Boletín UNAM-DGCS-550
Ciudad Universitaria
Pie de foto al final del
boletín
·
No sólo se expresa contra los indígenas
sino también en prejuicios y exclusión hacia las mujeres, las personas de
escasos recursos o los homosexuales, indicó
·
Actualmente, la palabra racismo ya no
tiene nada que ver con raza, sino con la práctica de la discriminación
manifestada de diversas formas, precisó
En México el racismo no sólo se manifiesta contra grupos étnicos, sino
también en prejuicios y exclusión hacia las mujeres, las personas de escasos
recursos o los homosexuales, afirmó
Por alguna razón, destacó, en nuestro país siempre se ha negado la idea
de que existe el racismo, porque desde nuestros procesos históricos se ha externado
una supuesta igualdad de todos ante la ley.
A estas alturas la palabra racismo ya no tiene nada que ver con raza
sino con la práctica de la discriminación de diversas formas. De hecho, en el
imaginario simbólico de los mexicanos existe todavía la creencia de que la raza
se tiene que mejorar; a ello se agrega el sexo, la posición económica o el
nivel educativo, circunstancias que abren más posibilidades al racismo.
Incluso entre los grupos éticos hay discriminación; por ejemplo, en
Oaxaca, los zapotecos se consideran los mejores y marcan una distancia radical
con otros como los huaves o los chontales, señaló la especialista en psicología
social, subrayó.
El racismo como tal, explicó, básicamente tiene tres componentes. El
primero es individual relacionado con una tendencia común en los seres humanos a
categorizar a las personas.
El tercero, es el aspecto social y se presenta cuando desde las normas
y la ideología favorece la existencia de ciertos prejuicios, detalló.
En ese contexto, consideró, los medios de comunicación tienen mucho que
ver porque aunque el racismo no parece estar tan vinculado a la existencia de
dos razas contrastantes como es el caso de Estados Unidos; aquí se traduce en
lo que sería el ideal de belleza, salud y bienestar social.
Desde este enfoque, añadió, la tendencia es la discriminación inversa o
el decir no voy a tratar mal a los otros pero sí voy a darle mejor trato a los
que pertenecen a mi grupo.
Si bien ha habido un cambio en cuanto a dar mayor participación a las
mujeres, ahora existe un sexismo un poco más benevolente en el que tal vez no
hay agresión física, pero sí se establecen diferencias hacia las mujeres, a esta
condición se agregan aspectos como el económico o el color de piel, advirtió.
En el caso de la homofobia, apuntó, es claro que todavía en nuestra
cultura hay una gran dificultad para aceptar la diversidad de género y tampoco
hemos podido reconocer que los seres humanos tenemos múltiples diferencias.
-oOo-
Foto 01.