13:30  hrs. 25 de Noviembre de 2008

  

Boletín UNAM-DGCS-741

Ciudad Universitaria

 

 

 

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AUMENTA LA VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES

 

 

En el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, estas agresiones siguen siendo un atentado a los derechos humanos y, al mismo tiempo, impiden el goce y disfrute de otras garantías establecidas para las víctimas, señaló la integrante del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades (CEIICH) de la UNAM, Ángela Alarache.

 

Tan sólo en el 2004, mil 205 niñas y mujeres fueron asesinadas en todo el país; cuatro al día, y una cada seis horas. En total, más de seis mil fallecieron por esa causa de 1999 al 2005.

 

En cuanto a la Ley General de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, indicó que ésta es regida por los principios éticos de las garantías como la igualdad, la no discriminación, la libertad, y la dignidad de las personas.

 

Al respecto, la integrante del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), María Etelvina Pérez, añadió que el objetivo de la Ley, es garantizar la seguridad de las mujeres, terminar con la violencia contra ellas, así como eliminar las desigualdades producidas por una legislación que ha transgredido sus derechos humanos.

 

Según ese estatuto, dijo, la violencia feminicida es la forma extrema de trasgresión contra ellas, producto de la violación de los derechos humanos en el ámbito público y privado, conformada por conductas misóginas, que pueden llevar a la impunidad social del Estado, al culminar en homicidio y otras formas de muerte violenta en contra de mujeres.

 

Ello se refleja en las estadísticas, debido a que cerca del 73.7 por ciento de los homicidios contra las mujeres se cometen en el hogar, en tanto que el mayor número de asesinatos hacia los hombres se consuma en la vía pública, señaló.

 

Asimismo, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), del total de mujeres de 15 años y más, el 43.2 por ciento sufrieron algún tipo de violencia a lo largo de la relación con su última pareja.

 

Sobre el mismo asunto, la integrante de la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos, Marisol Serrano Rizo, indicó que diversos estudios señalan que entre 30 y 60 por ciento de las mujeres mexicanas han sido víctimas de algún tipo de violencia, e identifican en la mayoría de los casos a la pareja, como el principal agresor.

 

Según la Organización Mundial de la Salud, en el mundo entre 10 y 69 por ciento de las féminas, en algún momento de sus vidas, han sido objeto de ataques físicos por parte de una pareja masculina.

 

En el auditorio 8 de marzo de 1857 de la Escuela Nacional de Trabajo Social (ENTS) de esta casa de estudios, explicó que la intimidación es una conducta aprendida, que surge a raíz de inequidades sociales, e implica el uso de la fuerza para causar daño físico, sexual, psicológico o económico.

 

En virtud de que realiza con intención y premeditación, no se trata de una enfermedad mental; es un abuso de poder para controlar y ejercer dominio sobre los demás, precisó.

 

Actualmente, también se presenta la violencia simbólica, como la tendencia de los anuncios comerciales a estereotipar a la mujer. Por otra parte, explicó que hay otros tipos de agresiones como  el silencio, la indiferencia, el chantaje  y la negligencia,  que son consideradas actitudes ofesivas que  se presentan preponderantemente hacia las mujeres”, añadió.

 

La especialista en violencia de género, mencionó que se le ha dado mayor importancia a los ataques en el noviazgo, pues este tipo de relación es un microcosmos de las uniones de pareja, que permite conocer y analizar cómo podría ser un enlace conyugal en el futuro.

 

Hoy en día, refirió, se vive un amor en donde se cree que el sufrimiento hace mejores amantes; se piensa que ese sentimiento va vinculado con el sufrimiento y, por lo tanto, se debe permitir todo; la negociación ni siquiera existe.

 

Así, se considera que el afecto tiene que ver con los celos, la codependencia, las concesiones, las agresiones y el perdón a cualquier falta, acotó la psicóloga.

 

Si bien esta conducta es fomentada en buena medida por el entorno social, también se debe reconocer que los medios de comunicación marcan estereotipos y roles de género, que deben cumplir tanto hombres como mujeres, apuntó.

 

Por ello, muchas veces las personas no se percatan que este tipo de relaciones puede ser la puerta de entrada a una relación violenta y, después, esas actitudes son implícitas, y tienden a confundirse con el amor verdadero.

 

El amor maduro significa unión a condición de preservar la propia integridad e individualidad. Se trata de modificar esa idea errónea para construir nuevos vínculos sanos y constructivos, concluyó.

 

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Foto 01

 

La violencia feminicida es la forma extrema de transgresión contra las mujeres, producto de la violación de los derechos humanos, dijo en la UNAM, María Etelvina Pérez, integrante de Inmujeres.

 

 

 

Foto 02

 

Ángela Alarache, del CEIICH de la UNAM, señaló que en el año 2004, mil 205 niñas y mujeres fallecieron a causa de la violencia de género.

 

 

 

Foto 03.

 

Marisol Serrano Rizo, de la Red de los Derechos Sexuales y Reproductivos, comentó en esta casa de estudios que entre 30 y 60 por ciento de las mexicanas han sido víctimas de violencia.