• El rector de la UNAM dijo que no existen destinos
manifiestos y tampoco inalterables, y que ningún proyecto
de desarrollo vale la pena si no tiene como propósito la
mejoría de las condiciones de vida de la gente
• En sesión solemne, el Congreso estatal entregó
un reconocimiento a esta institución por su centenario como
Universidad Nacional de México
En la Universidad Nacional entendemos que
nunca será posible resolver un problema con disimulo, ocultamiento
o negación, estableció el rector de la UNAM, José
Narro Robles.
México, apuntó, debe definir
sus problemas y soluciones con altura de miras y como lo hicieron
otras generaciones, es decir, a partir del hecho irrefutable que no
existen destinos manifiestos y tampoco inalterables. Si se ha agotado
lo que antes nos servía, se debe cambiar de rumbo para generar
nuevos aciertos, planteó.
Los nuevos cursos del progreso, advirtió,
deben poner en el centro del interés al desarrollo social.
Ningún proyecto vale la pena si no tiene como propósito
la mejoría de las condiciones de vida de la gente; asimismo,
es necesario atender, en especial, dos segmentos sociales: los marginados
de siempre y los jóvenes, presente y futuro del país.
En sesión solemne de los integrantes
de la LVII Legislatura estatal, esta casa de estudios recibió
un reconocimiento del Congreso local por sus primeros 100 años
como Universidad Nacional de México.
En el salón de plenos, el rector Narro
dijo que los nuevos imperativos éticos hacen insostenibles
los niveles de pobreza, desigualdad, ignorancia y exclusión
que nos caracterizan. Sin cambios, añadió, “nos
condenaremos a la dependencia y la maquila”.
Ante ello, acotó, se deben construir
los consensos que posibiliten el diseño de una agenda de renovación
nacional, que fije las metas del desarrollo esperado y las estrategias
para conseguirlo.
Además, es indispensable avanzar en
la democracia, fortalecer el federalismo, conseguir mayor gobernabilidad
y un mejor equilibrio entre los poderes públicos.
En su intervención en la tribuna,
Valentín Meneses Rojas, secretario de Gobernación de
Puebla, señaló que hablar de la UNAM es referir la investigación
científica y humanística que se hace en el país.
Es factor de cambio, transformación y desarrollo, apuntó.
Por su parte, el diputado Humberto Aguilar
Viveros, presidente de la Gran Comisión del Congreso del estado,
externó que a 100 años de su fundación, esta
casa de estudios cumple con su papel de universidad pública;
es generadora de una identidad propia, porque sus egresados reconocen
su papel de servir a la sociedad.
En la ceremonia, en la que el presidente
de la Comisión de Educación del Congreso, Eugenio González,
leyó el acuerdo que aprobó el reconocimiento, intervinieron
en la tribuna cameral los coordinadores de las seis fracciones parlamentarias
representadas en el legislativo poblano.
En primer término, la representante
de Convergencia, Carolina O’Farrill, indicó que la UNAM
tutela el patrimonio común de los mexicanos. El petista Manuel
Fernández García apuntó que a lo largo de su
historia la institución ha contribuido para configurar una
herencia cultural e ideológica invaluable en el país.
En tanto, Irma Rosas, del PRD, planteó la necesidad de fortalecer
a las instituciones de educación públicas, pues de lo
contrario no podrá pensarse en el progreso.
Posteriormente, Gustavo Espinosa, de Nueva
Alianza, exaltó las aportaciones de la UNAM; “ha contribuido
en forma imprescindible en la promoción de los cambios sociales
a favor del bienestar en la sociedad y del progreso”. Después,
la panista Leonor Popócatl Gutiérrez, sostuvo que la
Universidad ha sido capaz de incidir en el destino nacional, mientras
que el priísta Pablo Hernández del Campo, puso de relieve
que la educación es el único camino del progreso.
Estuvieron, entre otros, el ex rector Octavio
Rivero Serrano; Rafael Moreno Valle Suárez, presidente de Fundación
UNAM; el magistrado Juan José Barrientos, representante del
Poder Judicial; Carmen Erika Suck Mendieta, presidenta de la Mesa
Directiva del Congreso del estado, y Blanca Alcalá Ruiz, presidenta
municipal de Puebla.
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