Boletín UNAM-DGCS-625
Ciudad Universitaria
13:30 hrs. 20 de octubre de 2010

Oscar Ugarteche Galarza


LA CRISIS CAMBIARIA PUEDE ENGANCHAR A MÉXICO POR SU DEPENDENCIA CON ESTADOS UNIDOS

• Estamos obligados, advirtió Oscar Ugarteche Galarza, investigador del IIEc de la UNAM, a cambiar la estructura comercial y diversificar nuestros mercados
• La inestabilidad en el mercado de divisas, explicó, sólo revela que los acuerdos monetarios de 1935, que dieron lugar a la creación del FMI, ya dejaron de existir
• El problema de Estados Unidos, dijo, no es comercial sino fiscal y China ha diversificado su moneda como una divisa de reserva internacional ante la crisis del dólar

Ante la guerra cambiaria que se enfrenta en los mercados, México debe diversificar sus exportaciones y buscar nuevos socios comerciales, para no devaluar su economía -dada su dependencia con Estados Unidos-, por el abultado déficit fiscal que enfrenta ese país, la perspectiva de estancamiento económico y la caída en el valor del dólar, afirmó el académico de la UNAM, Oscar Ugarteche Galarza.

Integrante del Instituto de Investigaciones Económicas (IIEc), advirtió que el problema de México es que tiene un sector exportador rígido y concentrado en un sólo mercado por su proximidad geográfica, y debe abrirse a otros mercados.

Dado que Estados Unidos, Europa y Japón no van a crecer, dijo, al país se le abre la posibilidad de entender el mundo de otra manera, pero debe resignarse menos a las rigideces del TLCAN y buscar una estructura distinta de comercio.

El también coordinador del Observatorio Económico Latinoamericano, y miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), consideró que la guerra de divisas ha dejado en claro que los acuerdos monetarios de 1935, que dieron origen al Fondo Monetario Internacional (FMI), han dejado de existir.

El problema de EU, explicó, no es comercial sino fiscal porque emite bonos del Tesoro para financiar ese saldo negativo y China los compra con su superávit comercial, al igual que lo hace en otros países. Ello le ha permitido diversificar su posición externa y situar el yuan como una moneda de reserva internacional ante la crisis del dólar.

Entonces, abundó, no es que el yuan esté infravalorado, podría incluso estar más fuerte, lo que sucede es que el dólar está en crisis y se ha devaluado frente a otras monedas, no las asiáticas, porque ahora EU no está en posición de determinar qué cosa es o no conveniente para el resto del mundo.

El académico aclaró que no estamos ante el riesgo de una segunda recesión, sino en los efectos de una crisis que inició en 2007, que ha sido profunda y con distintas etapas; primero financiera; luego, la interbancaria con el cierre de créditos (crédito crunch en 2008); después, la comercial que trae consigo desempleo y bajos salarios, y la fiscal.

Esta crisis, resumió, es larga y prolongada, cuyo síntoma está en la lucha monetaria ante la pérdida de liderazgo de Estados Unidos en el mundo, y la necesidad de cambiar la tecnología usada hasta ahora en diversas ramas industriales.

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Fotos

Oscar Ugarteche Galarza, académico del Instituto de Investigaciones Económicas (IIEc).