Boletín UNAM-DGCS-604
Ciudad Universitaria
11:00 hrs. 10 de octubre de 2010

Jaime Mas Oliva


TRABAJA UNAM EN PROTOCOLO DE VACUNA CONTRA PROTEÍNA QUE PARTICIPA EN ATEROSCLEROSIS

• La inoculación va dirigida a un sitio crítico para la función de la proteína transferidora de ésteres de colesterol (CETP)
• Previamente, se creó un equipo diagnóstico para determinar en plasma sanguíneo los niveles de esa proteína
• Ya se tiene una patente de este desarrollo tecnológico en Estados Unidos y la Unión Europea, y otra está en proceso en Canadá

Investigadores del Instituto de Fisiología Celular (IFC) de la UNAM, encabezados por Jaime Mas Oliva, crearon un equipo diagnóstico para determinar, en plasma sanguíneo, los niveles de la proteína transferidora de ésteres de colesterol CETP (Cholesteryl-ester Transfer Protein), directamente asociada al desarrollo de aterosclerosis.

Ya se tiene una patente de ese equipo en Estados Unidos y la Unión Europea, y otra está en proceso en Canadá, y ahora, los universitarios trabajan en el protocolo de una vacuna contra la CETP.

El proyecto, con un sólido sustento de investigación básica, tuvo sus orígenes en estudios iniciados a principios de la década de los 90. Con más de ocho años de investigación, el grupo de Mas Oliva comienza a dilucidar los mecanismos moleculares finos, mediante los que la CETP realiza su función.

El transporte de colesterol en el torrente sanguíneo es un proceso que se efectúa a través de lipoproteínas de baja y de muy baja densidad (LDL y VLDL, por las siglas de low density lipoproteins y very-low density lipoproteins).

Estas partículas transportan el colesterol proveniente del hígado hacia los tejidos periféricos. Se ha visto que altos niveles se relacionan con una mayor propensión a desarrollar aterosclerosis.

Sin embargo, hay otras partículas, como las lipoproteínas de alta densidad (HDL, por high density lipoproteins), que transportan el colesterol en exceso de los tejidos periféricos al hígado, donde es metabolizado en forma de sales biliares. A este proceso, se le denomina transporte reverso del colesterol, por ello, el contenido en las HDL se considera colesterol “bueno”.

La función de la CETP es transferir el colesterol de las HDL a las partículas LDL y VLDL.

Esta función pone en corto circuito al sistema, porque el colesterol que sale hacia el hígado para ser metabolizado en sales biliares es devuelto al sistema, por lo que esa proteína es un potencial blanco farmacológico. Si bien se han hecho estudios con moléculas que pueden inhibir su función, a la fecha no existe ningún medicamento en el mercado que sirva para ello.

“Antes de integrarme al laboratorio de Mas Oliva, nuestro grupo de investigación ya había identificado la región de la CETP, clave para su función, pero no se conocía el mecanismo de ésta. Ahora, se redactan dos artículos en los que se describen las propiedades de esta región crítica para la función de la proteína transferidora, así como el mecanismo molecular fino mediante el cual se hace la transferencia de lípidos”, dijo el estudiante de doctorado Víctor García González, quien participa en el proyecto.

Este conocimiento de ciencia básica generado en el laboratorio de Mas Oliva, ha permitido a los investigadores universitarios ir más allá.

“Hacemos los estudios sobre la vacuna dirigida contra un sitio crítico para la función de la CETP. En este proyecto multidisciplinario, también participan Blanca Delgado Coello, Héctor Malagón, Armando Pérez Torres y, recientemente, María Esther Moreno. Ya terminamos la primer fase de pruebas, con resultados prometedores, y diseñamos la siguiente fase experimental”, concluyó.

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