• El rector José Narro Robles dijo que
uno de los grandes problemas que ha padecido México es que,
de pronto, se vive la incapacidad de planear
• Se inauguraron cinco nuevos laboratorios de la Unidad Académica
de Sistemas Arrecifales
En las últimas décadas, uno
de los grandes problemas que ha padecido nuestro país es que,
de pronto, se vive la incapacidad de planear. Se pensó que
los mercados podrían resolver todos los asuntos, incluida la
planeación, estableció el rector de la UNAM, José
Narro Robles.
Para qué invertir esfuerzos en planear
algo si los mercados, esa entelequia poderosa, son los que dictarán
lo que tiene que pasar. Pero lo que ha sucedido con eso es un desastre,
subrayó al inaugurar las nuevas instalaciones de la Unidad
Académica de Sistemas Arrecifales (UASA) del Instituto de Ciencias
del Mar y Limnología (ICMyL) de la UNAM, donde se profundizará
en el estudio de ese entorno biótico.
Por ello, opinó, desde la Universidad
Nacional se tiene que retar esa forma de ver la vida y el desarrollo
de las instituciones, y pensar qué se debe hacer.
La Universidad, por su biografía,
tiene un rol particular, y la sociedad espera que cumpla ese papel.
“Si no la cuidamos y no la consolidamos, le haremos un daño
a México”, sentenció.
Por su parte, Leticia Rosales Hoz, directora
del ICMyL, informó que la Unidad cuenta con 12 investigadores,
cuatro becarios posdoctorales, 25 administrativos y alrededor de 30
estudiantes que han logrado, con su esfuerzo y dedicación,
que la UASA sea reconocida como un centro de excelencia por el Banco
Mundial.
Además, abundó, se imparten
cursos internacionales con una gran demanda, y la investigación
que se realiza es de frontera, de primordial importancia ante los
cambios climáticos.
En ese sentido, Roberto Iglesias Prieto,
jefe de la Unidad Académica, advirtió que los sistemas
arrecifales constituyen un ecosistema frágil al cambio climático,
además de los daños que implica la elevada tasa de crecimiento
de la industria turística en la entidad en los últimos
años.
Un impulso al estudio arrecifal
La nueva sede tiene un área total
de mil 290 metros cuadrados. Cuenta con cinco laboratorios, con áreas
para servicios académicos, cuarto frío, planta de emergencia
para ultracongeladores, cuarto de comunicaciones, sala de usos múltiples
y aire acondicionado.
Situada en la barrera arrecifal mesoamericana
en el Caribe Mexicano, esta Unidad reúne a un grupo de especialistas
que realizan estudios acerca de la estructura y función del
ecosistema coralino.
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