12:30  hrs. 30 de agosto de 2009

  

Boletín UNAM-DGCS-516

Ciudad Universitaria

 

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ALOJA ENSENADA AL XXIII CONGRESO NACIONAL DE ASTRONOMÍA

 

  • La sede del Instituto de Astronomía (IA) en Baja California recibirá a unos 200 investigadores y estudiantes que expondrán sus trabajos en 120 conferencias y 100 carteles
  • Búsqueda de vida en planetas extrasolares, nacimiento de estrellas, estructura de la Vía Láctea, materia y energía oscuras y tecnologías para la astronomía serán algunos de los temas, dijo Vladimir Ávila Reese, del IA de la UNAM
  • En el evento se celebrarán los 30 años del telescopio de 2.1 metros, el más grande del Observatorio Astronómico Nacional de San Pedro Mártir

 

Una nueva fiesta de conocimiento se prepara en Ensenada, sede bajacaliforniana del Instituto de Astronomía (IA) de la UNAM. Se trata del XXIII Congreso Nacional de Astronomía, que este año celebrará los 30 años del telescopio de 2.1 metros, el más grande de los tres que tiene el Observatorio Astronómico Nacional (OAN) de San Pedro Mártir.

 

Casi 200 investigadores y estudiantes expondrán sus trabajos de investigación en 120 conferencias –12 de ellas magistrales– y más de un centenar de carteles, explicó el astrónomo Vladimir Ávila Reese, investigador del IA y miembro del comité organizador del congreso.

 

El evento, a partir de hoy y hasta el 5 de septiembre, ha logrado una convocatoria especial, especialmente entre los estudiantes, pues se realiza en el marco del Año Internacional de la Astronomía.

“Entre los temas que se abordarán destacan los planetas extrasolares y búsqueda de vida, el medio en que nacen las estrellas y los objetos que quedan después de su colapso, así como el efecto que éstas tienen con su inyección de radiación y energía cinética al medio interestelar”, adelantó el académico.

 

Los astrofísicos también debatirán sobre los cúmulos de estrellas, la estructura de la Vía Láctea y de otras galaxias, sobre la materia oscura en las que se moldearon las galaxias y acerca de cómo era el medio intergaláctico en épocas pasadas, cuando el Universo era más joven.

 

“Otros temas relevantes serán los nuevos desarrollos tecnológicos para la astronomía y la presentación de proyectos astronómicos clave para México, así como en los que participamos a nivel internacional. También habrá paneles de discusión sobre el rol de la astronomía en la difusión y educación científicas”, añadió Ávila Reese.

 

Un telescopio de 30 años

 

Un capítulo especial del congreso estará dedicado a los 30 años del telescopio de 2.1 metros, el más grande del OAN, que se inauguró en San Pedro Mártir el 17 de septiembre de 1979, cuando dirigía el OAN el investigador emérito Arcadio Poveda Ricalde, principal impulsor del proyecto.

 

El constructor del telescopio fue el ingeniero José de la Herrán, quien continúa enseñando a hacer telescopios en su curso de Universum, el museo de las ciencias de la UNAM.   

 

El telescopio reflector con diámetro de 2.1 metros fue en su tiempo uno de los más grandes del mundo. Ahí, la comunidad astronómica mexicana ha realizado innumerables estudios, muchos de relevancia internacional.

 

“No sólo se trata del telescopio, sino también de los detectores e instrumentos con que cuenta, muchos hechos por nuestros ingenieros instrumentistas que permiten estudiar la luz que llega del cosmos tanto en el espectro visible como en el infrarrojo”, comentó Ávila Reese.

 

En ese equipo se han observado nebulosas planetarias, regiones calientes alrededor de estrellas, regiones de formación estelar,  cúmulos de estrellas y galaxias tanto en el espectro óptico como en el infrarrojo, entre otros objetos celestes.

 

“El tipo de observaciones que se realizan es ese telescopio son tanto de imagen (fotometría) como espectroscopia, con lo cual se infieren todo tipo de propiedades de los cuerpos celestes y el medio entre ellos”, señaló el investigador del IA.

 

En tres décadas, el telescopio de 2.1 metros ha tenido varias modificaciones y reparaciones. Lo que más ha cambiado han sido los detectores e instrumentos periféricos. 

 

“Después de 30 años el telescopio y sus instrumentos ya se quedaron chicos y es ahora fundamental para la astronomía mexicana pensar en un telescopio óptico/infrarrojo de nueva generación, enfocado a resolver los problemas de frontera de la astronomía”, consideró Ávila Reese.

 

Suman fiesta cultural

Por primera vez, al congreso astronómico estará acompañado de un festejo cultural donde cada día habrá actividades artísticas.   

 

El IA de la UNAM, el gobierno municipal de Ensenada y el estatal de Baja California concentrarán actividades artísticas y de divulgación científica en el Primer Festival Nacional del Conocimiento, que incluirá exposiciones fotográficas, conciertos musicales, obras de teatro, presentaciones de danza y actividades de divulgación que estarán abiertas a todo público.

 

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Foto 01.

 

El astrónomo Vladimir Ávila Reese, investigador del IA y miembro del comité organizador del congreso.