• Se trata de los investigadores
Luis Felipe Rodríguez Jorge; Clementina Merced Yolanda Lastra
y Villar y García Gómez; José Adolfo Rodríguez
Gallardo, y la profesora Elvia Arcelia Quintana Adriano
• El Consejo Universitario también acordó otorgar
las medallas Gabino Barreda y Alfonso Caso a alumnos que obtuvieron
el promedio más alto en bachillerato y licenciatura, y a
los graduados más distinguidos de maestría y doctorado
de 2009
Por unanimidad, el pleno del Consejo Universitario
(CU) aprobó el nombramiento de los nuevos investigadores eméritos
Luis Felipe Rodríguez Jorge, del Centro de Radioastronomía
y Astrofísica; Clementina Merced Yolanda Lastra y Villar y
García Gómez, del Instituto de Investigaciones Antropológicas,
y José Adolfo Rodríguez Gallardo, del Centro Universitario
de Investigaciones Bibliográficas, así como de Elvia
Arcelia Quintana Adriano, de la Facultad de Derecho, como profesora
emérita.
También se acordó otorgar la
medalla Gabino Barreda a los alumnos de bachillerato y licenciatura
que obtuvieron el promedio más alto en 2009.
En sesión ordinaria, el máximo
órgano colegiado de la UNAM aprobó entregar la presea
Alfonso Caso a los graduados más distinguidos de maestría
y doctorado en 2009.
Además, rindieron protesta los nuevos
consejeros universitarios Javier Bracho Carpizo, José Daniel
Manzano Águila, Gabriel Eduardo Cuevas González Bravo,
Verónica Ofelia Villarespe Reyes, Elena Centeno García,
Silvia Estela Jurado Cuéllar y Rosaura Ruiz Gutiérrez,
designados por la Junta de Gobierno como directores del Instituto
de Matemáticas, Escuela Nacional de Artes Plásticas;
de los institutos de Química, de Investigaciones Económicas
y de Geología; de la Dirección General de la Escuela
Nacional Preparatoria y de la Facultad de Ciencias, respectivamente.
También, Héctor Felipe Fix-Fierro,
José Arturo Fernández Pedrero, Iván Ortega-Blake,
Víctor Manuel Mendoza Núñez, Lourdes Margarita
Chehaibar Náder, Renato González Mello y William Henry
Lee Alardín, directores del Instituto de Investigaciones Jurídicas,
Facultad de Odontología, Instituto de Ciencias Físicas,
Facultad de Estudios Superiores Zaragoza, y de los institutos de Investigaciones
sobre la Universidad y la Educación, de Investigaciones Estéticas
y de Astronomía, respectivamente.
Además, los representantes profesores
Jorge Ríos Szalay, propietario, y Benjamín Sánchez
Rodríguez, suplente, por la Facultad de Contaduría y
Administración, designados en elección extraordinaria
de esa entidad académica.
Al inicio de la sesión, el pleno guardó
un minuto de silencio en memoria de Manuel Resa García, Antonio
Minzoni Consorti y Bolívar Echeverría Andrade, profesores
eméritos de las facultades de Contaduría y Administración,
Ciencias y Filosofía y Letras, respectivamente.
Asimismo, en honor del escritor Carlos Monsiváis
Aceves, doctor honoris causa por la UNAM; Benito Rey Romay, investigador
del Instituto de Investigaciones Económicas; Rafael Cordera
Campos, profesor de la Facultad de Economía, y Raúl
Béjar Navarro, investigador del Centro Regional de Investigaciones
Multidisciplinarias de esta casa de estudios.
Precursor de la radioastronomía
Luis Felipe Rodríguez Jorge es originario
de la ciudad de Mérida Yucatán, donde realizó
sus primeros estudios. Obtuvo la licenciatura en Física de
la Facultad de Ciencias de la UNAM en 1973 y el doctorado en Astronomía
en la Universidad de Harvard en 1978. Su tesis doctoral fue reconocida
con el Premio Robert J. Trumpler de la Sociedad Astronómica
del Pacífico, otorgado anualmente a la mejor tesis de doctorado
en América del Norte.
Fue el iniciador de la radioastronomía
en México; en 1979 se incorporó al Instituto de Astronomía
de la UNAM. Es investigador titular “C” en el Centro de
Radioastronomía y Astrofísica, del cual fue fundador
y primer director. También es investigador nacional de excelencia
del Sistema Nacional de Investigadores. Ha publicado más de
300 artículos científicos, que han obtenido más
de 11 mil citas en la literatura especializada. En dos ocasiones,
artículos suyos han merecido la portada de la revista Nature.
