Los ingenieros son insuficientes en México y el mundo por lo que es necesario poner en marcha acciones para generar más profesionales, sobre todo de infraestructura, indicó el investigador de la Facultad de Ingeniería (FI) de la UNAM, Manuel Viejo Zubicaray.
El reconocido profesor universitario participó en el ciclo de conferencias El futuro promisorio para los estudiantes de ingeniería, en el que presentó a los alumnos un panorama de la situación actual de esta carrera en el país y el mundo.
A pesar de la crisis económica, algunas áreas de la ingeniería como de la construcción, petrolera o minería que contarán con muchas oportunidades, comentó, pues existe escasez de estos profesionales en México.
En este año, detalló, Petróleos Mexicanos (PEMEX) requirió 259 ingenieros; para el 2010 necesitará nueve mil 862; en el 2011, 15 mil 472.
El 87 por ciento de las matrículas de ingeniería, se concentran en cinco especialidades, de las que Informática es la que tiene mayor demanda con 202 mil 904 estudiantes, indicó; sigue la Industrial, –diseñada por Viejo Zuricaray– con 142 mil 586; Mecánica, con 94 mil 769; civil (altamente necesaria en el mundo) con 65 mil 458, y Electrónica, con 65 mil 388.
Además, cada facultad o escuela del país diseña sus propios planes de estudio: por ejemplo, existen 940 programas de informática, por ejemplo, lo que exige una reforma.
Pero esta situación no es exclusiva de nuestro país; en Japón y Europa, sobran ingenieros en informática y faltan en infraestructura, informó. Esta problemática ha sido rápidamente corregida en el viejo mundo.
En 1999, los jefes de gobierno europeos y los rectores de 40 instituciones de educación superior se reunieron en la Universidad de Bolognia, la más antigua del continente, y los ministros de Educación firmaron una declaración con el nombre de la ciudad sede.
La Declaración de Bolognia, firmada por todos los países de la Unión Europea, consiste en un programa de educación en el que los egresados tienen que ser doctos; ya no se aceptan las licencias y se suprime el concepto de licenciatura y se cambia por el título de “pregrado”.
Éste tiene una duración de tres años, en lugar de siete años y medio (tiempo promedio que tardan los ingenieros en México en terminar la carrera).
Luego de este tiempo se trasladan al sector productivo durante dos años, en donde obtienen el grado de maestría, con la ventaja de que las empresas tienen corresponsabilidad en el otorgamiento de los títulos, indicó. Este sistema ha resultado exitoso y el 80 por ciento de los ingenieros se encuentran empleados.
