Boletín UNAM-DGCS-249
Ciudad Universitaria
Pie de foto al final del boletín
INDAGAN, A TRAVÉS
DE
Cada segundo,
Con esos datos, el investigador del Departamento de Ciencias Espaciales
del Instituto de Geofísica (IGf) de
En
En
Ese viento está compuesto en un 73 por ciento de hidrógeno y un 25 por
ciento de helio, además de algunas impurezas. Sus partículas son básicamente
iones (átomos con carga eléctrica positiva o negativa) que proceden de la
atmósfera solar y que sirven a los científicos para “tomarle el pulso” al Sol.
“Por él se conocen los componentes de la estrella; sus ciclos
energéticos, que suceden aproximadamente cada 11 años, y su edad, que es de
unos cinco mil millones de años, más o menos la mitad de su vida, señaló.
Además, produce explosiones energéticas denominadas “tormentas solares”,
causadas por las manchas solares y otros fenómenos atmosféricos del astro.
Las detonaciones preocupan a los científicos, porque pueden someter a grandes
dosis de radicación y afectar el funcionamiento de las sondas espaciales y de los
satélites de comunicaciones que orbitan el cosmos, indicó.
De forma natural, las partículas de viento solar que son atrapadas en
Naves
espaciales y rayos cósmicos
Para su investigación, Caballero López tiene acceso a datos de las
misiones interplanetarias Voyager 1 y
2 de
Con los datos de ambas sondas, el doctor en física espacial por
“A partir de esos datos se hacen inferencias y labor de física teórica,
hasta lograr proyecciones del Sol en el pasado”, señaló.
También estudia los rayos cósmicos, que provienen de todos los sitios
del cosmos y son 85 por ciento protones, 12 por ciento helio y el resto núcleos
pesados y electrones provenientes, en su mayoría, de nuestra galaxia.
“Tan sólo uno de ellos tiene un millón de veces más energía de la que
puede proporcionar cualquier acelerador, y en sus choques generan 200 mil
millones de partículas en la atmósfera terrestre”, ejemplificó el físico.
El Observatorio Pierre Auger,
recién inaugurado en Argentina, y en el que participan investigadores de
--oOo—
Foto 01.
Rogelio
Caballero, investigador del IGf de
Foto 02
La heliósfera es
una burbuja dinámica de aire que oscila y cambia de tamaño; está bajo la
influencia del viento solar, un plasma altamente energético, que da lugar al
campo magnético interplanetario.