• Los aparatos administrativos y gubernamentales no bastan para impedir la extinción de biodiversidad, señaló Fernando Cervantes Reza, del IB de la UNAM
• Aunque es una de las más importantes, la mayoría de biólogos y veterinarios desconocen la Ley Federal de Vida Silvestre

La legislación ambiental está dirigida a evitar la extinción de biodiversidad; pero los aparatos administrativos y gubernamentales no son suficientes. Además, un considerable número de académicos no se ajusta a los lineamientos de la misma, por considerar que son trámites engorrosos, señaló Fernando Cervantes Reza.

El secretario académico del Instituto de Biología (IB) de la UNAM, mencionó que la normatividad contempla que las actividades de investigadores tengan una línea legal; se trata de disposiciones que tienen que ver con el uso y manejo de desechos tóxicos para no generar contaminación en el aire, suelo y agua.

Existen leyes para tener acceso a especies vegetales y animales, como la Federal de Vida Silvestre, y aunque es una de las más importantes, la mayoría de biólogos y veterinarios la desconocen. De ahí, la importancia de promover su existencia en los foros científicos.

La Constitución indica que “la flora y la fauna son un bien de la nación, igual que el petróleo y el mar, y por lo tanto, se le trata como tal, sin que pertenezca en lo individual a nadie. Entonces, cuando se hacen colecciones científicas, los investigadores no dejan de estar bajo los lineamientos de la legislación ambiental; tiene que existir un comportamiento conforme a los mismos y registrar la colección respectiva”, explicó.

Para vigilar y dar cumplimiento a la ley ambiental, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), en colaboración con las policías judiciales estatales, y las secretarías de Marina y de la Defensa Nacional, realizan operativos en carreteras para hacer revisiones y detectar si en los vehículos se transportan especies prohibidas.

Sin embargo, la Profepa sólo cuenta con unos 700 inspectores en todo el país, lo que obstaculiza hacer de manera eficiente la fiscalización en mercados que comercian ilegalmente con plantas y animales, comentó.

En entrevista, indicó que si bien las leyes son idóneas en el papel, en la práctica la Secretaria del Medio Ambiente y Recursos Naturales y la Profepa no tienen suficiente personal e instalaciones, y no hay un mecanismo administrativo que les permita darles seguimiento puntual.

Para solucionar el problema y evitar la pérdida de biodiversidad en México y el mundo, se requiere mayor presupuesto y lograr una unión de los diferentes sectores en un frente común

Finalmente, hizo un llamado para que los académicos e investigadores difundan entre el alumnado la importancia de apegarse a la legislación ambiental para contribuir a la conservación de la variedad vegetal y animal.

-o0o-