14:30  hrs. 2 de julio de 2009

  

Boletín UNAM-DGCS-395

Ciudad Universitaria

 

Jaime Martuscelli

Pies de fotos al final del boletín

 

IMPULSAN UNAM Y GOBIERNO CAPITALINO ESTANCIAS DE JÓVENES UNIVERSITARIOS EN EMPRESAS DEL DF

 

  • Firmaron un convenio de colaboración para desarrollar un programa referente
  • El coordinador de Innovación y Desarrollo de esta casa de estudios, Jaime Martuscelli Quintana, señaló que es refrescante y puede convertirse en una fuente de creación de empleos bien remunerados
  • Con esta iniciativa, jóvenes con estudios de maestría y doctorado menores de 35 años, podrán realizar estancias de 12 meses en empresas de la ciudad para participar en trabajos relacionados con la innovación tecnológica, refirió la directora general del ICyTDF, María Esther Orozco

 

Para abrir nuevas rutas encaminadas a la aplicación y uso del conocimiento científico y la innovación en el ámbito productivo, la Universidad Nacional y el Instituto de Ciencia y Tecnología del Distrito Federal (ICyTDF) firmaron un convenio de colaboración para impulsar el “Programa de Estancias de Jóvenes en Empresas del Distrito Federal”.

 

El documento fue suscrito por el coordinador de Innovación y Desarrollo de la UNAM, Jaime Martuscelli Quintana, y la directora general del ICyTDF, María Esther Orozco Orozco, en la planta principal de la Torre de Rectoría.

 

Martuscelli Quintana dijo que este programa abre una valiosa oportunidad para que maestros y doctores en ciencias realicen sus proyectos de innovación en pequeñas y medianas empresas.

 

Se trata, sostuvo, de un mecanismo en el que todos ganan: el egresado de un programa de posgrado al ofrecer su capacidad de investigación y gestión de proyectos tecnológicos a una empresa, fogueándose en el sector productivo, y este último al contar con un joven talentoso para ejecutar el proyecto de investigación. A su vez, el gobierno de la ciudad fomentará el desarrollo de capacidades competitivas en la industria.

 

Martuscelli Quintana consideró que en tiempos tan extremadamente difíciles como los actuales, es refrescante la oferta de este programa, que puede convertirse en una fuente de creación de empleos bien remunerados. Este esfuerzo contribuirá a estimular el futuro de los jóvenes, sin olvidar que la innovación tiene que realizarse al interior de las empresas.

 

Por su parte, María Esther Orozco reveló que el programa puede ser exitoso porque tiene la virtud de conjuntar a empresarios, investigadores, instituciones y vinculadores. En momentos donde el desempleo está a la alza, también es una forma de apoyar a los estudiantes que terminan su maestría o doctorado para que colaboren con las empresas, y los encargados de estas últimas puedan apreciar la capacidad de los recursos humanos que forma la UNAM y otras instituciones de educación superior.

 

La titular del ICyTDF apuntó que gracias a esta iniciativa, jóvenes menores de 35 años podrán realizar estancias de 12 meses en empresas de la ciudad para participar en trabajos relacionados con la innovación tecnológica. Las compañías, entre ellas Laboratorios Silanes, Asesoría Integral Agropecuaria y Administrativa, y el Centro de Investigación en Polímeros de Comex, podrían contratar al becario al término de ese año.

 

El coordinador de la Investigación Científica de la UNAM, Carlos Arámburo de la Hoz, expuso que “no podemos sino felicitarnos porque este tipo de programas existan y se dé la oportunidad de acercar a los egresados que las instituciones de educación superior forman con mucha responsabilidad a nivel de posgrado, con las empresas que requieren incrementar su capital humano”.

La vinculación, precisó, es una de las tareas donde existen muchos pendientes. Las instituciones educativas tienen la responsabilidad de relacionar la capacidad y capital humano que forman con el sector productivo.

 

Los jóvenes podrán aportar su entrenamiento para generar innovación que permita al sector empresarial ser más competitivo en el ámbito global. Es importante que las compañías los incorporen y crean en el talento mexicano, sostuvo Arámburo.

 

En tanto, la diputada Gloria Cañizo Cuevas, presidenta de la Comisión de Ciencia y Tecnología de la Asamblea Legislativa del DF, recordó que el sistema productivo mexicano se caracteriza por la escasa demanda de conocimiento científico, técnico y tecnológico, que lo hace dependiente del conocimiento generado en otros países.

 

Por dependencia tecnológica se destina alrededor del cinco por ciento del PIB a la importación de la tecnología, es decir, más de 40 mil millones de dólares. Además, sólo producimos el 1.37 por ciento de las patentes de nuestro país, y existe poca actividad de investigación en la planta productiva, porque de las cuatro millones de empresas que existen en México, sólo mil 687, es decir 0.04, se encuentran en el registro del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, señaló.

 

El texto del convenio establece que la UNAM trabajará en forma conjunta con las áreas de vinculación de sus facultades, institutos, escuelas y centros para sustentar la participación de sus egresados de los posgrados en el programa.

 

Por su parte, el ICyTDF proporcionará las facilidades para atender a los empresarios y aspirantes interesados, ubicará compañías en el Distrito Federal susceptibles de recibir maestros y doctores, y habilitará el sistema de registro de empresas que quieran participar.

 

También, firmaron el documento la presidenta de la Comisión de Ciencia y Tecnología de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), diputada Gloria Isabel Cañizo Cuevas, y el director general de Vinculación de la UNAM, José Luis Solleiro Rebolledo.

 

Asimismo, se hizo entrega de los primeros apoyos a tres becarios de la UNAM que realizarán estancias en diferentes empresas.

 

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Foto 01.

 

Carlos Arámburo, Gloria Cañizo, Jaime Martuscelli y Esther Orozco, en la firma de convenio entre la UNAM y el ICyTDF, para impulsar el “Programa de Estancias de Jóvenes en Empresas del Distrito Federal”.