Boletín UNAM-DGCS-599
Ciudad Universitaria
Pie de fotos al
final del boletín
EVITAR QUE
A la gente le gusta la
violencia e incluso le excita; esa conducta tiene sus inicios en la cultura o
en la sociedad y se dirige hacía la familia, aseguró en
Al dictar
Al inaugurar el acto,
la directora de
Ante esta situación,
dijo, los psicólogos tienen la responsabilidad de adquirir herramientas
teórico-metodológicas que permitan abordar el fenómeno para prevenirlo y
erradicarlo, porque las acciones gubernamentales y no gubernamentales son, en
su mayoría, dirigidas a la mujer, dejando fuera al hombre. “Si lo que deseamos
es disminuir la violencia, se debe atender a todos los involucrados”.
Frente a estudiantes y
académicos, Christauria Welland expuso que existen
varias teorías de la agresividad masculina; entre ellas, destaca la que señala
que el mejor predictor no es el género, sino los
trastornos de personalidad.
No todos los
individuos violentos sufren esa perturbación, pero no se puede descartar, pues
la mayoría se relacionan a traumas infantiles. “El maltrato pasa de generación
a generación y está más arraigado en la personalidad de los hombres, pero eso
tampoco es una excusa”, puntualizó.
Por lo anterior, la
autora del libro Sin Golpes, destacó
la importancia de brindar tratamiento a los agresores para garantizar los
derechos humanos de mujeres y niños, así como la seguridad familiar, la
rehabilitación del hombre y, lo primordial, la prevención de la crueldad futura
e intergeneracional.
El objetivo es
fomentar en los varones la responsabilidad de su violencia, pues si continúan
culpando a la mujer, al alcohol y a los trastornos infantiles, nunca podrán
erradicarla de su vida
Aunque en pocas
ocasiones ha tenido como paciente a una agresora femenina y a una víctima
masculina, este tipo de parejas existe entre los mexicanos, aunque reconoció
que son más comunes en países como EU, destacó.
Desde esa perspectiva,
la intimidación es mutua, aseveró. Un estudio que se llevó a cabo en aquella
nación, demostró que es similar el número de varones y mujeres que son rudos
con su consorte; la situación se debe al aumento en la equidad de género.
-oOo-
Foto 01
La violencia tiene sus inicios en la cultura o en la
sociedad y se dirige hacía la familia, aseguró en
Foto 02.
En
Foto 03
El objetivo de los tratamientos para varones agresivos
es fomentarles la responsabilidad de su violencia, pues si continúan culpando a
factores externos, nunca podrán erradicarla.