Boletín UNAM-DGCS-003
FES Acatlán
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Guillermo González |
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Pie
de fotos al final del boletín
LAS SOCIEDADES
DIVIDIDAS, TIENDEN A LA AUTODESTRUCCIÓN
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Para que una comunidad sobreviva, se requiere la coordinación entre sus
integrantes a través del diálogo, consideró el coordinador del Programa
de Posgrado de la FES Acatlán,
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En el proceso de comunicación, suelen confundirse diferencias con
agresiones; así, cuando median valores importantes para una de las partes,
dialogar se torna en una traición, dijo
Una sociedad dividida
tiende a la autodestrucción, pues se torna débil y para que una comunidad
sobreviva se requiere coordinación entre sus integrantes, que sólo unidos
mediante la comunicación lograrán el fortalecimiento del núcleo social, señaló
el coordinador del Programa de Estudios de Posgrado de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán,
Guillermo González Rivera.
En este contexto,
precisó que la expresión tiene dos niveles, uno de contenido, con el que se
formula un mensaje, y otro de contenido afectivo, que se refiere al modo de
decirlo, de ahí la importancia de la voluntad para manifestarse y entenderse
como condiciones fundamentales para la apertura del diálogo.
El también
investigador de esa entidad universitaria, señaló que a partir de la
individualidad se establece la conversación, pues el hecho de comprender no
borra ni traiciona la singularidad. “En ocasiones la comunicación es distante,
pero si existe voluntad de escuchar y expresar, el trecho puede ser menor, al grado de desaparecer”.
El ser humano es un
animal de comunicación que requiere reconocimiento, y a través de ella se
vincula con los demás. Asimismo, existen situaciones “de carácter”, que impiden
el intercambio de puntos de vista como la voluntad de ganar; si la meta es ser
triunfador en una discusión, no podrá escucharse a la contraparte, indicó.
Este proceso se
complica, porque suelen confundirse las diferencias con agresiones; cuando de
por medio hay valores importantes para una de las partes, dialogar se asume
como una traición y “los intereses se vuelven un obstáculo para la comunicación”,
añadió.
El diálogo es una
estructura esencial en la vida de los hombres. Funciona para el proceso de
expresión, para ser escuchados, y responde a una necesidad afectiva; además,
ayuda a externar información, y permite coordinar la acción humana.
En este contexto, la
comunicación es compleja, pues se transmiten mensajes envueltos de afectividad;
por ello, a lo largo de la existencia se debe buscar lo común, porque la
contraposición debilita y puede terminar en destrucción. La fuerza que se
podría utilizar para fortalecer y edificar la cultura y el desarrollo, se
desgasta en defensa y ataque, concluyó.
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Foto 01.
La comunicación
humana es compleja, pues se transmiten mensajes envueltos de afectividad,
comentó el coordinador del Programa de Estudios de Posgrado de