Boletín UNAM-DGCS-526
Ciudad
Universitaria
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La mejor opción para
enfrentar la actual escasez de agua es regular su precio, porque favorecería
una mejor administración del recurso, aseguró
Por años, se pensó que
la privatización era la mejor opción, sobre todo en lo que a agua potable se
refiere; sin embargo, no hay que olvidar que este líquido atraviesa por
diversos procesos: se extrae, transporta, almacena, potabiliza, distribuye,
mide y cobra, y todo ello demanda infraestructura, expuso al participar en el
Seminario-Taller Crisis Económica
y Medio Ambiente.
Ante el cúmulo de
procedimientos por los que pasa el agua, la pregunta debería ser, ¿qué es lo
que se puede privatizar?, añadió.
Al hablar de
sustentabilidad, destacó que ésta es una meta a largo plazo que debería servir
como guía para la evaluación, construcción, verificación y readaptación de
políticas públicas en estos temas. “Incluso la recesión financiera puede ser un
momento de reflexión”.
El catedrático recordó
que la crisis del agua es un evento anunciado hace tiempo, generado por una
mala regulación. Se trata de un recurso natural que puede ser renovable o no,
según sea manejado, pero es un acervo “más o menos fijo”. Al respecto, añadió,
su disponibilidad va en pique, porque no ha aumentado su recolección, pero la
población sí.
“Si no hay cambio en
las políticas, la disponibilidad va a seguir disminuyendo”, indicó.
Para concluir, comentó
que las cuencas deben ser autoadministradas con operadores eficientes y tiene
que aumentar el tratamiento de aguas residuales.
Por su parte, el
especialista del IIEc, Alonso Aguilar Ibarra, detalló que algunos sectores
medioambientales como el agua, pesquero y forestal ya estaban en crisis antes
de la contracción económica, y se pueden hacer propuestas y análisis de la
situación para buscar opciones.
Al abordar el tema de
la pesca frente a la emergencia económica mundial, advirtió que aunque no se
sabe cómo se verá afectada, su magnitud dependerá de la política pública
respectiva.
“Hay que erradicar el
intermediarismo, pues esto contribuye a los precios altos en los productos y,
por el contrario, se debe impulsar que sean los mismos pescadores quienes
intervengan en el procesamiento y comercialización de sus productos”, concluyó.
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