Boletín UNAM-DGCS-761
Ciudad Universitaria
06:00 hrs. 24 de Diciembre de 2009

Laureano Hayashi


TRABAJAN EN LA UNAM, NUEVOS MODELOS DE PREVENCIÓN Y TRATAMIENTO DE CONDUCTAS ADICTIVAS

• Se busca reducir el consumo de tabaco, alcohol y drogas, dijo Laureano Hayashi Martínez, catedrático de la FE de la UNAM
• De 2002 a 2006, el número de adictos a sustancias ilegales creció 50 por ciento, según la Encuesta Nacional de Adicciones 2008

Entre 2002 y 2006, el número de adictos a drogas ilegales en México creció 50 por ciento, y frente a esa realidad, académicos de la UNAM trabajan en la generación de nuevos modelos de prevención y tratamiento de conductas adictivas para reducir el consumo de tabaco, alcohol y drogas.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Adicciones 2008, en ese mismo periodo la cifra de quienes alguna vez han consumido estupefacientes aumentó 30 por ciento; además, uno de los datos más preocupantes es la alta disponibilidad de narcóticos para adolescentes, porque 43 por ciento de los jóvenes de entre 12 y 25 años están expuestos a ellos.

De éstos, la mitad llega a consumir la sustancia de manera experimental, 13 por ciento en forma frecuente, y dos por ciento de hombres y 1.2 de mujeres llegan a niveles de dependencia.


Para enfrentar esas cifras alarmantes, académicos y alumnos de diversas escuelas y entidades de la UNAM, en colaboración con otros organismos, como el Instituto Nacional de Psiquiatría, trabajan en el macroproyecto Desarrollo de nuevos modelos para la prevención y el tratamiento de conductas adictivas.

Laureano Hayashi Martínez, catedrático de la Facultad de Economía (FE) e integrante del macroproyecto, explicó que la idea es presentar a la comunidad universitaria modelos que contribuyan a atender esta problemática y ver la posibilidad de contar con los recursos suficientes para establecer clínicas y áreas donde puedan ser atendidos.

Sin embargo, apuntó que en la línea de investigación “Evaluación económica de las conductas adictivas”, lo más importante es la prevención, orientar a los jóvenes para que se percaten del riesgo, lanzar campañas permanentes de concientización y ofrecer una vida más sana mediante actividades deportivas y culturales.

El economista refirió que en los últimos años el consumo de sustancias activas se ha incrementado porque se convirtió en una mercancía. Si bien se ingieren casi desde la prehistoria, su uso estaba restringido para ciertos estratos sociales, como gobernantes, sacerdotes o brujos, pero no para el pueblo.

Se detectó que las drogas, al convertirse en una mercancía manejable a nivel mundial, generaron grupos de poder, de productores y distribuidores que pelean por el mercado, lo que ha derivado en guerras entre narcotraficantes.

Laureano Hayashi indicó que este fenómeno adquirió auge y una capacidad financiera impresionante. Se pueden lanzar campañas contra el consumo, pero son poco funcionales porque los jóvenes son bombardeados por anuncios de alcohol y cigarrillos en los medios masivos.

El problema de las drogas es que, inicialmente, para el adicto se convierte en un costo porque tiene que invertir parte de sus ingresos para adquirir el producto, pero una vez que alcanza ciertos niveles de consumo, el fenómeno se vuelve social, concluyó

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Fotos

Las drogas se ingieren casi desde la prehistoria; su uso estaba restringido para ciertos estratos sociales, pero no para el pueblo, señaló Laureano Hayashi Martínez, de la FE de la UNAM.

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