• Se estima hay dos millones y medio, detalló
la académica de la FMVyZ de la UNAM, Diana Pérez
Covarrubias
• Hay un problema de falta de respeto de la población,
que no está consciente del trato que merecen los animales,
dijo
Unos dos millones y medio de perros callejeros deambulan
por calles del Distrito Federal, y “la situación
es incontrolable y se expande por todo el país”,
aseguró la académica de la Facultad de Medicina
Veterinaria y Zootecnia (FMVyZ) de la UNAM, Diana Pérez
Covarrubias.
En la zona metropolitana, dijo, se estima que anualmente
nacen 128 mil caninos sin hogar, aunque su “número
se incrementa terriblemente”.
Una vez que las delegaciones o jurisdicciones sanitarias
realizan redadas de captura y sacrificio, del total, 14 mil cadáveres
son arrojados a los basureros al aire libre y, en el mejor de
los casos, son incinerados.
El principal problema, destacó, es la falta de
educación en la mayoría de la población,
que no es consciente del respeto que merecen los animales; “cuando
un canino es indeseado, dejan a un lado el sufrimiento que provocarán
con el abandono”.
La gente no da importancia al hecho de soltarlos en
la calle para que paseen o defequen, ignoran que se pueden contraer
diversas enfermedades. Se calcula que 625 toneladas de excretas
circulan en el aire, y constituyen un problema de salud pública,
aseveró.
Es recomendable vacunarlos, desparasitarlos y esterilizarlos
para evitar la procreación indeseada y la transmisión
de enfermedades venéreas; además, en las hembras
se disminuye la posibilidad de desarrollar tumores en las glándulas
mamarias, y en el caso de los machos, en la región testicular.
Pérez destacó la importancia de concientizar
a la población a partir de programas educativos dirigidos
a zonas vulnerables y a los niños.
Cuando un sujeto recoge a un perro callejero, se sugiere
llevarlo al veterinario y brindarle los servicios necesarios para
asegurar la salud del animal y del propietario, recomendó.
En ocasiones, los perros son trasladados a refugios de
adopción para salvaguardarlos, pero a veces los espacios
son insuficientes; además, los centros antirrábicos
de las delegaciones realizan redadas de captura para controlar
la población, y ulteriormente los sacrifican.
La FMVyZ cuenta con la Clínica Móvil, que
recorre zonas de escasos recursos para mantener el control reproductivo
y bienestar de canes y gatos, a través de la esterilización
y aplicación de vacunas, añadió la especialista,
también a cargo de esta unidad.
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