”, señaló.
El concurso consiste en la simulación
de un caso hipotético ante la Corte Interamericana de Derechos
Humanos, en el que se preparan dos roles, de representante de la víctima
y del Estado. Meses antes del concurso, se debe enviar el caso y trabajarlo
para luego defender los alegatos de manera oral, en una audiencia
que se lleva a cabo en San José Costa Rica, explicó
Salvador Guerrero, otro de los integrantes del equipo, del séptimo
semestre de la licenciatura en Derecho.
Este año, detalló, el tema
a discutir fue el de una comunidad afectada por una empresa que desechó
químicos y sustancias tóxicas cerca de la zona; entonces,
la defensa consistía en acusar al Estado de negligente, y la
otra parte, debía demostrar que éste no era responsable
del hecho.
Finalmente, José Ricardo Robles, del
quinto semestre, mencionó que el concurso fue una experiencia
gratificante, pues además de interactuar con alumnos de otras
instituciones, se ponen en práctica los conocimientos adquiridos.
“Estoy seguro que esto me ayudará en mi vida profesional”,
afirmó.
Los universitarios agradecieron al profesor
Ricardo Ortega Soriano, quien asesoró al equipo.
-o0o-