Sus investigaciones han sido fundamentales
para entender el nacimiento y la juventud de las estrellas, así
como la formación de planetas a su alrededor. Sus descubrimientos
permitieron confirmar que las estrellas jóvenes están
rodeadas de discos protoplanetarios formados de gas y polvo de los
cuales se condensan los planetas, como ocurrió en el caso de
nuestro sistema solar. Fue codescubridor de los llamados flujos bipolares
moleculares, que llevaron a revisar el paradigma de la formación
estelar, que hasta entonces sólo contemplaba acreción
hacia la estrella para incluir también la expulsión
de gas hacia el medio circundante.
Alrededor de las lenguas indoamericanas
Yolanda Lastra es antropóloga con
maestría en Lingüística por la Universidad Georgetown
de Washington DC y doctorado en la misma especialidad por la Universidad
Cornell de Nueva York. A lo largo de su formación, tuvo contacto
con destacados especialistas en el campo de la lingüística,
como Robert Stockwell, Paul Garvin y Charles Hockett, uno de los exponentes
más importantes de la lingüística estructural americana,
y en el de la antropología y etnología con John Roberts
y Allan Holmberg.
Desde su ingreso a la UNAM, en agosto de
1968, ha mantenido tres grandes líneas de investigación,
dentro de las que se ubican algunos de sus logros más sobresalientes.
En primer lugar, el intenso trabajo dedicado al estudio de las lenguas
indoamericanas; en segundo, su labor precursora en la sociolingüística,
con un importante papel en la difusión de las ideas, los temas,
los debates y los métodos y, en tercero, sus trabajos sobre
el español de México, que han abierto también
nuevas vetas a la investigación.
Especialmente, destaca su papel como coordinadora,
desde la UNAM, del Archivo de Lenguas Indígenas —proyecto
del Centro de Estudios Lingüísticos y Literarios de El
Colegio de México que lleva, hasta hoy, 29 lenguas registradas
y documentadas lingüísticamente. También, su participación
en el proyecto de la UNESCO, Atlas de lenguas en peligro de extinción,
y el registro realizado municipio por municipio, junto con Fernando
Horcasitas, de la situación lingüística, dialectal
y sociolingüística del náhuatl.
La práctica bibliotecaria
El trabajo de José Adolfo Rodríguez
Gallardo es especialmente relevante; su visión y su desempeño
logró que la práctica bibliotecaria se convirtiera en
una disciplina académica en nuestro país y en el ámbito
internacional. Su labor permitió mostrar que esta disciplina
contaba con principios y métodos científicos que posibilitaban
la expansión del conocimiento y la reflexión sobre procesos
recientes o antiguos.
Fue un estudiante que tuvo el privilegio
de ser alumno de humanistas como José Gaos, Luis González
y González, Juan Ortega y Medina, Silvio Zavala, Leopoldo Zea
y Luis Villoro, entre otros, lo que le permitió replantear
a la disciplina como una parte importante de las humanidades.
Maestro en Historia, equivalente a la licenciatura
por El Colegio de México en 1964, maestro en Bibliotecología
por la Universidad de Texas en Austin en 1970, y doctor en Pedagogía
en 1998 por esta casa de estudios, le han permitido tener una visión
muy amplia del quehacer bibliotecario.
Maestra de toda la vida
Elvia Arcelia Quintana Adriano realizó
sus estudios de bachillerato, licenciatura en Derecho, maestría
en Administración Pública y doctorado en Derecho en
el seno de la UNAM. Por su excepcional desempeño académico
obtuvo diversas becas en el extranjero, entre ellas, una de la Fundación
Friederich-Ebert-Stiftung, en la República Federal de Alemania,
y del Centro de Estudios Cooperativos y Laborales Histadrut en Tel-Aviv,
Israel. Realizó dos estancias posdoctorales, una en la Universidad
de Ottawa, Canadá, y otra en la República Democrática
de Corea.
Con una trayectoria universitaria de más
de 42 años de docencia, la novedosa metodología propuesta
en el diseño de su obra le ha permitido revolucionar el proceso
enseñanza-aprendizaje, lo que ha facilitado la búsqueda
de información de los estudiosos del derecho; incorpora en
sus textos, como material de apoyo y síntesis de los contenidos,
una gran cantidad de mapas conceptuales, que muestran los conocimientos
a los alumnos.
Ha concretado, con su trabajo docente, el
desarrollo de un estilo preciso y particular en la transmisión
del conocimiento, en el que se pueden apreciar la metodología,
las técnicas de investigación, así como la claridad
en el lenguaje jurídico utilizado en sus textos, con los que
conduce y trata los diversos tópicos de la disciplina que ha
manejado como una línea sólida y consistente de docencia
e investigación, lo cual se puede constatar a través
de la lectura de sus obras.
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