06:00  hrs. 28 de julio de 2009

  

Boletín UNAM-DGCS-446

Ciudad Universitaria

 

 

Lilia Enriquez Valencia

Pies de fotos al final del boletín

 

LA AGRICULTURA, PRINCIPAL FACTOR DE LA CRISIS DEL AGUA A NIVEL MUNDIAL

 

  • Consume el 70 por ciento del recurso hídrico dulce disponible en el orbe, dijo, Lilia Enríquez Valencia, del IIEc de la UNAM
  • La distribución geográfica del líquido destinado al consumo humano, que equivale al 2.5 por ciento del total, es inequitativa, y son Asia y América los continentes que reciben mayor cantidad

 

La producción agropecuaria es el principal factor causante de la crisis del agua a nivel mundial, porque requiere del 70 por ciento del recurso hídrico dulce disponible en el orbe, señaló la integrante del Instituto de Investigaciones Económicas (IIEc) de la UNAM, Lilia Enríquez Valencia.

 

En la mesa redonda El agua en el sector agropecuario en el contexto de la crisis actual de este recurso, detalló que la distribución geográfica del producto, disponible para consumo humano a nivel mundial –que equivale al 2.5 por ciento del total–, es inequitativa, y son Asia y América los continentes que reciben mayor cantidad.

 

El ciclo natural ha sido modificado por las actividades productivas humanas y desde hace más de 20 años se encuentra en crisis y necesita restauración, aseguró.

 

Además, agregó, existe exclusión social en la repartición, fuerte contaminación y pervive el riesgo de perder de modo irreversible cada vez mayores cantidades del líquido.

 

La influencia de las actividades productivas en ese deterioro se manifiesta de diversas formas: corrupción por fertilizantes, cría de animales y sistema de riesgo, entre otras, indicó.

 

La lógica bajo la que operan la ganadería y agricultura industrial es contradictoria, argumentó. “Se produce para el mercado, sin saber si habrá consumidores, y no se garantiza la permanencia en calidad y cantidad de los recursos que utilizan”.

 

Pero además, los productos que generan requieren el uso de grandes cantidades de agua. Para un kilogramo de trigo son necesarios 150 litros y para uno de carne 450, ejemplificó.

 

Asimismo, las técnicas modernas de ganadería intensiva consumen 10 mil galones por cada kilogramo de carne, y la mitad de la producción mundial se destina a los animales presos, que reciben dosis hasta 10 veces mayores que los seres humanos, apuntó.

 

Gestión del agua

Por su parte, la investigadora del Colegio de Posgraduados, Jacinta Palerm, expuso un trabajo realizado con Rosa Josefina Bárcenas, en el que abordan problemáticas relacionadas con la gestión eficaz del uso del agua.

 

La especialista, con el nivel III del Sistema Nacional de Investigadores, citó autores que relacionan el nacimiento de la agricultura de riego con el de la civilización, basados en que la primera es la única que produce excedentes.

 

La acción misma del regadío obligó a cooperar para construirlo y provocó la capacidad de coerción, porque para que hubiera civilización existieron propietarios de los excedentes, agregó.

 

Crisis del agua en 5 ciudades

Por su parte, el investigador de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán, Jaime Peña Ramírez, expuso un estudio que realiza en las ciudades cuenca del país: México, Guadalajara, Monterrey, San Luis Potosí y León.

 

Con una perspectiva de ecología política, describió la forma en que estas urbes han reconfigurado la hidrología nacional para atender, cada una por su cuenta, la escasez y las consecuencias.

 

Lo que sucede actualmente con la agricultura y las metrópolis, mencionó, es un problema difícil de delimitar; por ello, su estudio se aboca a una serie de datos sobre esta actividad productiva y el uso del recurso hídrico.

 

León se asienta en un acuífero rico, de donde se obtiene agua del subsuelo y poca de la superficie; tiene una población de aproximadamente un millón 500 mil habitantes que consumen tres metros cúbicos por segundo. En esta región se tiene una actividad agrícola intensiva en cultivos como maíz, alfalfa y hortalizas, en tres mil hectáreas regadas con aguas residuales, abundó.

 

Por su parte, San Luis Potosí cuenta con menos de un millón de habitantes, en su territorio se desarrollan actividades industriales y mineras, consume 2.5 metros cúbicos de líquido y tiene dos mil 700 hectáreas bajo irrigación con el sistema de aguas negras sin tratar.

 

Guadalajara consume 7.5 metros por segundo, llevados de Chapala, aunque a veces el porcentaje es menor. Esta ciudad no afecta directamente a la agricultura, pero sí es perjudicada por una industria impresionante. En un futuro, aspira a obtener agua del Río Verde.

 

El área de Monterrey, señaló, resulta interesante por la población superior a los cuatro millones de habitantes, consume alrededor de 12 millones por segundo, para lo que se abastece de varios frentes, como Linares. La parte sur de la capital, donde sí existe una afectación directa con la agricultura, acarrea el líquido de la presa El Cuchillo.

 

Respecto a la Ciudad de México, concluyó, en el balance hidrológico se tiene un desajuste impresionante porque el porcentaje es de –31 metros cúbicos por segundo. Recibe agua del Cutzamala y del Lerma, tiene un consumo de 70 metros cúbicos por segundo y la envía contaminada hacia el Pánuco.

 

—o0o—

 

 

Foto 01.

 

Las técnicas modernas de ganadería intensiva consumen 10 mil galones por cada kilogramo de carne, aseguró la integrante del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM, Lilia Enríquez Valencia.

 

Foto 02

 

Jaime Peña Ramírez, de la FES Acatlán de la UNAM, señaló que el problema del agua entre la agricultura y las metrópolis es difícil de delimitar.